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–Así que... te gusta el huérfano ¿no?– cuestionó burlona una niña de piel clara, uniforme pulcro, cabello negro y con dos coletas.

–Eso a ti no te interesa– gruñó Tae, queriendo ser fuerte, pero por dentro estaba nervioso y temblando.

–No quieras aparentar conmigo, Kim– escupió con veneno la niña más grande– lo marica se te nota desde lejos– chasqueo sus dedos y tres niños aparecieron detrás de un árbol.

–¿Q-qué...?– no termino de hablar, ya que la mocosa lo interrumpió.

–Eres tan asqueroso... ellos te harán pagar por tus pecados– gruñó llena de odio.

Y el infierno volvió.

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–Nam... no... recuerda que tenemos...– los labios del moreno no lo dejaban continuar, se sentían tan bien, pero también tenían otras cosas que hacer– oye... ¡hoy tenemos que ir al colegio de Tae!– dijo cuando finalmente se separó un poco del moreno.

–¿Hoy es la reunión con padres y alumnos?– interrogó Kim, el estaba seguro que era la otra semana.

–Si hoy es– insistió el pálido, le regaló otro piquito en los acolchados labios y se deshizo de su agarré.

Hace unas semanas atrás que Namjoon y Yoongi se habían acercado más de este modo, antes solo eran besos en las mejillas, pequeñas muestras de afecto, pero conforme iba pasando el tiempo, las ganas de demostrar todo lo que sentían el uno por el otro ya no eran controlables. Todo estaba mejorando.

–¿Ya estás listo Nam?– grito desde las escaleras el mayor de ambos, su esposo salió de la habitación y él gruñó por lo bajito ante la hermosa vista que le daba el moreno.

–Si, ya vamos– dijo pasando de largo e ignorando la mirada de Min. Sonrió para sus adentros y antes de salir de la casa ambos se dieron un suave beso.

El cielo raramente estaba nublado... pero no le tomaron importancia.

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–¿S-señor TATA?– abrazo a su mejor amigo quien estaba con una rasgadura en uno de los lados de su cabeza.

Taehyung había sido golpeado e insultado por la niña y los tres niños que lo habían acorralado en el recreo, ahora se encontraba en el baño, queriendo arreglar a su amigo, se sentía bien -de alguna forma- haberlo protegido.
Alzó la mirada y se encontró con algo de tierra en su cabello y su mejilla, el verdadero lienzo pintado se encontraba en todo su cuerpo. Esa era la principal razón para que sus padres no lo ayudarán a bañarse o vestirse... no quería causar más problemas.

Y al pensar en ellos, un recordatorio también se le vino a la cabeza. Abrió más sus ojitos asustado y un nudo grande se entendió por su garganta, náuseas lo atacaron de repente y estaba seguro de que ese día iba a ser el peor de su corta vida.

La reunión de padres y alumnos. Ese día esperaba vinieran sus tíos y no ellos, como siempre, pero, nunca se imaginó que precisamente ese par iba a aparecer con cálidas sonrisas dirigidas a él, tomando su manita para dirigirse a su salón y hablar con su maestra.

–Buenos días señores Kim– sonrió la mujer delante de ellos, quien también estaba sorprendida de no ver a Seokjin-ah y a Jimin-ah.

–Buanos días– respondió al mismo tiempo el matrimonio.

–Bien, como es su primera vez aquí creo que tendré que explicarles cómo es esto– sonrió la señorita– está reunión es para hablar sobre el progreso y la convivencia de los alumnos, además de hablar si estos si tienen alguna dificultad y/o problema, además de que hoy también es entrega de calificaciones– Tae al escuchar lo último se tenso. Yoongi y Namjoon asintieron.

»–Taehyung no da problemas, es callado, listo, responsable, no participa mucho en clase pero hace todo lo que se pide, no falta con sus ejercicios. Es un muy buen niño– sonrió con suavidad la maestra– pero, lo que me preocupa es que no tiene amigos, ninguno de sus compañeros se acerca para hablar con él, le cuesta socializar con todos– Tae tenía la mirada baja y apretaba al pequeño muñeco entre sus brazos, los únicos que sabían de eso eran sus tíos– me gustaría que hablarán con él con respecto a eso, los niños de su edad juegan mucho, socializan y aprenden al mismo tiempo– lo que la maestra no sabía era que Taehyung tenía la idea de ser adulto y no un niño.

Sus tíos ya habían tratado de hablar con él, pero el pequeño no escuchaba y se hacía el desentendido, ponía excusas.
Él no quería causar más problemas y molestias.

Por el contrario, Namjoon y Yoongi estaban preocupados, se sentían tan culpables, ellos habían causado eso y claro que trabajaban en remediar todo eso. Sin embargo, el camino que debían recorrer era muy largo... y tal vez, nunca lo terminen de recorrer.

–Esta bien maestra Hani, nosotros nos encargaremos de eso– dijo Yoongi acariciando los cabellos de su hijo, pero al contrario de traerle calma al niño, más bien lo pusieron más nervioso.

La maestra sintió, confiando al pequeño con ellos– Ahora, les entrego las notas de Taehyung y pueden retirarse, gracias por asistir ya que para nosotros es muy importante que los padres de familia se presenten a las actividades de sus hijos– Namjoon tomó la boleta y después de un apretón de manos ambos se retiraron junto a su hijo.

El cielo estaba más gris... pero nadie le tomo importancia...

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-Uff ¡casi 1000 palabras!
Este ha sido el capítulo más largo hasta ahora 😎

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Señor TATA [BTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora