HONNE

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ALEX POV

- ¿Estás segura?- le pregunté a Jane, porque sabía que ya no podría resistir más tiempo así

Ella asintió viéndome a los ojos y me besó de nuevo.

- Estoy nerviosa- dijo con una sonrisa ladeada, nerviosa

- Yo también- dije acariciándole la sien

- Pero...tú ya has hecho antes- dijo confundida

- Puede que haya tenido sexo antes, pero nunca había hecho el amor- dije con pena

- Te amo- me susurró al oído,  a lo que yo le contesté lo mismo

Tomé mi miembro con mi mano derecha, y lo froté un poco en su entrada, lo cual la hizo suspirar. Poco a poco empecé a empujar suavemente hacia adentro. Jane cerró sus ojos fuertemente

- Espera, abre tus ojos- sonreí y ella abrió los ojos- Acá estoy ¿Está bien?- ella asintió. - Quiero que me veas a los ojos mientras lo hacemos- La tomé de las manos fuertemente, y lentamente seguí introduciéndolo dentro de ella, lo cuál instantáneamente hizo que yo soltara un pequeño gemido- Estás tan...estrecha- dije entre gemidos, a lo que ella sonrió un poco

Conforme me hundía más en ella, sentía como me apretaba más fuerte las manos, así que decidí quedarme un momento sin moverme.

JANE POV

Sentía un poco de dolor al tener a Alex dentro de mi, así que apenas decidió quedarse estático por un momento, al fin pude dar una bocanada de aire y tranquilizarme un poco.

- ¿Estás bien?- preguntó nervioso

- Si- sonreí y lo besé de nuevo por un rato más, hasta que decidí que ya estaba lista para que se moviera- Puedes...¿Continuar?- dije nerviosa, a lo que él sonrió

Sacó su miembro, y lo volvió a introducir lentamente, lo cual me dolió un poco, pero era soportable. Empezó a moverse, y aunque al principio dolió, poco a poco el dolor se iba esfumando y era reemplazado por el placer.

Al principio era lento, pero luego los movimientos se hacían más rápidos, lo que provocaba algunos gemidos de mi parte y algunos de la suya.
Cuando yo soltaba algún gemido, Alex callaba el gemido con besos profundos, lo que aumentaba más y más el placer.

Cada vez los movimientos se volvían más rápidos y más profundos, hasta que Alex soltó un último gemido y cayó sobre mí jadeando. Se siguió moviendo un par de minutos más y ahí fue cuando llegué al límite del placer. Sentí como mi respiración se aceleró y el placer me recorrió el cuerpo. Lo besé y él me abrazó por detrás, dejando su miembro dentro mío para acostumbrarme a la sensación.

Después de unas horas, finalmente nos despertamos, habíamos dormido demasiado. Dios, estaba demasiado cansada.

- ¿Cómo estás?- se despertó Alex cuando me moví un poco

- Estoy perfectamente bien - sonreí para luego darle un beso- Creo que voy a levantarme para ver si podemos...¿Volver  a la fiesta?- reí

Alex sacó su miembro de mi, y al verlo me sorprendí ya que estaba cubierto de sangre, lo que provocó un pequeño susto de mi parte.

- Oh por Dios, qué pena- dije nerviosa tapándome con las sábanas

- Vamos, Jane, no pasa nada- sonrió Alex destapándome, levantó mi cara con una de sus manos y se acercó a besarme- Es normal- sonrió

Mi vergüenza fue mayor al intentar levantarme, y caer al piso desnuda ya que mis piernas no paraban de temblar, nadie me dijo que esto podría pasar. Alex se levantó rápidamente y cargó entre sus brazos.