-Semanas después-
-Hola. –Izzy se sentó frente a el. –¿Tienes hambre? –Alec negó, sacudiendo su cabeza.- Alec tienes que comer.
-Lo hago, pero no tengo hambre hoy.
-Es lo que vienes diciendo desde hace dos semanas. –Isabelle lo reprendió suavemente.
Ella se había quedado, Jace se fue unos días después, no quería irse y dejar a Alec así, pero tuvo que hacerlo. Isabelle estudiaba en línea y en su trabajo le habían dado permiso, así que fue más fácil para ella quedarse. Jace se había ido un poco más tranquilo.
Dos malditas semanas y Magnus no había despertado, Alec estaba ahí todos los días, sentado a lado de Magnus y sosteniendo el collar que le había dado entre sus manos, después lo guardaba en su bolsillo, siempre lo llevaba, al igual como llevaba colgado el suyo, y estaba al pendiente.
-Estas todo flaco y pálido, Alec, necesitas comer. –Ella hizo una mueca.- Vamos si quiera por un pastel de esos de chocolate y un café, aquí a la cafetería de la esquina. - Alec la miro, ella le sonrió un poco.
-Esta bien.
Al llegar a la cafetería, Alec solo había pedido un café, y comía un poco del pastel que compartía con Izzy, ella se conformaba con eso.
-¿Que fue lo que te dijo Jace antes de irse? Se que estuvo trabajando junto con tu jefe para investigar mas de lo que paso.
Alec suspiro. -A simple vista parecía que Samuel le había disparado a Magnus y luego se había disparado el. -Trago saliva. -No fue así, no fue Samuel quien le disparo a Magnus. -Izzy frunció el ceño.
-¿Y tienen alguna idea de quien pudo ser?
Pero, antes de que pudiera contestar, su celular sonó, era un mensaje de Salma, lo abrió rápido. Se levanto rápido, Izzy hizo lo mismo, preocupada.
-¿Qué ha pasado? –Pregunto.
-Magnus despertó.
(...)
A Magnus aun le costaba un poco acostumbrase a la luz. -¿Como te sientes? -El Doctor le pregunto.
-Adolorido.
-Lo normal. -Termino de revisarlo. -Estas bien, no hay nada fuera de lo normal. -Sonrió. -Te recuperaras. Pero aun te tendremos aquí un buen rato.
Su madre le agradeció al Doctor cuando se fue y luego miro a Magnus. -Mi amor, estaba tan preocupada. -Agarro su mano. -Todos estábamos preocupados.
-¿Donde esta Alec?
-Ya viene. -Sonrió. -No se ha separado de ti.
Magnus sonrió débilmente. -Lo se, lo he escuchado. los escuche a todos, mamá.
La puerta se abrió y un muy delgado y preocupado Alec, entro. -Magnus. -Se acerco rápido a el. Magnus estiró su mano, Alec lo agarro.
-Hola.
-Los dejare solos. -Su mamá beso su frente y luego salio.
Magnus miro a Alec. -Hola, amor, te ves fatal, pero aun muy guapo. -Alec dejo salir un suspiro contenido, sentándose a un lado de el. -Seguro yo me veo horrible.
-Te ves vivo. -Alec apretó su mano. -Vivo y hermoso, es suficiente para mi. ¿Como te sientes?
-Me duele, pero el Doctor dice que es normal, que estaré bien. -Frunció un poco le ceño. -Pero me duele mas que no me haya besado aun.
Alec se rió un poco, y se acerco a dejar un pequeño beso en sus labios. -Siento que estoy soñando.
Magnus acaricio su mejilla. -No lo estas. -Se acomodo mejor, Alec le ayudo. -Estaremos juntos por mucho tiempo. -Aseguro, ahora agarrando la mano de Alec.
-Lo haremos. -Sonrió.
Magnus frunció el ceño. De pronto todo volvía a el. -¿Samuel esta muerto?
Alec se recargo en la silla, suspirando. -¿Que fue lo que paso, Magnus?
-Estaba en la casa y Samuel entro, yo trate de escapar pero el me alcanzo. Después me llevo a ese lugar, no se donde era, el quería que fueras ah y matarte -Trago saliva. -No recuerdo muy bien, Alec, solo se que de repente alguien disparo y yo sentí como todo mi cuerpo ardía y pesaba
-Magnus, -Alec apretó su mano, -Samuel murió. -Perdió mucha sangre y los Doctores no pudieron hacer nada.
-El me contó lo que paso, la razón por la cual mato a Gen. Gen quería hacerme daño a mi, por eso lo hizo. -Sacudió la cabeza. -No se realmente si fue verdad, solo sentía que queria hacerme sentir responsable de eso. -Se le fue el aire por un momento, Alec apretó mas su mano.
-Magnus...
-Estoy bien,-Suspiro, -Pero ahora que lo pienso, había tantas señales, Alec. La forma en la que Gen actuaba conmigo, como me miraba, yo trate de ignorarlo pero ahora lo entiendo todo. Pero se que no es mi culpa lo que el hizo.
-No es tu culpa, has pasado un tiempo pensando que es así, cuando no. Me alegra que al fin lo comprendas -Acaricio su mano. -Aun deberías de seguir con las terapias. -Magnus asintió.
-Si, hablar con Mariana me hace bien. -Sonrió un poco. -Tu también me haces bien, Alec, no te atrevas nunca a dejarme.
Alec sonrió, acercando se a el. -Soy tuyo de la misma forma que tu eres mio y eso nada ni nadie lo va a cambiar. -Se acerco a besarlo, sellando así, sus palabras.