Su vida en Seúl [Changlix]

4. Primeras Veces

Al inicio de la sexta semana su plano vientre se veía abultado y Félix no quería levantarse de la cama, no importa si se levanta despacio, se marea al grado de ver muy borroso. El alfa estaba tan preocupado que no quería ir a la empresa por cuidarlo.

Se quedó junto al menor, lo ayudaba a ponerse de pie y cuidar de que no se cayera. Ya habían hecho cita al día siguiente para que abrieran el historial del omega y revisarán que todo estaba bien.

Se sentía terrible, su cabeza parecia querer explotar a pesar de haber tomado ya dos aspirinas, no quería tomar más por miedo de dañar a su pequeño cachorro.

Por lo menos a la hora de la comida su estómago no resintió y pudo ingerirlo todo sin problemas, incluso parecía haber acumulado el apetito pues sí Changbin no lo hubiera detenido seguirá comiendo. Después de comer se acostó sobre su alfa impidiendo que siguiera trabajando en su laptop.

-- Lix, tengo que trabajar -- razonó con el mientras masajeaba la espalda del menor.

-- Mgh~ Sigue -- se acomodó menor.

Con una sonrisa adornando su rostro continuo escuchando los suspiros de su pequeño.

Félix balanceaba sus piesitos mientras esperaban a que el doctor les diera el paso al consultorio, el omega no sólo le transmitía los nervios por el lazo a su esposo, también lo dejaba claro con su olor.

-- ¿Seo Félix? -- una beta lo llamo y los guió dentro.

El pelirrosa se sintió mejor al pensar que sería una beta quien lo atenderá, pero todo se fue por la borda cuando una alfa salió. Entonces escucho su linda voz y quedó totalmente confundido.

-- Hola -- saludó la alfa con una sonrisa --. Mi nombre es Amber Liu.

La mujer se río por la estupefacción de su paciente, ella estaba acostumbrada a esa clase de reacciones. Desbloqueo su computadora y abrió un archivo donde lo llenaría con los datos de Félix.

-- Voy a hacerte unas preguntas y necesito que respondas lo más exacto posible por favor -- Amber sonreía con dulzura --. ¿Cuándo fue tu primer celo?

Él chico se sonrojo hasta las orejas, no estaba acostumbrado a que le preguntaran cosas tan personales.

-- A los quince -- respondió con las mejillas infladas.

El resto de las preguntas iban bien hasta que pregunto algo que le pareció algo más privado que cualquier otra.

-- ¿Fue fertilidad durante el celo?

La manera profesional en la que se preguntaba en lugar de tranquilizarlo solo consigue ponerlo nervioso, no pudo hablar así que sólo negó con la cabeza. El alfa apoyo su mano en su músculo para calmarlo.

-- Se que es incómodo -- añadió con una sonrisa --. Pero ya van a ser menos entrometidas...

La alfa vio que cuando comenzó a dirigirse menos formal el otro parecía no estar tan nervioso. Liu pregunto sobre enfermedades o alergias a la pareja.