"Y de pronto... Sales de la nada, y recuerdo que te debo un lunar... Me hace viejo sentir que perdí el tiempo..."
En una triste noche de Octubre, Jimin perdió al amor de su vida al recibir dos impactos de bala...
Dos años después conoce a Min Yoong...
Jimin, inconciente por lo que se podía apreciar, parecía estar recostado a una pared, el lugar era oscuro, y el flash de la cámara había iluminado solo su rostro. No estaba herido, al menos no se veía herido, sus manos estaban atadas y su rostro rojo, había estado llorando.
La adrenalina y la ira invadió por completo el cuerpo de Yoongi, apretó el teléfono entre sus manos temblorosas y cerró fuertemente sus ojos intentando mantener la compostura, pero se le estaba haciendo difícil, quería matar a quienes le habían hecho eso a su rubio, sentía impotencia, miedo y mucha rabia, el teléfono volvió a vibrar y rápidamente lo revisó.
Nuevo Mensaje Numero Desconocido
¿Que te parece si hablamos? Barrio Luyan Calle 56 callejón frente al edificio 37.
9:37pm
Cruzó corriendo la carretera frente a su residencia y al montarse en la camioneta arrancó sin siquiera pensarlo dos veces. El sudor bajaba por su cuello y la preocupación aumentaba a cada segundo, quería llegar lo antes posible, quería que Jimin estuviera a salvo, jamas en su vida había sentido tanto miedo por perder a alguien, y ahora estaba experimentando aquella incertidumbre tortuosa que lo hacía erizar del desespero.
Desde la esquina de su residencia, Taehyung lo vió arrancar y la palidez de su rostro y la expresión de pánico que tenía el mayor fueron suficiente para hacerlo montar su motocicleta y seguirlo.
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El destello de una luz blanca impactando en su rostro lo hizo recobrar la conciencia al instante, frunció el ceño intentando subir su mano para frotar su vista y fue allí que se notó que sus manos se mantenían atadas a con lo que parecían ser cintas de amarrar cables.
Su respiración comenzó a agitarse cuando al levantar el rostro vió a aquellos tres tipos que protagonizaron muchas de sus oscuras pesadillas en un pasado y junto a ellos y pareciendo ser el más imponente, el hombre mayor que aseguraba no querría hacerle daño, como si todo aquello no fuera nada. Justo allí pudo notar que el hombre se sostenía con un baston negro y lo miraba sin expresión alguna.
El hombre asintió y dos de los tipos tomaron a Jimin de ambos brazos poniéndolo de pie aun recostado a la pared de ladrillos, el menor comenzó a temblar con el agarre de aquellos hombres sobre él, uno de ellos lo jaló para caminar detrás del hombre mayor hasta salir del callejon en el que se encontraban, su expresión de miedo cayó al intante al reconocer aquel lugar.
Lo recordaba muy bien, estaba allí, en el mismo sitio, en la misma calle y frente al mismo edificio, en el cual durante tres años había sido tan feliz, en el mismo lugar donde su vida y su felicidad se vinieron abajo en menos de un instante.
Giró su vista mientras sentía como el terror en su cuerpo crecía cuando sobre el asfalto notó la silueta blanca, difusa y casi invisíble de donde había caído el cuerpo de Jay. Su garganta se cerró y las lágrimas comenzaron a resbalar por sus mejillas. No podía procesar bien lo que pasaba y aquello lo estaba volviendo loco.
