Juegos traviesos

¿Celos?

-¡Me quiere chupar la sangre!- grité desesperada despertando de un tormentoso sueño. Había pasado toda la noche soñando con vampiros y hombres lobo, y esta vez no se debía a los libros que leía, de eso estaba segura. Me levanté algo retrasada en comparación con la mañana de ayer, y mi humor era completamente distinto, además tenía mi pelo hecho nudos como si hubiese estado luchando contra una gata salvaje. Fui, como siempre, al baño para tomar una ducha, y luego de ponerme algo cómodo bajé a tomar un desayuno rápido.

Mi mañana fue muy monótona, como siempre era mi vida, pensé, y se dividió entre clases de castellano, ciencia, idiomas y deporte. Esta semana nos tocaban ejercicios aeróbicos en la piscina (una de las clases que más odiaba) así que me estaba preparando en los vestidores, cuando comencé a escuchar mucho ruido en el sector de la piscina, entonces entró una chica corriendo a contar el chisme.

-Rápido, deben venir a ver esto, Alex y Jimmy están a punto de pelearse... ¡RÁPIDO!- gritó por último la chica y, acto seguido, todas salimos casi corriendo del camarín.

-Que patético que me preguntes por "tú" chica, tal vez no eres suficiente para ella- dijo Alex provocando a Jimmy.

-Claro que lo soy, pero yo no estuve presente para saber qué le habrás inventado, y  es más patético que tengas que intentar robar la chica de alguien más solo porque nadie se interesa en ti- respondió Jimmy, con menos compostura de la que pretendía demostrar.

-No fue necesario inventarle nada porque ella sola notó qué era lo que realmente le convenía- dijo Alex volteándose para irse, pero por supuesto que no le dejaría irse tan fácilmente.

-¿A dónde crees que vas tan rápido?, aún no termino contigo-

-No hay nada que tenga que hablar contigo, si quieres saber algo acerca de Ignacia tendrás que preguntárselo tú mismo, si es que quiere volver a verte-

-¿Y por qué no querría volver a verme?, si ese fuera el caso entonces no me habría ido a buscar a tu fiesta-

-No sé de donde sacas eso, ella fue a buscar algo de diversión, lo cual estuve encantado de darle-

-Ahora si no te dejo pasar esta- y entonces Jimmy volteó a Alex de un golpe en la cara, luego éste se toco la comisura de la boca de donde le corrían unas gotas de sangre, y se preparó para devolverle el golpe pero el entrenador atajó su golpe en una mano y los separó.

-¿Cuál es el problema aquí?- preguntó furioso el docente. Jimmy y Alex se miraron con rencor pero acordando con la mirada un reencuentro más tarde.

-Nada- dijo Jimmy-unas diferencias sin importancia-

-¿Y algo sin importancia justifica los golpes?-

-Fue solo un malentendido- contestó Alex. Entonces el entrenador se volteó hacia los alumnos que observábamos la discusión de cerca y nos ordenó dispersarnos. Cuando me daba la vuelta para ir a la piscina pude escuchar a Katty comentando lo ocurrido, de mala gana, con una de sus amigas.

-No puedo creer que se pelearan por esa cualquiera, una aparecida sin méritos-

-No te preocupes- le dijo la amiga- es como el juguete nuevo, sabes que los chicos son así, ahora se pelean por ella pero en cuanto pasen un par de días se olvidarán de ella y volverás a ocupar el puesto que te corresponde al lado de Jimmy-

-¿Sabes?, no me importaría que Alex o cualquiera de sus amigos del equipo de natación se quedaran con esa cualquiera, todos ellos son unos mujeriegos y le harían pagar todo lo que ha hecho-

-Hey... no incluyas a Sam en esto, sabes que a él lo quiero para mí, y él no es un mujeriego como el resto de sus amigos- dijo la amiga de Katty arrugando un poco la frente.