Del Deseo A La Tentación Parte 2

CAPÍTULO V

David no se separó de ellas, toda la noche estuvo admirando a su hija y su esposa que dormía tomada de su mano.

Al día siguiente el doctor llegó a hacer su revisión de rutina, después un pediatra hasta que una vez todo en orden pudieron abandonar el hospital. David le llamó a Esteban para que pasará por ellos.

-Estaba pensando en ir a New York pero como Caroline esta aquí...

-No quiero que por esto dejes de ir, es necesaria tu presencia ahí -saco un cepillo de el bolso y peino su cabello, mientras David revisaba toda la habitación para no dejarse nada.

-Ustedes también tienen que estar conmigo son mi familia. Lo que pensaba era que podemos ir en auto es solo un día con suerte y llegamos unas horas antes, estuve viendo los mapas y hay vías cortas... -la miro, mientras ella lo miraba igual.

-¿Crees soportar tantas horas de viaje? -se acercó a él.

-Si, trataría de manejar la mayor distancia por el día, después nos quedaríamos en un hotel por seguridad -la miro.

Cuando llegaron a su casa, David y Lissa hablaron sobre el viaje hasta que finalmente terminaron Lissa llamó a Elizabeth para pedirle que fue hasta la casa que había comprado David, para pedirle a las personas encargadas que prepararan todo para la llegada de la familia. David le pidió a Vicky y Jaz que si deseaban podían irse como días de descanso o si no que podían tomar cualquier habitación.

Lissa preparó su ropa y comenzó acomodarla en orden dentro de su maleta, la primera de dos que llevarían, más otras dos de David. Jaz mientras le preparó al pequeño Dav todo para el viaje, junto otra maleta de la bebé.
Lissa bajo a la sala, miro a Vicky.

-¿Y David?

-Su esposo esta en la cochera -acomodó un cojín en el sofá.

-Gracias -salió de la casa y se encaminó a la cochera que estaba abierta, encontrando a David revisando una camioneta BMW X5.

-¿Que haces? -se acercó.

-Erik y yo revisamos la camioneta para ver que este todo en orden -apoyo el brazo en la puerta del vehículo.

-Tenemos que poner las sillas para los niños -Erik salió detrás de la camioneta con dos sillitas para lo asientos.

-Ya los tenemos Señora, solo los colocaremos bien y listo -entró a la camioneta y comenzó a poner el primero mirando hacia atrás.

-Lo pones mal -David frunció el ceño.

-No Señor. Un recién nacido debe ir en esta posición por seguridad, solo Dav debe ir como ustedes.

-Debo leer manuales de como ser padre -cerró los ojos, maldiciendo no haberlo sabido. Erik término de instalar uno y luego se pasó del otro lado para poner la segunda.

-Tranquilo, nadie nace sabiendo, ya no recuerdas como te quebradas la cabeza por hacer el corralito de Dav y cuando hiciste la rejilla para que Dav no entrara a cualquier lado.

-Si, eso si fue un reto -recordó su paciencia para hacerlo.

-Ya están listos -los movió una vez más para comprobar que estaban bien puestos -Señor tal y como me pidió el GPS ya tiene registrada la ruta para New York, así que no habrá contratiempo llegará en 41 horas más o menos, cheque las llantas y todo está bien, podrán viajar tranquilos.

-Gracias Erik -se dieron la mano y se estrecharon.

-De nada. Voy por sus maletas -salió de la cochera dejando a la pareja sola.

Cuando subieron todo, Erik cerró la cajuela y le entregó las llaves a David. Se despidieron de todos y sin más demora subieron a la camioneta y comenzaron su viaje a New York.

Comenzaron el viaje temprano, pero quizá llegarían a la mañana siguiente. En el camino se detuvieron en algunos lugares para comprar sus alimentos y cosas necesarias Lissa se paso un par de veces a los asientos donde venían sus hijos, para alimentar a Caroline o darle unas galletitas a Dav para que comiera. Siguieron su viaje cuando cayo la noche David busco un motel cerca, no quería manejar por la noche y mucho menos con sus hijos atrás. Entro a uno pero pidió la habitación mas lejana a "parejas" cercanas metió la camioneta a la cochera. Lissa miro.

-Cariño lamento el lugar, pero es lo mejor, no quiero manejar tan tarde y con ustedes abordo. En cuanto la niña cumpla 1 mes podremos viajar en avión -se desabrocho el cinturón de Seguridad.

-No te preocupes David, yo lo sé. Mejor subamos a descansar mañana temprano salimos nuevamente -David le beso la frente y se bajaron. Lissa subió a los niños y David bajo las cosas de ellos y cosas personales.

-Creo que dormiremos todos juntos -miro la cama y sonrió.

-Lo bueno es que la cama es grande -David entró al cuarto de baño mientras Lissa alimentaba a la bebé. Cuando los dos se ducharon, se acomodaron poniendo a Dav y Caroline en medio de los dos, haciendo un escudo, mientras la luz de la Luna entraba por la ventana.

Continuará...
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