El Cantante II Parte

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Después de esa tediosa y aburrida reunión, regrese a mi oficina sin ánimos  de nada, pero al ver las flores una tonta sonrisa se dibujó en mi rostro

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Después de esa tediosa y aburrida reunión, regrese a mi oficina sin ánimos de nada, pero al ver las flores una tonta sonrisa se dibujó en mi rostro.

—¿Qué me estás haciendo Rogers?— dije en voz alta. Camine en dirección de mi escrito.

Tome la tarjeta que había dejado sobre el l escritorio, mire con mucho detenimiento el número que está contenía.

—¿Y si lo está haciendo por interés?— pensé en voz alta.
—Si fuera así no se hubiera esmerado tanto para pedirte una cita— respondió Pepper, que recién había entrado a la oficina.
—Pero... ¿Y si no es así?— dije con algo de dolor.
—No pierdes nada con salir una vez con él— trato de animarme.
—No lo se Pepper—
—¿No lo conoces bien, no estás enamorado de él?— negué —Entonces no pierdes nada con intentarlo— insistió.
—Esta bien, lo llamaré— accedí.
—Así me gusta, te dare tu espacio para que lo llames— con eso mismo se marchó de la oficina dejándome completamente solo.

Mire una vez más la tarjeta, suspiré pesadamente, junté todo el valor necesario, tome mi celular personal y marqué el número.

*Llamada*
~¿Hola?~ respondió una voz familiar.
~Hola, ¿este es el número de Steve Rogers?~ que to ti me tuve que escuchar.
~Si, el habla ¿con quien tengo el gusto?~ Dios pero que educado.
~Steve, soy Tony Stark~
~Tony me alegra que me hallas llamado~ dijo muy alegre ~¿Y que has pensado?~
~¿Sobre?~
~¿Sobre mi propuesta?~
~Ah si, sobre eso...~ tome una bocanada de aire ~Si me gustaría salir contigo ~
~¿En serio?~
~Mjm~
~¿Estas libre ahora en la noche?~
~Creo que si~
~Perfecto, ¿te parece si paso por ti después de tu trabajo y vamos a ver una película y luego a comer algo?~
~Suena bien~
~Entonces nos vemos en la noche, gracias por aceptar mi invitación ~
~No hay nada que agradecer, hasta luego~
~Adiós, Tony~
*Fin de la llamada*

Después de esa corta, pero agradable conversación una sonrisa se dibujó en mi rostro y no hubo quien me la borrara, ni los odiosos socios de la compañía, absolutamente nada me borraría esta sonrisa. El día transcurrió de los más rápido que hubiera imaginado, ahora me encontraba sentado en mi cómoda silla dando vueltas, pensando en Steve.

*Sonido de llamada*
(Teléfono de la oficina)
El sonido hizo que bajara de las nubes y como pude conteste.

~Señor Stark, en recepción hay un hombre preguntando por usted~ informó la recepcionista.
~¿Y como es?~
~Rubio, alto, musculoso... ¿me podría repetir su nombre señor?~ dijo mientras alejaba un poco el teléfono ~Steve Rogers~
~Esta bien, dile al Señor Rogers que pronto bajaré~
~Como diga Señor~
*Fin de la llamada*

Salí de mi oficina en dirección a la recepción, al llegar ahí estaba él, ahí estaba Steve esperándome, traía unos jeans azules, una sudadera gris y unos zapatos deportivos, no pude evitar Medrano me el labio al ver tal delicia.

—Tony— dijo con mucha felicidad.
—Hola Steve— trate de soñar calmado y le sonreí.
—¿Estas listo para nuestra cita?— asentí —Muy bien, vamos al cine— volví a asentir.

Después de ver la película Steve me llevo a comer hamburguesas, cabe decir que le hombre se gano varios puntos extras por el detalle, además Steve siempre fue un respetuoso en todo momento. La velada transcurrió entre risas, charlas y halagos; al finalizar la cita Steve me fue a dejar a mi torre.

—Muchas gracias por la velada Steve, la pasa de maravilla— dije con mucha honestidad.
—No, gracias a ti por aceptar mi propuesta— Steve me sonrío, sentí y cuando estuve a punto de bajarme del auto Steve tomó de mi mano —Tony— me llamo.

Gire para verlo y una de sus manos tomó de mi rostro y me jalo para darle un beso que al principio era dulce, pero poco a poco se convirtió en uno apasionado y desesperado, Steve se separó.

—Que tengas dulces sueños, Tony— susurro sobre mis labio y me dio un casto beso.
—Buenas noches Steve, que descanses—
—Gracias— me regalo una hermosa sonrisa. Baje del auto y entre a la torre.

—Buenas noches señor— se escuchó por toda la sala al entrar.
—Son excelentes Jarvis—
—Noto que todo salió bien en su cita con el señor Rogers— respondió la AI.
—Así es mi querido Jar—
—Señor, la señorita Virginia le está llamando en estos momentos—
—Dile que le llamaré dentro de 20 minutos—
—A la orden señor— me dirigí en dirección de mi habitación.
—Jarvis ve preparando la tina—
—De inmediato señor—

Camino a mi habitación me fui quitado algunas prendas, al entrar tiré el saco y la corbata el cualquier lado, me dirigí al baño y me termine de quitar el resto de la ropa y me metí a la tina.

—Esto es vida...— susurre, despeje un poco mi mente, cerré mis ojos y poco a poco fui cayendo en un profundo sueño.

One Shots StonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora