Cosas Mejores Vendrán Parte I

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Steve Rogers era muy consiente que su físico no era el más atractivo de toda la secundaría; media 1

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Steve Rogers era muy consiente que su físico no era el más atractivo de toda la secundaría; media 1.60 de altura, era extremadamente flaco, que habían ocasiones en los que se odiaba tanto y para empeorar tenía varios problemas de salud, el más presente en la vida del rubio era el asma, pero algo que admiraba su mejor amigo, James Buchanan Barnes (Bucky para Steve) era esa determinación que el rubio tenía, siempre tratando de mostrar que los demás se equivocaban al subestimarlo por complexidad, pero habían días que esa misma determinación lo sacaba de quicio y hoy era uno de esos días.

—Punk, ¿Estás completamente seguro de esto?— pregunto por milésima vez.
—Si Buck, hoy le confesare mis sentimientos a Sharon— dijo muy seguro.
—El hecho de que Sharon te sonría en los pasillos o te pida ayuda o copia con las tareas de historia no significa que sienta algo por ti— Bucky sabía que esas palabras le resultarían algo hirientes a su amigo, pero si podía evitar el que este fuera rechazado por la capitana de porristas, lo haría a toda costa.
—¿Qué tal si te equivocas y en verdad ella siente algo por mi?— Bucky suspiro pesadamente, oficialmente había perdido toda oportunidad de hacer entrar en razón al su mejor amigo.
—Muy bien Punk, has lo que creas conveniente— dijo con aire derrotado.

A la hora de la salida Steve espero con mucha paciencia y entusiasmo a que Sharon saliera de la secundaria, y como había imaginado  iba acompañada por sus dos mejores amigas.

—¡Sharon!— la llamo el rubio mientras se acercaba.
—Oh, hola Steve— dijo con poco interés.
—Sharon quiero decirte algo que me lleva comiendo desde hace un tiempo— la rubia no dijo nada solo se quedo observando al chico al igual que sus amigas —Sharon Carter hace mucho tiempo que me gustas y quería saber si me permitirías el poder ir al cine conmigo, en una cita— termino su declaración y para su sorpresa la rubia no actuó de la manera en la que él pensó, sino que está comenzó a reírse junto a sus amigas.
—Jaja, claro que no, yo quiero a un hombre de verdad que me proteja y no a un enano indefenso como tú— dijo con algo de enojo —Mejor opérate para hacerte más alto si no nunca conseguirás una novia— volvió a reírse —Chao— retomo su camino dejando a Steve con el corazón y el autoestima hecha añicos.
—Eso fue muy cruel de tu parte, Sharon— dijo una voz masculina con cierto enojo en su tono, Steve miro en dirección por donde Sharon se había ido y para su sorpresa un chico moreno, algo delgado, de estatura promedio, de cabello oscuro y ojos cafés se encontraba frente a la rubia.
—¿Y a ti qué te importa, Tony?— replico la rubia.
—¡ME IMPORTA PORQUE ACABAS DE TIRAR A LA BASURA TODO LO QUE TÍA PEGGY NOS ENSEÑO!— grito.
—¡VETE A LA MIERDA STARK, TU NI DEBERIAS DE ESTAR AQUI!— respondió su prima.
—¡Vine aquí para llevarte al cine, como habíamos quedado, ayer!— Sharon se quedo callada —¿Lo recuerdas? O estas demasiado ocupada destrozando el corazón de ese chico ¡QUE NO TIENE LA CULPA DE HABERSE FIJADO EN ALGUIEN TAN RUÍN COMO TÚ!— el moreno camino en dirección de Steve quien lo miraba con mucha sorpresa —Hola soy Anthony Edward Stark— dijo de forma amigable mientras extendía su mano —Pero puedes llamarme Tony— Steve parpadeo varias veces para salir de su trance y estrechar su mano con la del moreno.
—Steve, mi nombre es Steve Grant Rogers, mucho gusto en conocerte, Tony— le sonrió algo forzado ya que aun se sentía desbastado por el rechazo.
—¿Tienes planes para esta noche Steve?— pregunto el moreno.
—Ahm no— respondió algo dudoso.
—Genial, porque tengo un boleto extra para el cine— le sonrió y Steve no sabía que responder.
—¡Alto ahí!— Sharon se paro enfrente de ambos chicos —Se suponía que tu y yo iríamos al cine— reclamo.
—Así era primita, pero veo que tu comportamiento no amerita una salida al cine— la miro de forma amenazante —Vamos Steve, la función esta por comenzar— miro a Steve y esté solo asintió con algo de timidez —Por cierto Sharon, si vas a MI casa le avisas a mis padres que llegare tarde— dijo burlón.

Ambos chicos caminaron en dirección de una enorme camioneta negra, blindada y poralisada, Steve miro con mucha sorpresa al moreno y este solo le sonrió de forma amistosa, un hombre con traje negro salió de la camioneta, les abrió la puerta, una vez que ambos chicos estuvieron adentro del auto el hombre cerro la puerta, se subió en el asiento del piloto y condujo en dirección al cine.

Por otro lado, Bucky quien había visto todo desde la distancia junto a su novia, Natasha Romanoff, y un amigo del equipo de Futbol Americano, Samuel Wilson.

—¡Oooohhh! viste eso arañita— dijo Bucky con mucha felicidad.
—Si, al parecer nuestro Steve ha entrado a las ligas mayores—
—Ahora será el nuevo protegido de Stark— comento Sam y la pareja negó —¿Qué?—
—Mi pequeño e inocente Sam— dijo la pelirroja.
—¿Qué?—
—Sam es más que obvio ahí habrá algo más— agrego Bucky.
—¡¿Qué?! No, Steve no es gay— trato de hacer entrar en razón a sus amigos.
—No, aun no, y terminaran haciendo una bella pareja— sonrió con malicia —Te apuesto que así será—
—¡Uy! yo le entro— dijo Bucky con emoción.
—Pues, yo apuesto que eso no sucederá— dijo con mucha confianza.
—Y si llegamos a ganar, ¿Qué nos darás?— pregunto Barnes.
—Les dare 100 dólares... a cada uno—
—Nos parece la idea —dijo la pelirroja.
—¿Y si yo llego a ganar?—
—Te daremos 250 dólares... cada uno— respondió Romanoff.
—¡Wow! es algo grande la cantidad, ¿Están seguros?— la pareja asintió —En ese caso hay trato— los tres amigos estrecharon sus manos para sellar el trato. Minutos después Wilson se despidió de la pareja para marcharse a su casa.

—Pobre alma inocente— comento Bucky cuando estuvo a solas con su novia.
— Déjalo, será más satisfactorio el ver su cara cuando sepa que perdió— respondió la pelirroja con malicia lo que hizo que su novio riera.
—En ese caso, que los Stark amarren a su yegua que mi potro anda suelto— grito con mucha euforia.
—Te equivocas en algo querido— Bucky miro a su novia —Steve será el pasivo en la relación— dijo con mucha seguridad y Bucky estallo en risa.
—Arañita tu nunca te sueles equivocar— admitió —Pero me temo que en esta ocasión lo estas, conozco a Steve como la palma de mi mano y se que él será el activo—afirmo.
—Si estas tan seguro, por que no hacemos una pequeña apuesta— lo reto.
—Acepto— dijo sin pensarlo —Y el que pierda será el sirviente del ganador por un mes—
—Acepto— la pareja estrecharon sus manos para sellar el nuevo trato.

Mientras en el cine nuestros queridos Tony y Steve disfrutan de una buena película de comedia, después de dirigen a un restaurante de comida rápida que es cordialmente pagado por Steve, luego se dirigieron a un centro comercial, compraron un helado y decidieron sentarse a platicar.

—Wow Tony, en verdad eres todo un genio— lo alago el rubio cuando Tony le comento que estaba estudiando en el MIT con tan corta edad, con beca y sobre unas que otras creaciones.
—Si así lo quieres crees, esta bien por mi— el moreno le regalo una amplia sonrisa.
—Tony, no es que me quiera aprovechar de la situación— Tony miro con el rubio se iba ruborizando —Pero, ¿Crees que me podrías ayudar en química?— soltó con mucha rapidez y se cubrió el rostro; Tony río por la acción.
—Con mucho gusto te ayudaré—
—¿Es en serio?— Tony asintió —Muchas gracias Tony— Steve tomó de las manos del moreno por la emoción, Tony se sonrojó al instante, Steve al notarlo también se sonrojó y lo soltó —¿T-te parece si nos reunimos los sábados en la biblioteca?— preguntó el rubio con mucha dificultad.
—Si, me parece— ninguno se miro a los ojos por varios minutos.
—¡Hey Punk!— una voz muy conocida para el rubio gritó a lo lejos, ambos chicos miraron en dirección de donde provenía dicha voz.
—Nunca pensé que encontraríamos aquí, Steve— dijo la pelirroja ya estando cerca de ellos.
—Hola chicos— saludo muy animado —¿Quiero presentarles a...—
—Anthony Edward Stark, conocido por Tony Stark; hijo único de Howard y Maria Stark, futuro heredero de Industrias Stark y con a penas 16 saldrá del MIT— cito Natasha, Tony rio.
—Veo que me han estado investigando—
—Pues claro, nuestro Stevie anda con un desconocido— dijo Bucky mientras tomaba y abraza a Steve de forma protectora.
—Gracias por preparar Chicos, pero Tony y yo ya somos amigos— la pareja miro al moreno y este solo asintió.

Varios minutos después los 4 chicos se despidieron para marcharse a sus respectivas casas.

One Shots StonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora