Entrelazados [Constantine y Tú]

Capitulo VIII

—¿Sigues oyendo voces, _____?

La pregunta saco a _____ de un túnel largo y oscuro, y la arrojó sobre Algo sólido. Talvez sobre una pared de ladrillos. Su mente no fué tan rápida a la hora de alcanzar el muro, como su cuerpo, así que su despertar fué gradual. ¿Dónde estaba?.

Pestañeo y se vió en una butaca de cuero. Estaba rodeada de estanterías llenas de libros de todo típo. A su izquierda había otra butaca de cuero, y en ella, un hombre de ojos azules, con barba y con gafas.

—¿Qué sucede?— preguntó _____ inintelegiblemente ¿Acaso el golpe me había afectado?. No recordaba haber regresado a la ciudad.

— Estamos en mí consulta, empezando la sesión— dijo el hombre con una sonrisa indulgente— ¿Ya se te ha olvidado?

Aquél hombre, _______ sentía haber estados ahí antes pero...hace seis años.

Se miró y notó que era una versión más joven de si misma. ¿Acaso había viajado en el tiempo? ¿O sólo era un mal sueño?

—¿Consulta? ¿sesión?

_____ respiró profundamente y exhaló con lentitud mientras soltaba aire. Apretó los dientes. Era evidente que no estaba en su tiempo.

Llevaba una blusa gris lisa y sus brazos delgados y llenos de pinchazos asomaban por las mangas. Tenía un dolor agudo y persistente en el costado. Y sus jeans estaban rotos a la altura de las rodillas.

—______, ¿Te ocurre algo?

—No, no— dijo. Se palpo el costado e hizo un gesto de dolor ¿Acaso tenía puntos?—. Estoy bien.

— Todavía te estás curando— le dijo el hombre suavemente—, y si quieres seguí curandote, debes dejar la herida Tranquila.

Ella posó la mano en el regazo.

«¿Dónde estamos?» habló Mikel «Me siento mareado, casi como si me hubieran metido en una lavadora, con ciclo extra»

«Estamos...en el pasado» Explicó el vidente «Habia visto esto pero no pensé que fuera real»

Estaba seis años atrás. El año de su vida en que otra de los pacientes de la clínica mental le había picado con una horca del jardín. Sintió miedo.

«Es el médico que mejor nos ha tratado ¿Te acuerdas?» Mikel se acercó a observalo aunque el médico no podía verlo.

— El médico...
—¿Si, _____?

Se ruborizó al darse cuenta de que la había sorprendido hablando sola. El médico.

—Doctor...— no podía recordar el nombre del médico. Era joven, aunque tuviera barba, alto y delgado.

— Gray— dijo el hombre pacientemente—. El doctor Gray.

_____. Se puso tensa. Permaneció dónde estaba, intentando asimilar lo que estaba sucediendo.

«Te dije que lo conocíamos» dijo Mikel.

— Se quién es— dijo, _____

El doctor Gray, sonrió.

— Eso espero, _____. Y ahora, vamos a empezar la sesión, ¿De acuerdo?— se apoyo en el brazo de la butaca y la miró con expectacion.

— Yo...si— dijo, aunque quisiera Gritar un no.

Se le pasaron Miles de preguntás por la cabeza, pero no podía formularlas. Tenía que parecer una niña de esa edad y responder como lo había hecho la primera vez que había sucedido aquella reunión.