Writober 2019 [ Harry Potter ]

✦ [ Día 3: Here comes the sun. ] ✦

[ ᴀ sᴛᴏʀʏ ᴀʙᴏᴜᴛ ᴀ ᴛʀᴀɴϙᴜɪʟ ᴘʟᴀᴄᴇ: ᴡᴏʟғsᴛᴀʀ ]

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Todo se sentía irreal, Remus no creía lo que veía y no estaba seguro de que ya se encontraba sin vida. Lo último que había contemplado era el rayo verde de la maldición asesina junto a su esposa Tonks, estaba confundido porque si ese lugar era el cielo, ¿por qué ella no estaba con él? ¿qué sucedería con su hijo? ¿con Harry? se sentía demasiado preocupado en un lugar tranquilo, tanto que la sensación de estar fuera de lugar, fue la que más lo golpeo.

El miedo se apoderaba de el lentamente, como el césped verde que comenzaba a tener un horizonte conocido, estaban en Hogwarts, pero no había ninguna guerra, el castillo estaba entero. No había otro sonido que no fueran los pájaros y el viento, hasta que a lo lejos se escuchó una canción conocida que podía reconocer hasta dormido... Here comes the sun de la banda The Beatles, era algo que regularme escuchaba con sus amigos cuando era tan joven que a veces al contemplar fotos se sorprendía que alguna vez fue un adolescente y no un hombre con canas, rostro depresivo y ninguna familia a quien cuidar que no fueran sus padres.

Camino hasta un árbol lejano, y vio lo que tanto extraño cuando lo perdió... a sus amigos dormidos uno sobre el otro con una vieja radio muggle al lado. James, con su cabello enredado como un nido de pájaros, Peter encima de su hombro, babeando como si no hubiera pegado un ojo durante siglos como cuando aún la maldad no entraba en él. Sirius abrazando a su versión adolescente, como si fuera una pareja tierna. Eran tan jóvenes que no pudo evitar sentirse más anciano de lo que era.

― Éramos adorables, ¿no? ― pregunto una voz conocida que apenas la escucho, se giró para verlo con sus propios ojos ―

― Sirius... ― contesto abrazando fuertemente a su amigo, era seguro que estaba muerto y aquello, era su propio cielo ― deje a Harry solo, lo siento mucho.

― No te preocupes, él lo hará bien. ― dijo Black sonriendole tiernamente tratando de callarlo, aunque Lupin apenas podía decir algo ― mira, estamos despertando.

Remus soltó a Sirius, observando como sus versiones adolescentes abrían los ojos.

― Qué asco Peter ― menciono Sirius con mueca de horror viendo el hombro babeado de James ―

― Nos quedamos dormidos un domingo por la tarde bajo el sol, cre-creo que somos unos ancianos. ― interrumpió Remus entre un bostezo ―

― Jamás había visto un anciano tan lindo como vos Moony ― dijo Sirius logrando que ambos Remus bajaran la vista con un sonrojo y sonrisa en sus rostros ―

― Sigo pensando lo mismo ― menciono el Black mayor ―

― Déjame en paz Sirius ― contestaron ambos Lupin ―

Padfoot tomo entre sus brazos el cuerpo de Remus para besarlo eufóricamente en cada parte de su rostro. En aquellos días verdaderamente se amaban, todavía lo hacían, aunque hayan tomado caminos distintos. Moony entendió por qué Tonks no estaba a su lado.

La había admirado, respetado y querido, pero no la había amado, porque alguien como Sirius no había en el mundo, y cuando él se fue, rehacer su vida fue su única opción para no caer para caer en la tristeza.

Era un día hermoso debajo del sol, en un cielo que solo le pertenecía a Remus junto a Sirius, donde por fin pudieron ser felices en los jardines de Hogwarts, el único lugar donde había sido feliz y murió trágicamente. Un lugar demasiado tranquilo para descansar con su verdadero amor, luego de una dura vida. 

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