No había razón para que huyera, o eso es lo que cualquier persona diría, pero lo que saben a la hora de hablar, es que nací con una cuchara de oro en la boca (es una metafora), desde que nací fui rodeado de todo lo que necesitaba, hasta mas de lo que una persona podria necesitar, salvo que carecía de mi libertad, al igual que ver a las personas que... bueno, alegraban mi día como mi vida, ahora estaban en algún lugar de East Blue o tal vez en su camino para ser piratas por el Grand Line.
Y yo les iba a alcanzar, si tan solo tuviera una noción de como navegar, había visto hasta hace un poco un cartel de búsqueda de uno de mis amigos de la infancia, lo reconocía por sus pecas, además de mi padre hizo un gran revuelo cuando me lo mostraba, ya que ese era uno de mis muchos amigos que deseaba ver, al igual que otra escoria de la sociedad con la que me llevaba.
Mis amistades... no son muy bien vistas por mi padre, o sus compañeros de trabajo.
Esperaba yo tampoco se bien vista, como para mis padres se olvidasen de mi, ya que llevo dos años fuera de casa, pero que se olvidasen de mi, era bastante difícil, ya que ellos, eran el principal problema a la hora de mantenerme en una tripulación.
Me encontré de todo, hice tanto amantes, como amigos y enemigos en el camino, pero al final del día, en algún momento, tenía que separarme de ellos, ya que los problemas que traía estar conmigo eran bastante, algunas despedidas eran más difíciles que las anteriores, otras hundía el barco.
Si, no duraba mucho en una tripulación, salvo que en una... dure medio año, fue la despedida más difícil, ya que lo único que pudo alejarme de ellos, fue la muerte. Y después de mi gran perdida, solo piratas brabucones, asesinos conocía, y mis habilidades adquiridas, lo único que deseaban de ellas, era explotarlas, a cambio de mi vida, pero... no tenía las suficientes ganas como para seguir viviendo, y mucho menos en medio de mi naufragio, debajo que aquel sol ardiente, no comida o agua, morir, por fin y reunirme con él.
—¿Estará bien? —preguntaba un sujeto de cabello rubio, llevaba la ceja un cuanto extraña.
—Por alguna razón, se me hace conocida —dijo otra voz, mi mirada desenfocaba a aquel sujeto, intentando verlos mejor, estaba lista para atacarles, botarles de aquel bote, e irme a buscar una isla.
Esos sentidos se calmaron, cuando aquel sujeto de un peculiar sombrero de paja y una cicatriz en el ojos izquierdo, me hicieron suavizar mi agarre, mi pecho se llenaba de ánimo y alivio, abría los ojos un poco mejor, al igual que sentía un poco de agua tocar mis labios.
—¿Lu-lu Luffy? —pregunta extrañada.
Este se quedaba sorprendido, le sentí estremecerse cuando brincaba a abrazarle, pero han pasado diez años, desde la ultima vez que le tenia visto, este me miraba con su típica cara de confundido, hasta que por fin soltaba una sonrisa.
—Ruby —sonríe—. ¿Qué hacías flotando en el mar? Tus padres habrán de estar muy preocupados —reprendía el sombrero de paja, que parecía estar diciendo cosas serias y sensatas, como rara vez sucede.
Le extendí una sonrisa.
—Si, habrán de estar preocupados hasta la muerte —explicó sin sacar una sonrisa de sus labios, los tres chicos que tenía enfrente parecían no comprender su estado de ánimo—, porque su hija, se está por convertir en una Pirata. Aunque para ser sincera, la vida en el mar, no me ha tratado muy bien.
—¿A dónde te dirigías?
—A ningún lugar, en realidad, no soy muy buena con el tema de navegación —explicó la chica avergonzada, evitando mirara los tres chicos.
—¿Qué tal si te unes a mi tripulación? —ofrece el sombrero de paja, le extendía una mano, haciéndola desconcertar, por cuestión de tiempo.
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La Pirata Escarlata (One piece x Oc)
FanfictionEs la gran era de los piratas. Miles de piratas han levantado sus banderas y han zarpado hacia la batalla con el fin de encontrar el tesoro del rey pirata Gol D. Roger, "One Piece". Esta la historia de una joven, que desea convertirse en pirata, s...