▶ D I E C I O C H O

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Lauren miró el techo y analizó cada rincón.

Giró los ojos para ver a la morena a su lado dormida, sonrió suave.

—Camz.—susurró.

Camila solo soltó un pequeño gruñido.

—¿Si me gustaras, yo tendría una oportunidad contigo, no?—soltó la duda de sus labios.

La morena solo suspiró un sí.

—Genial.—dijo riendo, abrazando a Camila, quien solo se acurrucó más.

Solo pasaron quince minutos cuando la morena despertó de golpe.

—¡Lauren no te vayas en el unicornio!—gritó.

La oji verde soltó una carcajada.

—¿Un mal sueño?—preguntó divertida.

Camila la golpeó con la almohada.

—Soñé que me dejabas sola y te ibas en tu unicornio.—bufó.

—¿Sola en dónde?

—En el mundo, te ibas a la luna.—hizo un puchero.

A Lauren le causó tanta ternura que no dudó en abrazarla.

—Camzi, estoy segura de que si yo fuera a la luna te llevaría a ti en mi unicornio.—sonreía.

—¿Encerio?—sus ojos brillaron.

La oji verde asintió.

—Tan segura como que te haré brownies para desayuno.

Camila rio.

—Olvidaba que esta es tu casa.—murmuró la morena.—Aun me duele un poco la cabeza, ¿he bebido mucho?

La pálida negó.

—En realidad esta vez estabas menos tomada que otras. Pero aún así de delirabas un poco.—hubo un silencio.

Un largo silencio.

—¿Pero qué tanto me ves? Me pone nerviosa.—cubrió su cara la oji verde con ambas manos.

—Creo que sentí algo en mi estómago.—dijo mientras frotaba su barriga.

—¿Mariposas del amor?

—O vómito del alcohol.





























Corto pero gracioso:").

Voten y comenten, puto el que ignore esto.

Un Chicle.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora