Capítulo 15

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- ¿Cuánto fue lo de Irene?- pregunto sacando su billetera de la bolsa trasera de su pantalón.

- No fue nada- deje mi bolsa en uno de los sillones de la sala- Fue un regalo que yo le hice a Irene- era verdad, además yo que creo que Taeyeon se infartaria con la cuenta, cualquier persona lo haría. Excepto mi madre que tiene cosas más importantes que hacer que revisar en que uso mi tarjeta.

- Claro que no- dijo seria- Te lo pagare ¿Cuánto fue?- pregunto nuevamente.

- Ya te lo dije.

- Si estás tratando de quedar bien, no lo vas a lograr comprando a mi hermana- me señaló con su dedo índice.

- Es de mala educación señalar a las personas- baje se mano- Y no- rei- No estoy tratando de quedar bien, y mucho menos tratando de comprar a tu hermana- no mentía- Además ¿por que me interesaría quedar bien contigo? ¿Quién te crees?- levante mi ceja izquierda.

- ¿Lo ves?- habló y dio un paso hacia mi- Primero me besas, te beso, te 'ofendes'- seguia acercándose a mi y por ende comence a retrodecer- Dices que solo tu puedes jugar conmigo, luego te gustó y ahora no soy nadie importante- su mirada era intimidante- Estúpida pared, como te atreves a evitarme el paso- ya no podía retroceder mas- Ves porque te considero una hueca, egocéntrica, que solo piensan en lo que quiere y conviene, que...- no la deje seguir con mis 'defectos' y como otras veces la tome del cuello y la atraje a mi, solo que ahora yo marcaba el ritmo evitando que notará mi inseguridad ya que no estaba muy confiada de que me siguiera. Pero al parecer me equivoque. Apego su cuerpo al mio, tanto que ni la más mínima corriente de aire era capaz de pasar entre nosotras, sus manos se posaron en mi cintura sosteniendome con firmeza.

Su lengua se introdujo de abrupto en mi cavidad, el roce de su carnoso miembro con el mio era algo delirante. El abastecimiento de oxígeno en mis pulmones comenzaba a disminuir. Me separe de sus labios tratando de recuperar la mayor cantidad de oxígeno posible, eche mi cabeza hacia atrás dándole acceso total a mi cuello, la cual con desenfreno comenzó a besar volviéndome totalmente loca.

Regreso a mis labios, rosaba, mordía, succionaba, hacia con ellos lo que le placia, y por mi, no había problema alguno. Una de sus manos masajeaban mi cintura mortalmente comenzó a bajar hacia mi cadera hasta llegar a mi pierna, alzó a la altura de su cadera, en autamtico encendí y me sujete de su cuello, sin nunca separar nuestros labios me levanto como si pesará menos que una pluma, rapudmanete forme una llave con mis piernas alrededor de su cintura para evitar ser atraída hacia el piso.

Seguía besándome de esa manera tan intensa y única. ¿Pero como podía causar tanto en mi con un simple beso? Eran increíbles las sensaciones que me hacía experimentar.

Una de mis manos se mantenía en su nuca, atrayendola hacia mi dándole mayor profundidad al pasional beso, además me aseguraba de que no se alejara de mis labios, aunque dudo que esté pensamiento le pasara por la mente. Su lengua recorría cada centímetro cuadrado de mi boca, robándose por completo mi abastecimiento de oxígeno, no podía más, era seguir con ese beso pero prácticamente morir. Mi otra mano se encontraba en su mejilla, subí esta haciendo hacia atrás el castaño cabello que caía en su frente, corrí mi rostro unos centímetros solo para poder respirar, pero ella no se detenía. ¿Qué acaso pretendía matarme? Comenzó a bajar con sus besos por mi mejilla hasta llegar a mi cuello. Por instinto eche mi cabeza hacia atrás, dándole acceso total a esa zona tan sensible de mi anatomía. Rosaba, mordía, besaba, simplemente hacia lo que le plácida conmigo. Asi que era hora o nunca, más bien era vakra o más adelante no podré detenerme. La tome de la barbilla y la guíe nuevamente hacia mis labios y la bese nuevamente, como si no hubiera mañana- Dios, esta mujer no puede ser más provocativa- afirmé en mi interior, al mismo timepo que- en contra de mi voluntad- la separe de mis labios uniendo nuestras frentes.

Abrí lentamente los ojos, ya que aún estaba tratando de controlar mi sistema nervioso. Sus labios estaban el doble de gruesos y de un rojo cereza. Me había equivocado. Si podía ser más provocativas. Sus ojos marrones me miraban fijamente, más no fríamente como de costumbre, tal vez me arrepentiría de esto.

-... Y te volví a besar- susurre sobre sus labios con un tono de voz victorioso, antes de deshacer la llave que había formado con mis piernas alrededor de ella.

Me bajo esquivando su mirada, la verdad yo esperaba un '¡Lo ves! ¡Ves como eres!' pero nada. Su cara de estupefacción era indescriptible, no se si era enojo, decepción, fastidio. O tal vez una mezcla de todas. Acomode mi vestido y mi cabello antes de sacarle la vuelta.

- ¿Empezamos con la guía?- pregunté como absolutamente nada hubiera pasado. Me di media vuelta para poder verla, pero ella seguía de frente a la pared, y me ponía algo nerviosa. Tal vez había alterado 'algo' más que su respiración.

Se dio la vuelta y camino hacia mi, mis nervios con obvia razón aumentaron. Todo pasaba por mi mente- ¿un golpe? ¿Violacion?- reí estúpidamente en mi interior por mis tontos pensamientos. Estaba a solo unos centímetros de mi, pero no se acerco a mi como yo creía que lo haría, me saco la vuelta y se dirigió a la mesa que estaba detrás de mi y tomó el enorme paquetes de hojas. Tomó la mitad aproximadamente y me lo entregó. Sonreí y tomé las hojas, mi objetivo era hacerla enloquecer por completo. Y si a la primera me doy el 'paquete completo' no serviría de nada. Además no soy tan fácil. En realidad no lo soy, solo a ella le estoy falicitando un poco las cosas.

Me senté en el sillón donde había dejado mi bolsa, Taeyeon también se sentó pero del otro extremo del sillón, no era mucha la distancia ya que era un sillón solo para tres personas.

- ¿Por qué tan lejos?- pregunté divertida- No muerdo- tome un bolígrafo color rosa de mi bolsa-...A menos que quieras- volteé a verla y una pequeña sonrisa comenzaba a asomarse en su rostro, pero al sentir mi mirada la desapareció- Oh vamos- alargue riendo- Se que quieres reirte- le dije y solo negó con la cabeza sin despegar la mirada de las hojas- Te vuelvo loca, lo se- dije entre risas.

me, myself and i; taenyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora