"Y de pronto... Sales de la nada, y recuerdo que te debo un lunar... Me hace viejo sentir que perdí el tiempo..."
En una triste noche de Octubre, Jimin perdió al amor de su vida al recibir dos impactos de bala...
Dos años después conoce a Min Yoong...
El pálido joven corrió cuadras enteras huyendo de lo que acababa de pasar, su respiración era agitada y se entrecortaba debido al llanto que amenazaba con aparecer nuevamente. Corrió hasta llegar a su pequeño departamento, encerrándose al instante. Camino por todo el lugar odiándose internamente por lo que había pasado, no podía creer como todo se había ido a la mierda de esa manera.
Él estaba bien, su trabajo estaba bien, se estaba comenzando a sentir tranquilo y libre, ¿Qué carajo salió mal? ¿Quién mierda lo delató? ¿Qué hacía ese chico en esa calle solitaria? Y sobre todo ¿Por qué ese joven se atravesó en su camino?
Él no quería hacerlo, no quería lastimar a nadie, el solo quería proteger al chico, sin importar que el mismo saliera herido, no quería involucrar a un inocente en toda la mierda que estaba sucediendo.
Se sentó en la orilla de su cama y se inclinó hacia adelante tomando con fuerza su cabello, él nunca había asesinado a alguien, él nunca hubiera imaginado asesinar a alguien, él no era esa clase de persona, él quería estar tranquilo, quería estar lejos de ese mundo de mierda, él quería hacer las cosas bien por primera vez en su vida y redimir todo lo que había hecho mal hasta entonces.
La noche transcurrió lentamente, y Yoongi bebió todo el alcohol que guardaba en la heladera, perdió la cuenta de cuántos cigarros fumó, necesitaba olvidarlo, necesitaba borrar lo que había pasado, tenía miedo y tristeza, quería morir, sentía su corazón roto en mil pedazos y aun no entendía por qué. Tenía claro lo que había hecho, pero le dolía como el infierno, como si hubiera conocido de toda su vida a aquel chico, y sentía una angustia desgarrando su garganta, al recordar al pequeño joven que se hallaba inconsciente, sentía impotencia con el mismo al no quedarse y cuidar de él, pero ¿Qué carajo estaba pensando? Ni siquiera lo conocía, pero ¿por qué sentía como si lo hubiera abandonado? Más allá de la culpa, Yoongi sentía miedo de haber dejado a aquel pequeño allí, sentía que quería regresar el tiempo atrás, recogerlo del suelo y llevarlo consigo, pero ¿Por qué?
A la mañana siguiente, Yoongi no llego a su trabajo, su jefe se preocupó por la ausencia del pálido empleado, así que lo llamo repetidas veces pero no recibió respuesta alguna. Al día siguiente tampoco apareció, ni al siguiente, así que el hombre decidió pasar por el apartamento del chico para saber si se encontraba bien. Al tocar la puerta, salió una señora mayor la cual era dueña del inmueble. Al preguntar por Yoongi ella le dijo que el joven había entregado hace un par de días las llaves de su apartamento, y había dejado para su jefe una pequeña nota de aviso.
El hombre extrañado recibió el papel el cual inmediatamente abrió para saber de qué se trataba. Su seño se frunció al leer lo que decía...
"Lamento haberme ido así, necesito un cambio en mi vida, las circunstancias me han jodido mucho. Voy a viajar, aún no sé a dónde, así que agradezco mucho su ayuda, espero algún día retribuirle como lo merece.
- Min Yoongi"
El hombre suspiro pesado, sabía que seguramente su joven empleado estaba pasando por una situación verdaderamente fuerte, aunque no supiera con exactitud qué había ocurrido, él lo entendía, así que volvió a su hogar y pidió a Dios que cuidaran de aquel chico, era lo único que podía hacer por él.
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