Eres Casi El Hombre Perfecto|James Rodríguez|Editando|

8."Un paso que aún no puedo dar"

Estaba de visita en casa de Cris como de costumbre, esta vez me acompañaba mí princesa Salomé, a Cristiano le gusta que venga con ella ya que le hace compañía a Junior, su hijo y se llevan muy bien los dos. Conversabamos placidamente en la sala y observabamos que los niños no hicieran travesuras.

Como era de esperarse Gemma se hizo presente en nuestra platica, después de lo sucedido la noche anterior era imposible no hablar de ella, además que con lo chismoso que es Cristiano no dejaba de cuestionarme sobre todo lo que pasó ayer, quería que le contara todo a detalle.

-Enserio, aún no puedo creer lo que estas haciendo James-dijo Cristiano negando con su cabeza mientras reía.

-Creeme que ni yo, pero mis sentimientos me llevaron a hacer tal locura, puedes entender que ya no podía callar más esto-contesté levantando la mirada, viendolo a los ojos.

-Y como te sientes?-me preguntó sin yo poder entender el rumbo de su pregunta.

-A cerca de que?-respondí con otra pregunta haciendo esto más confuso.

-A lo sucedido anoche-al fin entendí a lo que se refería y respondí.

-Estoy contento, me siento feliz y te va a sonar estúpido y tal vez muy precipitado pero... Estoy enamorado-esa frase hizo que una sonrisa enorme se dibujara en mí rostro haciendo que tal se la contagiara a Cristiano.

-Sabes algo? Me da mucho gusto verte así.

-Así como, según tú?-pregunte riendo.

-Pues así, contento y sonriente. Me da gusto ver que vuelves a ser el James feliz y entusiasta de antes, ese imbécil que se reía de todo-me dijo y al decir lo último no dudé en soltar una carcajada.

-Tenías que salir con una estúpidez, pero tienes razón, he vuelto a ser el mismo de antes gracias a Gemma, ahora tengo dos motivos por los cuales sonreírle a la vida.

[...]

Hoy era uno de eso días en los que mí mente se encontraba totalmente en otro lugar, no pensaba en otra cosa que no fuera James. Aún no entraba en mí cabeza que entre él y yo hay algo que nos une, un sentimiento enorme que ambos compartimos por igual y ese se llama amor.

Aunque nuestra relación se lleve a cabo en estas circunstancias, eso no va a impedir que deje de quererlo ó que me aleje de él, ya teniendolo a mí lado no creo poder separarme del suyo, aunque sea ílogico que quiera aferrarme a algo que no es mío. Se que estoy jugando con fuego y que tarde o temprano saldré quemada y siendo sincera es algo que no me quita el sueño, viviré el momento porque esto fue lo que yo elegí y ya no puedo retractarme porque realmente lo quiero y lo que más deseo es estar con él.

Angie se encontraba conmigo, conversabamos en la cocina mientras tomabamos café y galletas matando un poco el tiempo de la fría tarde de Madrid.

-Y entonces a que hora paso por ti?-pregunto Angie dandole un sorbo a su taza de café.

-A las 8:00 esta bien-respondí.

-Ok-dijo y el tono de timbre de whatsapp comenzó a sonar en su celular-Pero que es esto?!-exclamó Angie sorprendida y yo brinqué asustada.

-Que sucede?-pregunté temerosa.

-Marc me envió un video; es James cantando en el bar!-dijo emocionada mostrandome su celular.

-Oh sí, yo estuve ahí-mencione muy tranquila.

-Y porque no me lo habias contado?-reclamó indignada.

-Se me olvidó, vez eso te pasa por no haber querido ir anoche al bar-le recordé.

-Rayos, de lo que me perdí... Pero bueno, dime, canta bien?