Capítulo 26: Un Poco de Paz

1.5K 135 81
                                    

Maléfica aparece justo en medio del campo de batalla. Con su cetro hace que todos los partidarios de su lado se queden inmóviles. Causa varias exclamaciones de horror pero al ver que no planea atacarlos la confusión aumenta.

Los líderes del bando contrario también hacen que todos se detengan y ordenan que se vuelvan a reunir en filas. Al ver a Mal al lado de Maléfica temen lo peor. Todos comienzan a murmurar cuando Evie también llega al lugar.

Las tres juntas serían su perdición total.

—¡Traidoras!— gritan varias veces.

—¿Y es por ellos por quien quieres luchar?— murmura Maléfica entre dientes.

Mal ignora eso. Camina hasta llegar frente a frente de todas esas personas que no parecen estar felices de verla. Intenta parecer calmada pero los abucheos no ayudan. Mulán alza una mano en forma de puño y todos guardan silencio.

—Ya no más sangre. ¡Ya no más muerte!— grita Mal señalando a su alrededor—. Ustedes desean la paz, pues bien, he llegado a un acuerdo con Maléfica. Un acuerdo que garantiza el final de la tiranía sobre Auradon si sale como espero.

—¿Qué clase de acuerdo?

—Un enfrentamiento. Entre Evie y yo. Un combate de magia donde se regirá la única regla de la Magia Oscura— mira a Evie unos segundos antes de terminar—. Y esa regla es que no hay reglas.

Nadie ahí puede creer lo que escucha. Mal está dispuesta a enfrentarse en un duelo por todos ellos. Mal, a la que todos excluyeron, en la que nunca nadie confió para que se presentara a luchar de su lado, ha demostrado por mucho que sí sería una reina digna al buscar el bienestar de todos por sobre el suyo. Ofrecerse así, por el bien del pueblo, hace que muchos se sientan pésimos por sus acciones pasadas.

—¡Mal!— una persona comienza a empujar y hacerse espacio entre las personas—. ¡Mal!

Unos cuantos segundos después Ben aparece entre la gente. Lo ha escuchado todo. La pelimorada sonríe el verlo pero estira el brazo para detenerlo.

—No te dejaré que hagas eso. Yo soy quien debería sacrificarse, no tú.

—Maléfica me quiere a mí.

Ben busca en Evie algo que le diga que no se atreverá hacerle daño a Mal, pero la princesa está muy ocupada pensando con la mirada ausente hacia el horizonte. El rey quiere acercarse una vez a Mal pero es alejado por la magia de Maléfica.

—¡Mamá! —se queja Mal—. Estaré en lugar acordado a tiempo. Ahora, llévate de aquí a tus hombres y déjame en paz el tiempo que queda.

—Bien—accede la Emperatriz. La hace un gesto a Evie para que la siga—. Si faltas a tu palabra sabes que habrá horribles consecuencias.

Maléfica golpea el suelo con su cetro, las dos desaparecen y también todo el ejército. Los soldados rompen posiciones y se dejan caer, algunos sentados, otros se acuestan en la tierra. El cansancio es demasiado. Sólo algunos guerreros se toman el tiempo de acarrear los cadáveres a un lugar específico del campo de Batalla. Unos cuantos más lloran sin consuelo.

La imagen es triste y desgarradora.

—Mal.

Ben rodea fuertemente a la chica sintiendo de inmediato que la fortaleza que ella finge tener se desvanece conforme los segundos pasan.

—No tienes que hacer eso. Es Evie, no podrás luchar contra ella.

Él tiene razón. No podría hacerle daño a su mejor amiga ni aunque estuviera siendo amenazada de muerte para hacerlo.

—Solo quiero que esto termine.

Se sientan en el suelo aún abrazados. Mal cierra los ojos. Poco a poco las personas se acercan a ellos y le agradecen lo que hizo, por detener la guerra. Ben a lo lejos ve a Mulán, ella le pide que se acerque pero el rey no quiere. Está molesto, por ahora no quiere saber nada.

Lonnie aparece y se sienta sin decir palabra junto a ellos. A él se le esfuma el enojo cuando la ve tan destrozada. Ella sonríe un poco al notar que Ben toma su mano y agradece el gesto. En ese pequeño lapsus de paz se dan cuenta de que hace casi dos años sus preocupaciones eran diferentes y sin importancia a comparación del ahora.

La mano de Jay hace que Lonnie se exalte cuando se deja caer a su lado y de inmediato se relaja al sentir sus brazos rodearla. Enlaza sus manos y se apoya en su pecho buscando confort. Jay no está molesto. A pesar de lo que le hizo. Al ver a Doug le sonríe.

—¿De verdad enfrentarás a Evie, Mal? — pregunta Uma. Mal asiente—¿Ella está de acuerdo?

—Evie es un misterio ahora mismo.

—Ya veo. Patea su trasero si ella va en serio, ¿bien?

Mal está segura que no será capaz de hacerlo pero aun así murmura un "de acuerdo" que tranquiliza a todos. Jay está preocupado pero no sabe qué decir. Doug mira un puñado de tierra en su mano soltando un suspiro por lo bajo.

El círculo que se ha formado incluyen a Ben, Mal, Uma, Harry, Gil, Doug, Jay y Lonnie. Hércules y Eros fueron a ofrecer su ayuda a los demás.

—¿Encontraste a Carlos?— pregunta Mal al hijo de Jafar.

—No. No estaba por ningún lado.

—¿Y si está en peligro? Hay que ir a buscarlo, tenemos que...

Mal se calla cuando Carlos y Jane aparecen de la nada, visiblemente agitados pero con una enorme sonrisa.

Mal se incorpora y lo abraza, segundos después Jay se les une y los tres sonríen cuando se alejan. La sonrisa de Carlos se transforma en una mueca de dolor cuando Jay lo golpea en el hombro.

—Te estaba buscando, idiota.

—También te extrañé, Jay— dice con ironía. Jay sonríe y revuelve su cabello con afecto.

Ben, Lonnie, Doug y Jane también se unen en un abrazo. Los cuatro no han estado juntos desde que todo comenzó. Ben murmura disculpa tras disculpa por haberlos dejado. Lonnie y Jane lloran de felicidad. Se habían echado mucho de menos.

7 de los 8 corazones se han reunido

****

¡Por fin se reunieron todos!
O casi todos.

Siguiente episodio: Duelo de Magia Oscura.

Estem

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estem... Creo que ya casi😂

Un mundo de oscuridad ¦ Descendientes [COMPLETA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora