#2| 𝓼𝓮𝓻𝓮𝓷𝓭𝓲𝓹𝓲𝓽𝔂 ➷ 𝐲𝐨𝐨𝐧𝐦𝐢𝐧

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【Capítulo cronológicamente ubicado en el epílogo de TTH】

- ¿Estás seguro de querer hacer esto, Yoongi? – le preguntó Yugyeom por milésima vez en el día.

- Y yo que al principio pensaba que Jimin era insoportable. – murmuró Yoongi, haciendo que Jungkook soltara una carcajada por lo bajo.

- No es momento para que te rías, Kookie. – la mirada de advertencia que le dio Yugyeom, hizo que Jungkook se ahogara un poco con su saliva, haciendo a Yoongi sonreír por primera vez en el dia. – Te pregunto, por qué me preocupo, Yoongi. – el omega rodó los ojos.

- Me has preguntado cinco veces hoy y cinco veces te he dicho que si, Yugyeom. No te preocupes, estaré bien.

Los dos alfas y el omega se encontraban en el auto del castaño, dirigiéndose al cementerio en donde sepultarían el cuerpo de Min Dongyul. Yoongi no tenía intención de aparecerse por allí, él quería irse para Japón cuanto antes, mientras más rápido, mejor, pero ni Jungkook ni Yugyeom se lo permitieron. La pareja convenció a Yoongi que era mejor ir, aunque se quedara alejado de su familia. Aunque en el fondo sabía que, si no iba, se iba arrepentir.

Cuando el auto se estacionó, juntos caminaron hacia la lápida de la familia Min, donde se encontraba toda la familia e incluso algunas amistades de Dongyul. Sunhee, Hoseok, Eunji, Taehyung y hasta los padres de Jungkook se encontraban allí. Yoongi observó el panorama hasta que sus ojos se posaron en Jimin.

Mi Jimin.

El omega pelirosa vestía un traje negro con una camisa blanca por debajo, el alfa de Yoongi se removió ante la vista de su dulce pareja. Yoongi quiso correr hacia su omega y que sus brazos lo apretaran. Quería sentir su delicioso aroma y que las palabras de Jimin lo arrullaran y le quitaran el dolor que estaba sintiendo. Jungkook y Yugyeom caminaron un poco más despacio que el otro alfa, dejando así a Yoongi al frente.

El omega apretó la mano de Jungkook cuando obtuvo el panorama de la familia Min. Yugyeom podía ser un omega con los pantalones bien puestos, pero por dentro era una florecita que se marchitaba rápidamente.

- Hermanos, hoy estamos aquí reunir para despedir a un gran ser humano y padre de familia, Min Dongyul. A un hombre que siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás sin pedir nada a cambio. – Yoongi escuchó al padre empezar a hablar y decidió esconderse detrás de un árbol, cerca de donde estaba su familia. - Le pido de favor a la señora Min Sunhee y a sus hijos que pasen a darle su último adiós. – el alfa observó como Sunhee y Hoseok llegaban hasta donde se encontraba el ataúd. Hoseok agarró a su madre delicadamente por la cintura y sonrió levemente a las señas de aliento que Taehyung le estaba haciendo con las manos y con la boca.

Quiero sostenerte, mi Jiminie.

El padre observó que solamente estaba uno de los hijos allí y la verdad era que nadie sabía en donde Yoongi se había metido. Ni siquiera Jimin. Todos habían tratado de llamar al alfa, pero Yoongi los ignoraba. No quería que nadie, a excepción de Jungkook y Yugyeom, supiese donde se encontraba.