Capítulo 16

34 3 0
                                    

Tiffany y yo estuvimos hablando casi toda la tarde, me ha contado que llevaba casi tanto como yo quedando con Thiago, que se había enamorado de él al igual que yo. Estuve llorando hasta que me quedé sin lágrimas. Ella ha hablado con él para pedirle alguna explicación, pero yo soy incapaz, no tengo el valor suficiente para eso, llamadme tonta o cagada, pero cuando tienes una decepción tan grande como de la que me acabo de enterar, lo último que quieres es hablar con el causante de ella. Los consejos de Tiffany son que borre su chat, al completo y su número, cosa que veo imposible, una conversación con alguien es demasiado importante y es algo que no soy capaz de borrar. Si borro alguna conversación es porque de verdad no quiero volver a tener ningún tipo de contacto con esa persona o ha dejado de importarme. Y sé que con Thiago me veo imposible borrarlo de mi vida tan así. Soy gilipollas lo sé. Se ha estado liando con otra y a saber qué más cuando estaba conmigo... pero no puedo hacerlo.

“Hazlo, no le debes nada. Yo no la borro porque seguimos siendo amigos, lo somos desde hace mucho, pero tú puedes deshacerte de él.”

Así que no sé cómo, creo que no era consciente de lo que estaba haciendo, pero lo borré, borré la conversación. Me arrepentí al instante, me sentí como si algo se me hubiera roto por dentro. Las lágrimas no dejaban de caer de mis ojos haciendo que manchara el teléfono.

”Lo he hecho...”

Lo siguiente que hice fue intentar borrar su número, pero eso sí que fui incapaz. Sin decirle nada a Tiffany, guarde su número con un simple punto.

No he salido de mi habitación en todo el día. Mis abuelos han venido varias veces para comprobar como estaba, pero con la excusa de que anoche no paré, se han creído que estoy cansada. Pienso quedarme en la cama hasta que pueda, pero creo que no es el mismo plan que mi vecina tiene pensado. A las ocho o así, un mensaje de Andy aparece en la barra de notificaciones. Ojalá pudiera decir que no me desilusiono pensando que seria de Thiago, llevo así todo el día, esperando a que el gilipollas se dignara a mandarme un puto mensaje.

*¿Quieres salir a dar una vuelta?*

Estoy muy tentada a decir que no, pero he venido a San Francisco para olvidarme de los dos... de uno ya sé porqué no quería hablar conmigo ni quedar, del otro... si soy sincera necesito hablar con él, pero no sé si querrá saber de mí. Esta claro que si sigo así me voy a acabar hundiendo más en la miseria de vida que tengo. Así que no dudo más y le contesto que me encantaría y a las nueve ambas estamos listas para salir. El plan de esta noche es cenar en algún bar y después ir de fiesta. Cuando nos reunimos con todas, no me resulta tan difícil olvidarme de todo y disfrutar como la noche interior. Las chicas tienen algo que hace que los problemas se queden aparte y solo se disfrute el momento. Sin duda me ha tocado la lotería con ellas. Nos pasamos toda la noche, hablando, conociéndonos mejor en la cena y disfrutando como nunca. Pero como yo soy un caso especial, acabo bebiendo más de la cuenta y el bajón se apodera de mí como nunca lo había hecho, pero no solo de mí, también de varias chicas. A las que acabo contando todo lo sucedido y ellas me cuentan sus problemas. Así que a la hora de ponernos a bailar estamos tan decaídas que decidimos irnos a casa. Quién me iba a decir que acabaríamos la noche así. Al llegar a casa Andy y yo nos despedimos y diciéndo que mañana quedaremos para hacer algo. Una vez en mi habitación recibo un mensaje de Amber.

*Te digo una cosa, la chica esa no creo que sea buena amiga... no te fíes mucho de ella.*

Me quedo pensando en ello... puede que tenga razón, hay cosas en su actitud que me dejan pensando de más en si de verdad puedo confiar en ella. No me da tiempo a contestar porque otro mensaje aparece.

*Me da la sensación de que quiere vía libre con el tal Thiago.*

*Puede que tengas razón. Gracias por escuchar.*

No Siempre Es Lo Que Parece Donde viven las historias. Descúbrelo ahora