Adictos a tu locura. © ✔️#1 [Bilogía Amor De Tres.]. +18

||C#02||

Golpeas en mi cabeza como si fueras un demonio deseando salir-Umbra.

DARRELL.

+18.

Me duele la cabeza, desde esta media mañana que siento como si fuera a perder mi autocontrol e ir a buscar a ese chico para seguir aunque sea discutiendo con él, ya sé, es patético, pero que puedo hacer cuando me siento perdido por su forma rebelde de atraer la atención, de todos y por supuesto que mía también.

Desde hace días que vengo observandolo, en un principio fue porque lo descubrí espiando a mi mejor amigo, pero luego me percate de sus ojos sobre mí, fue muy divertido verlo espiarme en cuanto pensaba que no me daba cuanta, desde atrás de un libro, un libro que tenía al revés.

-¿Qué sucede?-inquiere mi mejor amigo tirándose a mi lado en el sofá de mi casa.

Le doy una mirada rápida, es muy entendible del porque siempre tiene mucha atención encima, claro que lo entiendo.

Es sexy y guapo, sin olvidar que tiene una muy buena personalidad.

Cómo casi la mayoría del tiempo nos encontramos solos frente a la televisión, es lo que normalmente hacemos los viernes; ver televisión o jugar a la play hasta que su hermana lo habla o su madre lo incordiar conque vuelva a su casa.

-Hay un chico que me parece interesante.

-Oh, hablando de chicos e interesantes, vi cuando sacaste a esa fierecilla hermosa del comedor, mierda, nene ¿Cómo es qué no lo vi antes?

-No pongas tus ojos sobre él
-digo, sonriendo de costado-. Ese rebelde es mío.

Rhigo entornar los ojos y pone esa expresión que tanto conozco.

-Ya lo veremos, sabes que cuando me gusta alguien no paro hasta conseguirlo o conseguirla.

-Muy bien, ¿jugamos?

-Claro, sabes que amo jugar contigo. -Nos damos las manos y nos sonreímos-. Suerte, hermano, la vas a necesitar.

-Lo mismo digo.

Si fuera otro estaría furioso por su forma de decir que se ha estado follando a otras personas, pero no me considero alguien celoso ni posesivo, así que me mantengo en la seguridad de que no importa en que cama juegue él o yo, siempre volveremos a caer el uno por el otro.

Es así desde que nos conocimos hace casi dos años.

***

Son las cinco de la mañana, y ya tengo todo preparado para salir a correr, y con todo me refiero a mi móvil y auriculares.

-¡Estás loco!-Me grita el chico rubio llegando hasta mí-. No puedo creer que me arrastres contigo.

-Yo no te arrastro a nada, Rhigo. -digo con una sonrisa él suspira-. Aún no comprendo como es que eres deportista, lo juro.

-¡Porque mi padre me obliga!-exclama, riéndose-. Pero es hasta que terminemos este año, luego me largo y que se joda, no puede cumplir sus sueños a través de mí.

-Bueno, eso es cierto. -concuerdo con él-. Ahora vamos.

-Espera. -dice y se aproxima para arrebatarme los auriculares-. Si usas esto no me prestaran atención y odio sentirme ignorado, mucho más por ti.