un nuevo comienzo (La Renia De Auradon 2)(mevie)

Una Nueva Proclama Real

Había pasado ya una semana de la boda de Evie y Mal,  pronto sería la coronación de Mal,  pero eso no las ponía en lo más mínimo nerviosas. 

Aquella mañana las ráfagas de viento eran realmente frías,  y era más que obvio que las personas en Los Estados Unidos de Auradon intentaban cubrirse a toda costa de el frío.  Evie y Mal salieron de el castillo,  Mal llevaba abrazada a Evie por los hombros en un intento de darle más calor,  sus sacos largos hacían que por lo menos el frío fuera un poco soportable,  y los guantes en sus manos guardaban el calor en sus manos.  Las chicas sonrieron al ver que la prensa ya no las perseguía.

—Hace demasiado frío —Dijo Evie temblando en los brazos de Mal. 

Ambas chicas se dirigían a la sala de juntas en el castillo de Aurora. 

—Lo se,  pero falta poco,  además en el auto podremos tener calor —Dijo Mal,  mientras abría la puerta de el auto de Evie.  Ambas se habían negado a ir en la limusina,  ambas querían tener privacidad,  y Mal extrañaba conducir. 

El camino fue largo pero el tiempo paso rápido,  mientras aquellas dos chicas platicaba y reían.  Justo cuando llegaron también llegaron,  Chad junto a sus padres,  el chico estaba a punto de convertirse en rey,  auno que el realmente nunca lo había soñado. 

—Reina Evie,  Lady Mal —Dijo Doug haciendo una referencia hacía las chicas. El chico por fin había superado el crush que tenía con Evie,  y eso tenía a Mal más tranquila,  no porqué no confiara en Evie sino porque sabía lo que podía pasar, después de lo de Ben,  pero eso era pasado.

—Buenos días Doug —Sonrió Evie,  entrando a la sala de juntas

—Doug —Saludo también Mal siguiendo a su esposa,  el castaño le sonrió como respuesta. 

—Bueno,  veo que ya estamos todos así que reina Evie ¿A que se debe la solicitud de de esta Junta?  —Pregunto Aurora

—Pues miren se trata sobre la isla —Dijo Evie suspirando,  sabía que tal vez no todos estarían de acuerdo. Mal tomó su mano en forma de apoyo —Eh estado pensando que aunque sean villanos merecen tener una vida normal,  sin comer basura o estar entre calles peligrosas,  sabemos lo que pasó hace 6 meses y tal vez muchos van a pensar que se merecen vivir en esas circunstancias, pero hay muchos niños ahí y  creo que sería mejor hacer que las personas de la isla tengan mejores condiciones de vida —Evie estaba nerviosa y no se preocupaba en ocultarlo

—Me parece bien,  ¿Que propones?— pregunto Cenicienta, haciendo que los nervios de Evie disminuyeron. 

—Bueno pues e estado pensando que podríamos hacer un nueva isla,  un lugar que tenga casas estables, comida que no este podrida,  y una educación buena —Dijo Evie con media,  sonrisa,  Mal la miraba realmente orgullosa

—No lo creo,  digo ellos son villanos,  no merecen un mejor lugar,  ellos merecen estar ahí —Dijo el Mago Merlín,  quien había ido por parte de el rey Arturo. 

—Disculpe,  señor Merlín pero me parece muy egoísta de su parte esto —Dijo Mal,  el hombre de sombrero la mío con el ceño fruncido. —No todos lo villanos se disponen a destruir el mundo,  sabe que mi esposa y yo venimos de la isla,  y hasta el momento no a  habido algún problema,  y en este mismo instante me pregunto ¿Quienes son verdaderamente los villanos?  Usted no sabe como hay niños ahí,  sin comer en días y cuando lo hacen la comida esta caducada —Prosiguo  Mal molesta

—Pues si están ahí es por algo,  ¿o no?  No creo que estén ahí por un bueno comportamiento —Aquel nombre comenzaba a sacar a Mal de sus casillas

—Todos merecemos una segunda oportunidad,  usted puso en peligro a el rey Arturo y aún así sigue siendo su consejero ¿no es así?  El punto es que ahí hay personas justo como nosotros,  que no merecen esas condiciones de vida,  que aunque hayan hecho cosas malas no merecen vivir entre basura,  casas destrozadas,  no merecen pasar fríos vagando por la calle robando comida,  y no,  no me refiero a los villanos si no a sus hijos —Habló Evie, siendo totalmente sincera y pensando en la situaciones en las que vivían aquellas personas

—Yo Estoy de acuerdo con la propuesta de la reina Evie,  al igual que mi madre ¿no es así? —Dijo Audrey

—Eso mismo pienso

—Y yo —dijo Jazmín levantándose junto a Aladin

—Nosotros también —Dijo ahora Blancanieves apoyando a su media hermana

—Pero... —intento protestar Merlín

—Pero nada. Esta decidido,  se hará una nueva isla,  con estabilidad para que las personas puedan vivir ahí —Dijo Aurora haciendo que aquel molesto mago guardara silencio

—Entonces ¿Todo bien?  —pregunto Evie,  realmente feliz por aquella oportunidad

—Por supuesto que si Evie,  pronto te mandaremos los requisitos que se necesitan para que los villanos puedan cambiar de isla,  tu sabes.  —Dijo Aladin

—Por supuesto —Dijo Evie

Todos los presentes se despidieron,  con una gran sonrisa,  y Justo cuando la puerta iba a ser abierta por un molesto Merlín,  la puerta se abrió de golpe

—¿Ben?  ¿Que haces aquí? —Pregunto Evie confundida

—Eso... Lo hablamos luego, lo importante aquí es que no podemos salir de aquí —Respondió el chico con una risa nerviosa

—No seas tono Ben,  vamos  —Dijo Mal divertida

—Okay escuchen,  hay una gran capa de nieve ahí afuera,  y no hay forma de salir,  las puertas están atascadas ¿Entienden? 

—Maldita sea —susurro Evie —¿Earas seguro?  —El asintió con la  cabeza —Debo llamar a Uma,  ella cuidara Bein de Katherine —dijo Evie alejándose para llamar a su amiga

Mal tomó su teléfono también al igual que todos ahí para hacer llamadas,  pero todo fue interrumpido por el sello real de Arendel

—¡Hola soy la princesa Ana! —Apareció aquella dulce chica en todas las pantallas —O bueno eso ya lo sabemos ¿o no? Bueno eso no importa —Río nerviosa —Solo queríamos decirles que todo lo que esta pasando con el clima es culpa nuestra,  mi hermana no se encuentra muy bien de salud,  pero pronto esto va a cambiar y todo volverá a ser igual,  Elsa y yo nos comprometemos,  a arreglar cualquier caos que ocasione esto,  bueno creo que eso es todo —Sonrió aquella chica acomodando una de sus trenzas —De nuevo una disculpa,  tengan un lindo día —la imagen de Anna desapareció y las aplicaciones volvieron a la normalidad

—Bueno al menos ya sabemos por que pasa esto—Dijo Doug acomodando sus lentes

Nadie prestó atención a lo que dijo,  y siguieron con sus llamadas

—Bien,  como de aquí no podemos salir,  los guardias los llevarán a j habitaciones,  esperamos que se sientan cómodos —dijo Aurora,  todos asistieron no muy convencidos —¡Mal!  —dijo la rubia antes de que ella y Evie salieran de ahí,  Audrey se detuvo también —¿podemos hablar?  Audrey llevará a Evie a su habitación —sonrió Aurora

—E claro —Respondió soltando la meno de Evie

La peli'azul se despido de mal con un beso en la mejilla y Audrey y ella se fueron mientras pláticaban  animadamente. 

—¿Que pasa? —Pregunto cerrando la puerta de la Sala

—Quiero hablar con ella —Respondió Aurora sin mucho trabajo

—¡¿Que?!  Espera ¿con mi madre? —pregunto sorprendida

—Si,  necesito que aclaremos esto,  realmente necesito que sepa la verdad,  también tiene que saber que no fue mi intención abandonarlas —Aurora no se molestaba en ocultar la sonrisa en sus rostro

—Bien... Eh... Evie,  los chicos y yo iremos en unas semanas ¿nos acompañas?  —pregunto Mal

—Bien,  claro,  si —Respondió Aurora