capítulo 14

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Fui al baño más cercano que había, y tuve suerte de encontrar uno a un pasillo de dirección. Entré apurada, estaba completamente vacío, genial, hoy es mi día de suerte. Entre en uno de los baños y me quite mi suéter de lana ( :v ) me daba bastante calor y no entiendo cómo es que tuve la magnífica idea de llevarlo puesto, lo puse en mi bolso,saque mi desodorante y mí perfume, luego de usarlos me acomode mi camiseta blanca y me lo puse de bajo del pantalón

 Entre en uno de los baños y me quite mi suéter de lana ( :v ) me daba bastante calor y no entiendo cómo es que tuve la magnífica idea de llevarlo puesto, lo puse en mi bolso,saque mi desodorante y mí perfume, luego de usarlos me acomode mi camise...

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(Algo así)

Salí del baño y me dirijo al espejo, me maquille un poco y acomode un poco mi bolso para luego salir de allí.
Caminé un poco, cuando me detengo en una puerta gigantesca en donde tenía escrita en medio, "Biblioteca". Entre con cuidado y vaya que si era grande. Anduve en busca de Silver, era algo difícil ya que no conozco el lugar y no se nada de él hace bastante tiempo.

???: Hey! Chica rosada!

Me hablan a mi?

Amy: volteo –  Me hablas a mí?

Pregunté con curiosidad.

???: Necesitas ayuda?

Amy: Si ... Necesito buscar a un chico llamado Silver el Erizo.

Silver: Pues estás hablando con él linda – Sonrió –

No lo soporte, lleve mis manos a mi cara tapando mi boca, mis lágrimas salieron rápidamente, él me vio confundido.

Amy: Eres tú... No puede ser eres Silver!

Silver: Ssssi... Soy yo. – Dijo incómodo – Eres otra admiradora no? Por si no lo sabías no me gusta que me abracen de forma desprevenida.

Amy: No me recuerdas no?

Silver: Mmm.... Te me haces conocida. Refrescante la memoria.

Quería darme un tiró en la cabeza.

Amy: En verdad no cambiaste nada en estos últimos siete años no?

Entre cerré los ojos mirándolo fijamente con una sonrisa. Se quedó pensando cuando de golpe abrió los ojos sorprendido.

Silver: Amy Rose?

Asentí ante su pregunta.

Amy: En carne y hueso.

Sin darme cuenta ya estaba rodeada por sus brazos, acepte su abrazo con cariño. Nos mantuvimos así por bastantes minutos cuando decidió romper con el abrazo.

Silver: Todavía no puedo creerlo. En serio eres tú.

Amy: Y yo no puedo creer que seas tú.

Silver: Pues que te puedo decir, cambié. Pero lo que me sorprende sos vos. O sea, mírate ya eres toda una mujer!

Reí ante su respuesta ridícula.

Amy: Jejeje. Gracias por el cumplido.
Pero debo decir que te me hiciste irreconocible.

Silver: Y tu también Amy.

Nos sentamos en una de las mesas y comenzamos a charlar, estuvimos allí por casi una hora y media, le dije que si podía darme un recorrido por la escuela a lo que el accedió con gusto, me mostró de todo, el salón de ciencias y entre otros. Le agradecí por el recorrido y le pedí su número telefónico, él me lo dió y tomamos caminos diferentes.
Regresé a mi apartamento y no pude evitar dar saltitos de alegría por toda la casa, fui a la cosina y saque unos fideos con salsa del microondas, seguí saltando mientras me senté en el sofá, comense a comer mientras miraba la tele.

Amy: – suspiré – Fue bueno hacer algo nuevo.

Te vuelvo a ver (Sonamy) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora