Especial: El Hijo De los Jung.

124 12 6
                                    

-¿Cómo le diremos a papá? Dudo que lo apruebe, es decir, somos muy niños para una responsabilidad tan grande. -Habló Laugh preocupado, mientras miraba a su hermana mayor de forma nerviosa.

Los hermanos Jung mayores se encontraban en la habitación de Eun-Yeong, ya que Laugh y ella tenían algo muy importante que discutir.

-Lo sé, mocoso. Sé que es una gran responsabilidad, pero es nuestro error, así que hay que aceptar las consecuencias. Esto es lo que nos hacía falta para madurar. -Dijo Eun-Yeong, mientras jugaba con su cabello y veía a su menor removerse frente a ella nervioso. -¿Te arrepientes de lo que hicimos? Porque si planeas no hacerte cargo, voy a matarte. -Amenazó la mayor y el castaño tembló en su lugar.

-P-pero... ¡Esto es prácticamente tu culpa! ¡Fuiste tú la que me convenció de que hiciéramos esto! ¡Si no me hubieras dicho todas esas cosas, yo jamás hubiera accedido! -Se excusó Laugh, un poco asustado por la reacción de su hermana.

-¿Qué estás diciendo? ¿Estás intentando culparme por todo? Pero que patético, de verdad que eres tan poco hombre. Si hubiera sabido que esto pasaría, nunca me hubiera arriesgado a hacerlo contigo. Típico de los hombres, cuando se sienten presionados, sólo huyen. -Bufó la peli-negra rodando los ojos, no le sorprendía en lo más mínimo de su cobarde hermano.

-¿Qué esperas que haga? ¿Qué me le acerque a nuestro padre con mi típica sonrisa y le diga todo lo que sucedió ese día? No, no puedo hacer eso. Si piensas que soy un miedoso, créelo, porque estoy completamente de acuerdo.

-No puedo creer que estoy escuchando toda esta bazofia. Mamá tiene razón, "no busques a hombres cobardes que pretenden vivir la vida como un valiente". Eres una pequeña gallina, Jung. -Insultó su hermana cruzada de brazos.

-Ella siempre dice eso, pero aún así terminó con papá, no puede quejarse.

-¡Eso no importa, tarado! Lo que me hace enojar es que no quieras hacerte responsable de nuestro hijo, es decir, parecías no tener miedo ese día, te veías muy feliz. -Vociferó Eun-Yeong, ya molesta por la cobardía de su menor.

-Shhh...Nos pueden escuchar, recuerda que papá y nuestros hermanos están en casa. -Rápidamente Laugh cubrió la boca de su hermana y ésta frunció su ceño.

Lo que los hermanos no sabían, era que su padre ya había escuchado la mayoría de la discusión. Debido a que se encontraba pegado del otro lado de la puerta, oyendo aquello con un rostro de completa indignación.

¿Por qué estaba ahí?

Bueno, no era muy común que en medio de la comida, la pequeña Eun-Yeong se levantara de su asiento y le dijera a su hermano: "Jung, tenemos que hablar", para luego llevárselo escaleras arriba, mientras toma su mano.

Eso sólo resultó en encender la curiosidad en el padre, aunque ahora sólo se sentía arrepentido de haberles seguido.

Estaba enojado y decepcionado a la vez, no sabía qué pensar.

Hoseok actuó sin pensar, y con una patada consiguió abrir la puerta de la habitación, sobresaltando a ambos niños dentro. Los menores lo miraron aterrorizados, era la primera vez que observaban a su padre de esa manera, Hoseok estaba completamente serio y de brazos cruzados frente a ellos.

-Quiero una explicación inmediata de todo lo que he escuchado. -Habló de forma fría, incluso hasta su voz sonaba más grave.

-Eh... ¡Todo es culpa de Eun-Yeong! -Chilló Laugh asustado, mientras se escondía debajo de las mantas de la cama y se hacía bolita.

-¡Soplón! -La mayor lo golpeó con su puño sobre las sábanas.

-Sigo esperando, ¿hay algo que quieran decirme? -Hoseok entrecerró sus ojos y la niña suspiró.

¡SOMOS PADRES!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora