Ashley no es feliz, siente que no está viviendo su propia vida, sino que la está interpretando para que los demás piensen que es lo que se espera de ella. Nadie sabe lo que piensa, nadie sabe lo que siente. Empezará a creer que no todo es como ella...
Cuando te enamoras siempre piensas que la otra persona sentirá lo mismo, que al fin de todo, vivirás tu propia historia de amor. Pero la realidad es que las historias de amor solo pasan en los libros. Que en la vida real nunca llega a pasar todo lo se que describe en sus hojas. Porque lo que se escribe es todo lo que nos hubiera gustado sentir y vivir en algún momento de nuestra vida. Pero la realidad es muy diferente. Existe el amor, claro que existe. Pero no siempre termina bien. A veces no termina con el comieron perdices y vivieron felices, a veces una historia de amor no tiene punto final. A veces puede quedarse a medias. Y ¿qué pasa cuando en un libro te dejan a medias? Te vuelves loco pensando que pasará, si habrá continuación o si simplemente se queda así. El amor en la vida real es muy complejo porque los humanos lo hacemos así. Si nos gusta alguien damos mil vueltas a la cabeza para buscar mil y unas respuestas a lo que sucedería si... ¿Qué pasaría si en un libro el final no fuera como te esperas? ¿Qué pasaría si te sorprendiera el final? No siempre lo que quieres se puede tener. No siempre lo que deseas se cumple.
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