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Renato manejo durante mas de cuarenta minutos  hasta una playa fuera de Lima, el camino fue algo silencioso solo ibamos escuchando música y el sonreia cuando me veia cantar. Quería distraerlo, sus ojos reflejaban tantas emociones,  pero sobre todo una gran necesidad de desahogar una gran peso guardado en lo más profundo del alma.

Estaciono en un mirador y bajo el volumen de la música, dio un largo suspiro, golpeó su frente contra el timón del auto. Nos giramos casi al mismo tiempo y me dio una de esas sonrisas que me gusta. Pero sus ojos aún reflejaban trsiteza.

Y bien ? - le digo- ¿Cuéntame ?

El suspira - Es que no se , son tantas cosas.... todo empezo el dia qe Lucas se puso mal en el escuela, lo tuve que llevar de emergencia a la clinica, llegaron sus abuelos maternos y empezarón a reclamarme que no cuido bien de él, que no soy buen padre, que me dedico más al trabajo que a mi hijo, que asi como no supe cuidar a su madre tampoco lo hago bien con él. - la tristeza en su mirada era enorme , tenia la mirada en el mar . Son los mismos reproches y reclamos que vengo escuchando desde hace tiempo. A veces simplemente no puedo más.

¿Porque te dirian algo asi ? - le pregunto,  trato de darle una mirada de ánimos, verlo así tan vulnerable me hace sentir tantas emociones que no capaz de explicar porque ni yo misma entiendo que me sucede con este hombre - Te he visto con tu hijo y me doy cuenta que lo adoras y él a ti. Muchos deberían aprender ... - me calló porque no deseo ponerme emocional.

Ellos me culpa de la muerta de mi esposa- empieza a decir y me doy cuenta que necesita desahogarse- El dia que ella murio regresabamos de una fiesta, yo iba conduciendo, no habia bebido, no la hacia porque a ella no le gustaba y por su embarazo para poder estar atento, ibamos discutiendo ella se puso celosa de una amiga que me estaba coqueteando durante la cena,  pero yo ni caso le hice, yo amaba a mi esposa y no tenia ojos para  nadie más, en un momento ella se saco el cinturón de seguridad porque le incomodaba por la barriga y no me permitió volver a ponérselo  - vi como sus ojos se llenaban de lágrimas - un auto nos choco, el impacto fue en su lado y dimos varias vueltas de campana. Estuve inconsciente unos minutos , cuando desperté la ambulancia ya había llegado y ella  estaba muy herida, llegamos al hospital y  tuvieron que hacerle una césarea para poder salvarle la vida a Lucas, pero ella entro en coma, a los dos meses del accidente ella murio, su cuerpo no pudo recuperarse de las heridas internas.

Oh Renato - le digo, su historia me ha conmovido y no se cuales serian las palabras correctas para decirle en este momento,  pero creo que demostrar mi apoyo podría aliviar en algo todo lo que lo agobia en este momento- cuanto lo siento, no tenia idea.

No tienes idea de como dolio- me dice y veo como sus manos aprietan el volante - Perdi al amor de mi vida de un momento a otro, y no tuve ni tiempo de llorarla porque debia ser fuerte por mi hijo, pero cuando me dicen ese tipo de cosas, siento que no soy un buen padre, te juro que me esfuerzo ... pero .. ay no sé- esconde su rostro entre sus manos y el volante, no sé porque, fue un impulso pero lo jale del brazo y lo abrace, con cuidado acaricie su espalda, se sentia tan bien y lo oi suspirar.

Tome su rostro entre mis manos - Eres un buen papá, estas ahi con tu hijo, te dedicas a él - no puedo evitar derramar algunas lágrimas yo - Hay otros que se olvidan que sus hijos los necesitan, para ti pudo ser fácil hacer que sus abuelos se encargen de Lucas, pero te quedaste ahi con él, eso te hace un buen papá y un gran hombre.

El me mira y veo como ha derramado varias lágrimas- Gracias Sofia  - me dice y sonrie - no sabes como necesitaba que alguien me diga ese tipo de cosas. Sabes, nunca habia hablado de todo esto con nadie y me alegra haberlo hecho contigo.

Le devuelvo la sonrisa y nos volvemos a abrazar. Se siente tan bien, hace tanto tiempo que no sentia algo como  esto.

¿Nos vamos ? - le digo - Hoy Julio sale temprano de la escuela y quiero llevarlo a comer algo.

Me mira como si evaluara muy bien lo que va a decir - ¿ Podemos Lucas y yo unirnos a ustedes?- me dice - Él casi no tiene amigos y con tu hijo se le hizo tan fácil congeniar.

Claro - le digo, la idea de estar con los dos niños me da mucha alegria - Vayamos por ellos - y no dejo de sonreir.

Oye ... si hubiese sabido que sonreirias asi por tener a los dos chicos juntos hace tiempo te lo hubiese  propuesto- ahora él sonrie mientras se limpia el rostro- ¿entonces vamos por ellos?

Vamos- le digo. Muero por ver a esos dos chicos jugar juntos.

Un nuevo comienzo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora