34

23 2 0
                                    

ALEX POV

Pasadas las diez y media y después de haber verificado que Alice estuviera en la pequeña casa de a la par, decidí que ya era hora.

Me dirigí sigilosamente hacia mi auto, y
rápidamente salí de la casa para incorporarme a la carretera, todo se había vuelto oscuro. Después de una media hora llegué al gran estadio abandonado al que había estado viniendo durante últimamente, cada vez eran más los autos que esperaban afuera.

Llegué a la entrada principal, donde un guarda grandulón me esperaba, y con quitarme la capucha de mi sweater, para dejar ver mi cara; me reconoció y rápidamente me abrió la puerta.

Entre los pasillos de este mugriento lugar, se encontraban personas fumando, otras personas haciendo sus apuestas de esta noche...y habían algunas que estaban casi teniendo sexo, como si no hubiese nadie más en la habitación. No quería estar ahí. Odiaba ese lugar.

Asqueado por todo lo que había visto durante mi trayecto, entré rápidamente a mi camerino, y tiré mis cosas en el sillón que se encontraba a mi lado. Necesitaba respirar. Me quité el sweater que cubría mi identidad, al igual que mis pantalones, que reemplacé por la una especie de ropa interior usada para este tipo de "actividades". Y finalmente, al estar listo, me miré al espejo, y esperé a escuchar mi nombre por los altavoces.

Más tarde

Ya era la una de la mañana y diablos, quería estar en casa con Jane. Me miré al espejo y al ver todas esas heridas, en lo único que pude pensar era en cómo iba a esconderlas. Ya no había dolor. Sólo vergüenza. Jane no podía saber que había vuelto a esto...o mejor dicho...que nunca me había ido.

Volví a tomar mi sweater, y al intentar ponérmelo, instintivamente solté un gemido de dolor, me miré al espejo y el costado derecho de mi abdomen estaba cubierto en sangre. Diablos.

Me rendí con eso de ponerme el sweater, y simplemente salí de ese cuarto. Quería irme ya de ese lugar.

Estaba apunto de encender mi auto, cuando la voz que más odio en este mundo, pronunció mi nombre.

- ¡Alex!- gritó aquel hombre gordo que no me dejaba en paz- ¿Te vas tan rápido?- dijo cuando llegó a mi auto

- No quiero pasar ni un segundo más aquí- respondí firmemente

- Te recuerdo que te vas, cuando yo lo diga- dijo asomando el arma que traía debajo de su saco- Y como yo quiero, te quedarás una hora más aquí. Hay gente que quiere ver al ganador. Al fin y al cabo te llevas cinco mil dólares a casa, no te quejes- dijo agarrándome fuertemente del brazo hasta hacerme salir del auto

JANE POV

- Diablos Dave, ¿Desde cuando pesas tanto?- me pregunté al intentar sacarlo del auto sin ningún resultado

Hacía más o menos media hora que habíamos llegado a casa, pero me era tan imposible cargar a Dave que no había logrado pasar del porche.

Una luz me iluminó la cara, y al lograr divisar lo que era, distinguí a Alex en su auto a las...¿3 de la mañana? Fue ahí cuando me di cuenta de la estupidez que había hecho, con toda esta situación había olvidado completamente que Alex odia a Dave, diablos.

Alex estacionó su auto al lado del mío y se quedó confundido al verme ahí

- Oh vaya...Así que alguien disfrutó la fiesta ah?- dijo

HONNEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora