Fragmentos del pasado...

Capítulo 44

~Dedicado a todos los que votaron, gracias por el apoyo y sobre todo por sus comentarios; ¡los ame! ❤

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Harrison observaba ese traje que había traído Kreacher de parte de Severus Black y de sus abuelos; era demasiado elegante y a juzgar por la tela era costoso... Agradecía totalmente el regalo pues no tenía nada elegante para ponerse, sus abuelos rogaban porque aquel alfa no se sobrepasará con su persona.

Eso lo sabía por la nota que habían enviado junto a la caja donde venia aquel traje; era de un color gris con toques en negro y destellos esmeraldas, en realidad era hermoso y hacia conjunto junto con el de Draco. La diferencia era que el de su primo era negro con toques grises y dorados.

Suspiro, estaba feliz; no por el baile era más por el objeto que estaba entre sus manos. Había hablado con Tom sobre la situación y para su fortuna no estaba molesto con él por ir al baile con Cédric.

Lo último que pedía Tom era verlo antes de que se fuese al gran salón donde harían el evento, necesitaba ver a su Omega vestido con un traje, además de que necesitaba de su presencia. No era sano estar tan desconectados en todo ese tiempo.

El menor suspiro y se metió a bañar, faltaba más de una hora para que empezará aquello, apesar de que no quería estar ahí su instinto decía que cuidara de los otros; en especial a Hermione pues había sido invitada por la hermana menor de Fleur... Fue muy sorpresivo aquello, pues nunca esperaron que la callada beta estuviera atenta a la joven Ravenclaw.

Por supuesto que no sería a la única que estuviera viendo de lejos, pues su otro Omega rubio era uno de los principales, además de Neville; confiaba en Theodore pero no tanto para dejarle al Hufflepuf en bandeja de plata.

(...)

Narra Harrison.

Después de ducharme, me senté en mi cama; Draco hace rato había ido hacia donde nuestro jefe de casa; supongo que tenían cosas que hablar después de todo.

Me seque con la toalla, al igual que mire el traje de nueva cuenta; no creo ser merecedor de tal obsequio pero en los adentros estaba feliz, demasiado emocionado como si fuese un niño de siete años de nuevo.

¡Era el primer regalo que recibía de mis abuelos y tío!

Rápidamente me puse mi ropa interior y seque mi cabello, fue demasiado rápido y opte por cambiarme de una vez por todas, después me puse los cómodos zapatos negros; no haría esperar a Tom...

Me observe en el espejo, me veía bien, el traje hacia conjunto con mis ojos y los hacia resplandecer más de la cuenta; sonreí y me dispuse a peinar mi alborotado cabello.

Para mí suerte pude manejarlo apropiadamente, la imagen que brindaba era como mis abuelos querían que me viera; elegante, decente y educado.

Tome el diario avisando al Alfa que estaba listo para verlo, no pude evitar sonreír levemente; amaba tener de nueva cuenta el diario entre mis brazos.

Un rayo de luz cegó mi vista para después ser absorbido por el diario, había dejado una leve nota en mi cama para prevenir a Draco sobre mi paradero.

La típica sala común de Slytherin se sentía demasiado calida, aunque supiese que eso era parte de un recuerdo del mayor.

Escuche una bella melodía, para después observar como los pocos que estaban en la sala común se quedaban estáticos, como si todo se detuviera...

- Me concedes está pieza. - observe detrás de mí para después sonreír ampliamente, el alfa tenía una mano extendida esperando la mía. - Disculpa por no tener un elegante traje, tal vez en otra ocasión me ponga uno.