La misión

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Sakura:

Ya infiltradas en aquella aldea, notamos que muchas cosas andaban mal, para empezar si habían muchas chicas de aproximadamente nuestra edad, solo fué suerte la que nos ayudó a pasar desapercibidas pues nuestra llegada coincidió con la de unas nuevas chicas que habían traído a ese lugar, nos mezclamos entre ellas ya vestidas de civiles, ocultando nuestro chakra para que no nos notaran.
Nos llevaron a una especie de granero enorme donde nos explicaron el "porque" de habernos traído en contra de nuestra voluntad; resulta ser que estaban preparando un gran centro de entretenimiento para adultos y nosotras seríamos el entretenimiento principal, nos dijeron que debíamos "portarnos bien" para evitar ser castigadas por ellos, entre más dinero ganaramos para el dueño, mayor sería nuestro buen trato, incluso nos aconsejaron que nos comenzaramos a acostumbrar a este lugar, ya que no volveríamos a salir de ahí, nuestro propósito era averiguar quien era el responsable y detenerlo lo antes posible...

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Pasado un mes de habernos infiltrado, realmente no la estábamos pasando bien, tuvimos la suerte de pertenecer a un grupo de chicas que solo se dedicaban a realizar bailes eróticos, pero durante mis descansos investigué con los demás grupos y resulta que a las demás no les va para nada bien, la gran mayoría tiene que realizar trabajos sexuales y muchas de ellas estan terriblemente golpeadas. A veces, a escondidas, ayudo a las chicas más heridas aplicando chakra curativo, cuidando que nadie nos vea...

Esta noche, antes de comenzar con el "entretenimiento" nos pidieron a todas ser lo más atentas posible con los clientes, puesto que se trataba de gente importante, al igual, también nos advirtieron que si alguno de esos tipos quería acostarse con alguna, tendríamos que hacerlo... Me preocupé por Tenten y Hinata, ellas probablemente aun son castas pero ¿Qué podríamos hacer? Estábamos cumpliendo una misión.

Se llegó la hora del entretenimiento, nuestras vestimentas que muy apenas cubrían lo escencial ya estaban bien puestas, los clientes comenzaban a llegar, en grupos pequeños realizabamos nuestro "show", solo esperando gustarle a algún depravado para hacerle un baile privado o en su defecto... Sexo.
Pasados diez minutos de haber realizado mi acto, uno de los tipos que nos "cuidaba" me mandó a llamar.

- tienes cliente niña.- habló directo, ni siquiera sabía mi nombre.

- ¿Un baile privado?- intenté averiguar.

- no, este tipo quiere acostarse contigo,- comenzó a caminar conmigo.- debes hacerlo bien, pagó bastante por tí sólo para tener una hora.

- umm... De acuerdo.

- mira, te voy a decir lo que les dije a las demás niñas; solo... Relajate, piensa en otra cosa o yo que sé, simplemente no dez una mala cala ¿De acuerdo?

Me limité a asentir solamente, el tipo me llevo hasta un pasillo lleno de habitaciones enumeradas, me comentó que ya que como nosotras solo nos dedicabamos a bailar, estas alcobas estaban sin estrenar, incluso que había una habitación especial para cada una de nosotras, la mía era la número doce, al llegar, el tipo me detuvo y me advirtió que de vez en cuando nos estaría vigilando por una ranura para serciorarse de que estuviéramos haciendo nuestro trabajo y que no les pidiéramos ayuda para escapar, ya que siendo así, recibiríamos un castigo.

Entrando en aquella habitación, cerré con seguro, no sé, por alguna razón me sentía mas protegida ahi dentro, estaba muy poco iluminada, solo lo suficiente para distinguir las cosas, era una luz tenue azul, la cama era grande y todo estaba decorado de una forma muy elegante, a primera impresión era una habitación hermosa, cualquiera la desearía para dormir una cálida siesta, pero supongo que después de esta noche, ya no la vería tan hermosa. Mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de un líquido callendo dentro de una copa, volteé hacia la dirección donde provenía aquel sonido y lo que ví me enfrió la sangre, aquel hombre que se encontraba de espaldas tenía la postura, el tipo de cuerpo, incluso la forma de tomar la copa... Todo lo que alcanzaba a notar de él me recordaba a Kakashi... Exepto su cabello...

Solo para tí (Itasaku - Obisaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora