Capítulo 26: Mi rostro

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Dedicado a: CarmenCastro294

-¿A donde vas hijo? -mi madre observa las maletas que había preparado en la puerta.

-Me voy, hoy me mudo a New Haven.

-¿Porque parece que no eres felíz?

-¿Porque lo dices? Estoy felíz,e iré con Carol a vivir a New Haven.

-¿Carol?

-Si.

-¿Así que ya tomaste la decisión?

-Si madre.

-Hijo, no me interpondré, pero si te diré algo que espero te haga pensar. Quizá no lo recuerdes pero yo sí y muy bien. Cuando yo te vi salir por esa puerta con tus maletas porque estabas por irte a vivir con Emma tu sonrisa era mucho mas grande que la de sonriente estabas tan ilusionado  con la nueva etapa que estabas por vivir. Estabas tan nervioso por eso que te habías comido las uñas de los dedos. Pero ahora no veo ni un rastro de emoción por irte con Carol, piensa bien lo que haces. Esto puede no tener marcha atrás.

-Estoy consciente mamá -dicho eso cojo mis maletas y me voy de ahí. El taxi me esperaba en la puerta con la cajuela ya abierta para meter mis maletas, a lo lejos la veo a ella, y ella también me miraba a mí. Lo poco que quedaba de fuerza en mi interior se evaporó sin dejar rastro de alguna vez haber existido. A pesar de la distancia podía ver aquellos ojos que alguna vez me enamoraron frente a ese casillero -Vámonos -le digo al chofer y subo al taxi indicando que valla en sentido contrario al que ella venía, no quería verla de cerca, no quería que me viera sufrir estropeando su felicidad.

Volteo y la veo a ella correr hacia mí pero una vez que doblamos la cuadra de pierde. Quizás sea la última vez que la vea en mucho tiempo y sinceramente espero que así sea.




-No puede ser que de verdad estemos aquí -Carol no deja de brincotear por todo el departamento, todo el viaje la he tenido encima de mí dándome pequeños besos cada que puede y eso me recuerda mucho a su anterior personalidad.

-Si, voy a dormir -voy directo a la cama y me acuesto con la intención de dormir mucho y despertar dándome cuenta de que todo esto sólo fué una pesadilla y mañana iré con ella para decirle que tuve un sueño muy gracioso porque no era verdad y entonces reiremos a carcajadas mientras que Mackensey me advierte que si eso llegara a ser verdad me hará otro moretón a parte de los que tengo en la cara aunque ya no muy marcados por la pomada milagrosa que una vez usó ella; y Will estará diciendo que siempre supo que eso terminaría así dándose aires de profeta, y entonces yo la beso y ella me corresponde diciéndome una y mil veces que me ama.

Sería lindo creer que esto pero ni siquiera mi propio subconsciente se atreve a mentirme.





Siento algo húmedo pasarse por mi mejilla y después algo jalando mi camisa. Siento el pesado sueño en mis ojos que hasta abrir los ojos me da flojera, quizás solo estoy siendo paranoico, estoy solo en mi habitación.

¿Quién podría estar sobre mí?

Quizás es mi madre que se ha colado a mi habitación y al verme  desarropado y en camisa intenta hacer la de mamá de niño pequeño, quiero decirle que se valla y me deje sólo para dormir pero temí tener mal aliento.

Vuelvo a sentir algo mojado esta vez sobre mi pecho y ahora estoy seguro de que eso no puede ser un acto de mi madre y al no tener perro sentí pánico pero sin poder reaccionar. Siento algo posarse en mi pecho nuevamente y que mis pantalones eran tironeados (en el área de mi cinturón para ser más específicos), eso sí me hace reaccionar convenciéndome en definitiva que esto no es un sueño y tampoco mi madre, entonces abro mis ojos para encontrarme con unos ojos azules que me miran de una manera que ni en mil años podría describir, había... ¿deseo? En ellos.

Vuelve a enamorarme chica nerd #IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora