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Esquina donde se cruzan la calle 21 con la Washington
– Valentina Carvajal ¿Quieres casarte conmigo? – la morena abrió la cajita revelando un hermoso anillo.
Valentina quería gritar "SIIIII", quería saltar por los edificios, llegar a las nubes y alcanzar el cielo y gritar a viva voz "SI QUIERO", pero el problema era que la voz no le salía. Juliana, su Juliana, la mujer de su sueños, su bestia, la persona que le enseña a amar cada día como si fuera el último, estaba en una rodilla, con un hermoso y costoso anillo en la mano, proponiéndole matrimonio y lo único que Valentina podía hacer era absorber todo el amor de la mirada de la morena. Trató de contestar, pero simplemente no se escuchaba sonido alguno, de repente sintió como el cuerpo se le debilitaba y las piernas empezaban a fallarle.
Gracias a Dios unos brazos la sostuvieron. Juliana se había parado y la tenía abrazada por la cintura - Hey – le puso una mano en la frente – Te tengo cariño. Tranquila no te voy a soltar – Valentina era de tez clara pero claramente, la morena, pudo ver como caía aun más el color de su chica – Ven, nos vamos a arrodillar juntas ¿Si? – Juliana apoyó sus dos rodillas sobre la alfombra y sostuvo a su novia con ella. Cuando la fotógrafa se sintió a salvo dejó de hacer fuerza y no se opuso a que Rachel la sostuviera - ¿Te sientes muy mal amor? – Juliana besó su frente.
- Si – salió como un susurró pero finalmente lo dijo.
- ¡Dios! ¿ALGUIEN PUEDE LLAMAR UNA AMB...?
Valentina le tapó la boca con su mano - Que si me quiero casar contigo – la rubia se estaba recuperando
- ¿Qué dijiste? ¿Estás bien o estás delirando? – Juliana todavía seguía pensando en el tóxico asesino.
Valentina rió por la pregunta de su novia - ¡SI ME QUIERO CASA CONTIGO! – por fin la voz le salía como quería.
Juliana le agarró la cara y ambas miradas se encontraron – Prometo que te voy a hacer la mujer más feliz del mundo – le dijo
- Como es que ya lo soy entonces – le contestó Valentina - ¡Quiero mi anillo mujer! – jugueteó
Juliana volvió a abrir la cajita y sacó la joya para colocársela suavemente sobre el dedo de su novia – Te amo – agregó.
- Menos mal, porque yo a ti te amo aun más – y la morena cerró su propuesta con un beso. Aunque aún se podía escuchar los aplausos, silbidos y gritos de sus amigos y conocidos, ambas mujeres se besaban al ritmo del latido de sus dos corazones.
- Mami se quiere tragar a mamá como una boba constructora – fue el comentario de Kara que hizo separar a sus madres.
- Tengo que evitar que se siga juntando con Nikky – comentó la morena mientras ayudaba a su novia a levantarse.
- ¿Ya podemos felicitarlas? – Camila llevaba un buen rato aguantándose las ganas de saltar a abrazar a sus amigas.
Después de abrazar a sus amigos, Valentina llegó a la notebook que sostenía Derek - ¡Mamá! ¡Papá! ...¡ESTOY COMPROMETIDA! – gritó.
- Lo sabemos cariño – habló Leon – tu madre estuvo llorando desde que Juliana se comunicó con nosotros para pedirnos permiso – contó el hombre.
- ¿Les pidió permiso? – Valentina se dio vuelta para ver como las compañeras de equipo de Juliana la estaban tirando para arriba para luego agarrarla, tipo trampolín humano.
- A mi también me pidió permiso – comentó Kara
- Y a nosotras – Esta fue Camila – Cuando llegó a casa a las siete de la mañana, Lolo casi la mata, pero cuando nos dijo para que era se largó a llorar – agregó.
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Cuando, donde y como diga el amor (Juliantina) CORRIGIENDO
FanfictionJuliana Valdés es una aclamada jugadora de básquet en Londres hasta que es elegida para jugar en la WNBA, con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en New York sin saber que un encontronazo con una Rubia, mandona, idiota le va a cambiar la...