Del Deseo A La Tentación Parte 2

CAPÍTULO XXVI

Cuando llegaron las parejas a la casa de la Familia Hoffmann. Entraron a la espaciosa casa donde el pequeño Dav corrió hacia los brazos de su madre, la cual lo cargo y se encaminó a la cocina junto a Támara. David y Owen entraron a su despacho, Owen cerro la puerta detrás de él y David se dejó caer en la silla detrás del escritorio mientras si amigo tomaba así entre frente a él.

-Bueno, aquí estamos, dime ¿Qué fue lo que le hiciste a tu esposa?  -Owen lo miro esperando escuchar una respuesta. 

-No estoy seguro pero...quizá una posible infidelidad en un estado de ebriedad y...la visita de una mujer del pasado...  -se froto los ojos y se aflojó la corbata.

-¿Cómo que una posible infidelidad?  -abrió mucho los ojos  -¿Engañaste a Lissa?

-No, no...yo no recuerdo nada de esa noche, pero por lo que me dijo la mujer, según ella dice que sí.

-No puede ser  -se pasó una mano por el pelo.

-Y encima Lissa fue a buscarla, la agarro a bofetadas y la amenazó. Y no conforme todavía la muy descarada ofendió a nuestros hijos, esa maldita...  -apretó la mandíbula y cerro los puños.

En la cocina Lissa le entregaba al pequeño un paquetito de galletas, mientras lo sentaba en una silla y Támara se servía un vaso de agua fría.

-Mira pienso en que deberías hablar bien con David, es un muy buen hombre...

-Yo no he dicho lo contrario  -miro a Támara desde el otro lado de la mesa -Pero estas de acuerdo conmigo en que su...  -miro al niño  -Conducta esa noche después del juicio de su hermano no fue la mejor.

-Eso definitivamente es verdad  -miro el vaso con el agua cristalina.

-¿Y entonces que hago?  -se sentó desanimadamente en la silla.

-Hablar, Lissa, hablar, aclaren ese problema sin más  -Támara le sonrió a su amiga cariñosamente  -Cambiemos de tema. Cuéntame bien como fue el caso.

-Si, debo decirte que antier el juicio fue más difícil de lo que pensé...

-¿Por qué? Eres una experta en tu trabajo como David, nada es imposible para ustedes  -jalo una silla y tomó asiento cerca de Lissa.

-Recuerdas que cuando te llamé, te dije que el caso era de una supuesta casa de caridad pero que los fondos recaudados no los entregaron y eran demasiadas las veces que había hecho los depósitos.

-Sí, si eso me dijiste ¿Se complicó más de lo normal o salió algo nuevo?

-Bueno pues...no sé cómo pero Jordy esta implicado en este caso también y de paso el jodido Peter. A Jordy lo tuvieron presente en el juicio.

-¡¡¡QUÉ!!! No me digas que tiene más antecedentes, que no bastó con lo que nos hizo y a las demás mujeres durante tanto tiempo  -la miro sorprendida y alterada logró decir  -Lo que nos quiso hacer a ti y a mí...

-Primero cálmate. A tu bebé le puede hacer daño. Y todos estamos igual o peor, tú crees que para mí es súper fácil llevar a mis clientes ante quien nos secuestro, el que es mi cuñado y tío de mis hijos  -apoyo las manos en las rodillas  -Y luego la mujer esta que regresa de NY para querer algo con David, por eso tuve que amenazarla.

-Bien hecho  -respondió con alegría.

-Pero ella me respondió diciéndome que quien me aseguraba que el fuera feliz, que yo era una niña para él. Que como era posible que me haya convertido en su esposa. Que mis hijos eran unos bastardos...  -pensó en esa palabra y hasta un tirón en el estómago sintió.

-¡¡ESA HIJA DE...!!! Pero no hagas caso. Tu y David son felices, tiene un hermoso matrimonio  -se puso de pie y saco a la bebé de la cuna  -Mira los bien Lissa, son pedacitos de ti y de él, son preciosos. David el vivo retrato de su padre, quédate con esas imágenes y no des por vencida la batalla  -acunó a la bebé en sus brazos.

-Ellos son la luz de mis días  -susurro.

-Nadie dijo que el matrimonio fuera fácil, pero aquí tienes razones de sobra  -acarició el rostro de Dav.

-Así es.

Después de mucho platicar, dos horas aproximadamente. Owen y Támara se retiraron de la casa de sus amigos, los dejaron solos para que hablaran y solucionaran su problema, el malentendido que estaba entre la pareja.
Lissa había decidido que se tomaría un baño. Entró al cuarto de baño de la habitación principal, donde pasaba sus noches con su esposo David, el amor de su vida (realmente es admirable el como él se convirtió en su primer amor formal, el que terminaría uniendo su vida a ella, sin necesidad de conocer a más hombres para saber que con él quería despertar todos los días de su vida).

Continuará...