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Mara:

Se encontraba en el salón de clases, respirando paz de nuevo, luego de la gran exposición de los trabajos de anatomía, vamos, ¿Quién tarda dos semanas enteras en hacer un simple resumen?, definitivamente andar de ecologistas consume tu tiempo en exceso

—Mara—corta el silencio esa voz ronca tan conocida para ella, erizando cada vello de su piel- ¿Te encuentras sola?— indaga el castaño asegurándose de que nadie más se encuentre en el salón

Lleva evitándolo desde que lo vio con Samara, y ahora no tenía excusa alguna para evitar hablarle.

—Yo—lo mira nerviosa—...supongo— responde finalmente luego de unos segundos en silencio

—Eso veo—dice con simpleza desviando la mirada hacia cualquier parte, evitando mirarla —y-yo, s-sabes— rasca su nuca nervioso, abre sus ojos sorprendida, nunca antes lo había visto nervioso—Quiero preguntarte algo— dice finalmente, suelta el aire retenido, lo más probable sería que fuese algo sobre la recolección del sábado.

—Adelante—dice mirándolo fijamente, su nerviosismo ha disminuido pero de igual manera el ligero temblor en sus labios no desaparece , odia tanto debilitarse ante él

—¿Tienes novio?, ¿Novia?, hum...¿Eres asexual? —pregunta rápidamente el chico de ojos pardos, lo cual sólo hace que suelte una gran carcajada, tapándose inmediatamente la boca con vergüenza

—Pues no soy asexual, te lo aseguro—responde divertida— y tampoco tengo pareja—finaliza sonriendo, espera por la reacción de Derek, el cual luce  visiblemente más  tranquilo luego de su confesión

Pero, ¿Porqué esa pregunta? ¿Acaso le interesa mínimamente su estado sentimental?

—Entonces…— dice acercándose mas de la cuenta, cambiando inmediatamente su semblante por uno coqueto y juguetón, típico en él —¿Quisieras ser mi Novia?—indaga dejándola atónita, ¿Qué clase de pregunta es aquella? ¿Acaso es una broma? Porque si es una broma jura que va matar a Cassie y Venecia

—Me estás jodiend— se corta inmediatamente cuando siente las grandes manos del castaño en su cintura, su corazón está a mil por hora; su respiración se vuelve entrecortada. Siente finalmente que va a desmayarse cuando lo ve acercar su rostro, y toma su barbilla entre sus dedos.

Sus respiraciones se mezclan cerca de los labios, el suave olor a chicle de menta lanza cosquillas a su estómago, él la va a bes-

—Mierda— dice despertando de golpe, sintiendo el sudor escurriéndole  la frente— otra vez no— gime enterrando su rostro en la almohada—Estúpido despertador, estúpido sueño, estúpido Derek—gruñe y se levanta de la cama buscando sus zapatos ¿Ahora donde se supone que los arrojó?

—Hasta que despiertas— su madre reprocha— ¿Acaso saldrás?— la morena la mira con los ojos entrecerrados, pensando que quizá ya ni debe molestarse en contarle sus planes si de igual manera los olvida

—Hoy iremos a limpiar la playa— murmura dirigiéndose al baño, la risa cantarina de su madre se oye desde allí

—Ya dime cuáles son tus verdaderos planes, Mara— habla lo suficientemente alto para que la escuche. Cuando se plantea hacer algo bueno por primera vez en su vida nadie le cree. Pero veamos si alguien inventa algún supuesto desastre que ella ocasionó; ahí si creen lo peor de ella.

Sale de la ducha y vuelve a buscar sus zapatillas blancas.

—Ahí están— señala mientras intenta se agacha para recogerlo, supone que su "sistema de organización" ha dado sus frutos,  luego de escoger que llevará puesto hoy, se dispone a revisar  sus redes sociales, había dejado de seguir a Derek hace un tiempo, era tormentoso observar sus estados todo el tiempo

Toska.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora