Cartas para un idiota

Capítulo 9

El Rivet Winter inició dos días después que acabará la Winter Cup. Los primeros partidos fueron fáciles para nosotras, y para los chicos igual.

Ambas selecciones ya habíamos pasado a finales, y si ganábamos ambas selecciones, debíamos jugar en contra de los hombres. Para demostrar quien era mejor.

El partido de nosotras era contra la Academia Tōō, eran chicas altas y muy ágiles. Nosotras éramos bajas pero saltamos alto y somos rápidas.

A mí me tocaba sacar primero y antes de poder sacar escuchamos gritos.

- ¡Vamos Rakuzan! ¡Vamos Hanan, pasa la malla!- no alcance a distinguir bien, pero deben ser los chicos.

Lancé la pelota bien alto y salté para pegarle muy fuerte. Las otras chicas se sorprendieron y no pudieron responder.

- ¡Harina harina harina, Tōō en la cocina Pelando mandarina Rakuzan en el avión Con la copa de campeón! -gritamos a la par con nuestro equipo masculino.

- ¡Vamos Hanan! -dijeron cuando tenía de nuevo el balón en mis manos.

Volví a sacar pero esta vez sí respondieron. Y así todo el partido. Nosotras tuvimos el primer set y el segundo por muy poco.

- ¡Grande equipo! - empezamos a gritarles a los chicos.

Ellos también ganaron pero fue mucho más fácil para ellos que para nosotras. Así que mañana nos tocaba jugar contra ellos: en el partido de los primeros lugares.

Fue algo 100% horrible, porque el entrenador no sabía a quien darle más indicaciones. Pero de todas formas y por un punto, nos llevamos ambos sets.

- Buen juego todos, igual nos llevamos las copas a casa- ánimo el entrenador a todos en la cancha mientras todos nos aplaudían.

En el vestidor, nosotras celebramos pero no con tanto ánimo porque estábamos agotadas.

- Bien niñas, gracias por llevarnos al triunfo en nuestro último año- hablaron las de tercer año, entre ellas Aratani-. Vamos a dejar de capitana a Mibuchi Hanan.

- ¿Qué?- pregunté.

- ¿Alguien tiene alguna objeción?- todas gritaron no-. Bien Hanan, tienes una gran responsabilidad ahora.

- ¿Por qué yo?- pregunté.

- Eres nuestra gran estrella, no tienes miedo de tirarte al piso para salvar el balón y que el equipo triunfe. Así que eres magnífica.

Todas me aplaudieron y me felicitaron antes de comenzar a salir.

- Buen trabajo chicas- dijo Reo, abrazándome fuertemente.

- ¿Los dos nuevos capitanes no deberían saludarse con el capitán de Básquetbol?- señaló Aratani, dándome un leve empujón.

Un chico de segundo año que era titular, se ubicó frente a Seijuro. Yo, toda tímida me acerqué también y mi amigo abrió los ojos, perplejo.

-¡¿Tu eres la nueva capitana?!- gritó y yo asentí.

Mi hermano comenzó a gritar de orgullo y mi amigo me abrazó mientras repetía que estaba orgulloso y de que yo lo iba a hacer bien como capitana.

- Ahora, vamos a comer- pidió Nebuya y todos reímos.

Esto definitivamente cada vez se ponía mejor, o peor si lo mirábamos desde el hecho de que Akashi Seijuro estaba volviendo a ser el mismo de Teiko.

Y eso me gustaba.