"Que casualidad, el amor no se va, ni aunque se haya ido el deseo, sigue mi corazón esperándote, no hay delirio que me mate mas que no tenerte a mi lado."
No había mucho que buscar por la tarde en la biblioteca, Armin pensó que alguien lo había llamado cuando se dió la vuelta y se perdió entre los pasillos, extrañamente, un libro se callo y una pequeña nube de polvo se extendió por sobre el suelo, fue tan raro, pero sus hombros se alzaron sin importancia, recogió el libro, sacudiendo el polvo entre su camisa y su abrigo, una sonrisa formándose en su alegre rostro cuando sus dedos rozaron las pequeñas letras del título del libro, "Nadie quiere hablar de amor", era un ejemplar como el suyo, aquél libro que Eren le había obsequiado, ahora estaba en sus manos y no tenía idea del porque había sucedido, después de todo Eren le había dicho que los fantasmas no eran reales y no tendría ningún motivo para creer que eso era obra de alguno de ellos.
Se rió, dejando caer el libro sin ningúna intención, simplemente se había resbalado o eso quería pensar.
Justo cuando estaba apunto de agacharse para recoger el libro, una vez más, alguien ya se le había adelantado.
Armin frunció el ceño, mirando con afán a aquella persona desconocida tomando con cautela el libro.
Y no obstante deseando jamás haber levantado la vista.
Ojos verdes, cabello castaño...
—¿Crees que haya alguien que no quiera hablar de amor?
Armin se atragantó con su propia saliva, su corazón palpitando tan fuertemente después de haber estado tan frio en su pecho, estaba asombrado, tratando de entender que estaba pasando porque no podia ser real.
—¿Estás bien?-se atreve a preguntar el chico de ojos verdes frente a el con una pizca de preocupación, mientras visualiza cada expresión de Armin.
Se queda frente a el tan cerca que Armin no tarda en retroceder unos cuantos pasos.
—¿Qué?—alcanza a decir mientras se encuentra en un momento de desorientación, lo que es real, lo que es mentira ya no sabe que es lo que debe creer.
—Oye, ¿estás bien?-vuelve a preguntar su acompañante. Mirando inquietante.
Y dos grandes ojos verdes brillando.
Armin sale de su asombro y asiente, tiene que actuar normal para que este chico no lo considere algún tipo de loco. Porque el sabe que es el único actuando de manera extraña.
—Si, si estoy bien, gracias-le dice el rubio, trata de mirar hacia el suelo porque no quiere seguir imaginándose cosas que no son.
El chico de ojos verdes le sonríe, le extiende el libro y se marcha.
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一Flower Wall一Eremin.✨
Ficción histórica"No existe la muerte para nosotros, simplemente renacemos y todos los colores florecen"