Capítulo 18

39.6K 2.3K 530
                                    

Adam

Quise cancelar la cena en casa de mi hermano después de ver a Cassandra triste, pero ella no lo permitió, fue firme cuando dijo que David tenía que aceptarnos tarde o temprano. No me gusta la forma indecisa en que dijo "aceptarnos" no somos una pareja oficial soy consciente de eso, pero tenemos una relación muy seria y exclusiva a mi punto de vista y no quiero que lo dude, solo no quiero asustarla diciendo las palabras en voz alta.

— Papá ¡Jared manchó mi corbata favorita de solanum lycopersicum! —Jake luce molesto mientras me enseña la corbata pequeña sucia, froto mi rostro para volver a ellos, no puedo distraerme mucho cuando ya están discutiendo por algo nuevo.

— Campeón ¿Para que quieres llevar una corbata a casa de tu zio? Es una cena informal—cuando mi pequeño hijo castaño profundiza su ceño a uno molesto me hace darme cuenta del error que cometí ¿Qué pude decir mal?

— ¿Y qué es el solanum lycopersicum lo que sea? —pregunta Jace que dibuja en su bloc mientras ve televisión.

— ¡Súper papá! Irá Cassy, no quiero verme como un vago cualquiera y para tu información Jared, el solanum lycopersicum es el nombre científico del tomate, lo leí hace dos semanas en un libro.

— ¿Haces esto por Cassandra? —ahora sí estoy confundido.

— ¡Yo le estoy haciendo un dibujo! —me dice Jace levantando su lápiz.

— Y yo le llevo una flor que sembré hace días, fue un buen elemento de estudio, pero quiero que Cassy la tenga ahora—Jared aparece en la sala con una pequeña maceta y efectivamente hay una flor morada en ella.

— A ver, campeones acérquense aquí—señalé la pequeña mesa que estaba en la sala— Hace mucho tiempo no nos reunimos para hablar, cuéntenme ¿porqué le llevan todo eso a Cass? —los tres se acercan a mí y nos sentamos alrededor para estar más tranquilos.

— Nos cae bien—responde Jace después de unos segundos de silencio mientras juega con su manitas, ninguno de los tres me ve a la cara, incluso Jake parece pensar cuidadosamente sus palabras.

— Queremos que se quede papá—suelta de golpe Jared— Cassy nos gusta mucho, ella no es como las otras mamás de la escuela, no tienes que fingir que le pones atención como con todas las mujeres con las que sueles hablar, Cassy no nos habla como si fuéramos tontos, pero sobre todo nos hace sentir...—no termina de hablar porque su voz comienza a fallar. ¿Mi chico va a llorar?

— No nos hace sentir bichos raros—termina Jake por su hermano mientras va a abrazarlo, Jace se les acerca y veo una escena que rompe mi corazón, los dos juntos consolando a su hermano.

— Vengan aquí—les digo con dificultad, cuando están conmigo los cubro con un fuerte abrazo y beso sus cabecitas, muchas veces olvido que tan solo tienen seis años y les hace falta hablar más de lo que demuestran.

— ¿Sus compañeros en la escuela los hace sentir raros? —les pregunto cuando se calman un poco.

— No, pero es complicado—me responde Jace— Super papá, somos diferentes y lo sabemos, Jake no siempre puede decir cosas porque los niños de nuestra edad no lo entienden cosas como "solanum lycopersicum" le harían ganar miradas groseras, a nosotros nos da curiosidad por saber qué es, los demás lo ven como alguien tonto y los tontos son ellos por no ver que Jake sabe más de lo que ellos sabrán en toda su vida.

— O cuando Jared ayuda a nuestros maestros para arreglar sus computadoras o al de química con los experimentos—dice Jake soltando las palabras ya sin analizar, simplemente desahogándose— A nosotros nos hace sentir orgullosos que nuestro hermano sea bueno con los números, los demás lo ven mal.

Todo lo que nunca quiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora