No importa que tan abajo caigan tus esperanzas, yo sostendre tus manos en todo momento-Umbra.
GRAHAM.
Observo al chico que conozco desde que tengo memoria, al muchacho que solía correr sin camiseta y saltar en charcos de lodo a lo pepa pig, dormido con lágrimas secas sobre sus mejillas, siento que muero de dolor al verlo así. Si pudiera cambiaría de lugar con él, si pudiera sentiría su dolor y dejaría que su cuerpo y alma estén tranquilos, sin miedos ni angustias.
Haría todo por mi amado mejor amigo.
Aún tengo el maldito nudo en mi garganta, y lo peor de todo es que siento y sé que no se va a marchar, mucho menos ahora que su madre me ha confesado que Paul no ha estado yendo a sus tratamientos y que el dinero que le dí se lo envió a su abuelo hospitalizado, tras recibir la noticia de que este podría morir. Hizo todo sin que nadie lo supiera.
Lo peor de todo es que ni siquiera puedo enojarme por su acción. Este mocoso tiene el corazón enfermo, pero aún así late con benevolencia.
-No quiero perderte, Paul, eres la única persona que me comprende, que siento que podría latir en mi corazón por toda la maldita eternidad... Porqué no pudiste ser un poco egoísta, solo por una vez, hermano, una vez.
Seco mis lágrimas, noto como él se gira dándome la espalda, esta despierto y no desea que lo vea llorar.
-N-No puedes dejarme ¿okay? Tú jamás puedes dejarme... Aún... Aún tenemos que ir a la universidad y tienes que conocer a una buena chica o chico y enamorarte, disfrutar y vivir... Tienes que vivir.
Porque no puedo dejarlo ir, no, no estoy dispuesto a hacer tal cosa. Estaría incompleto sin él. Sin Paul no sería Graham.
-Solo... Abrázame, mejor amigo.
Su voz débil y ronca se escucha por la habitación. No pierdo el tiempo y hago lo que me pide, me recuesto a su lado, paso mi brazo por sobre su cintura y me apego a su espalda, y lo odio, odio escuchar como el latido de su corazón enfermo late cerca de mi oído.
-L-Lo lamento mucho, Ham, soy un mal mejor amigo, pero yo... Lo siento mucho.
-Shh, no me gusta que hables así, no eres un mal mejor amigo, eres tan bueno que no estoy dispuesto a dejarte ir, no si puedo evitarlo.
No me importa si tengo que bajar la cabeza, tengo que conseguir dinero de forma rápida, seguro aún estamos a tiempo de iniciar su tratamiento, de salvarlo.
Sí, todo estará bien.
-Ham, estás abrazándome muy fuerte, si no muero por mi corazón será por la falta de oxígeno. -Le doy un pellizco ante esa broma que no me sienta nada bien-. Ouch, eso ha dolido, tonto.
-Tú ere el tonto por hablar de esa manera, ahora duerme, voy a estar contigo.
-G-Gracias.
***
Salgo del instituto apresurado, aún no tengo idea de como es que pude sobrevivir ante la mirada de todos en el salón y pasillos, ya saben sobre la enfermedad de Paul y que podría morir. El director fue en persona a informarle a nuestro profesor y como no, las estúpidas chismosas de mi curso se encargaron de expandir eso por todo el instituto.
-¡Graham! -Cierro los ojos con fuerza y me detengo frente a mí vieja motocicleta-. Habla con nosotros un momento.
Giro y veo a los dos chicos que me gusta y de los que estoy ridículamente enamorado, mirarme con algo parecido a la preocupación, seguro escucharon lo de Paul.
-Siento lo de tú ami...
-Oh, no, no y malditamente no te atrevas a decirlo, él va ha estar bien, conseguiré el dinero y podrá hacer su tratamiento. Todo irá bien, se recuperará y podremos reírnos de este maldito mal momento una vez él esté bien. -digo sintiendo mis ojos húmedos-. Va a estar bien, ¿okay?
Suelto una cercajada histérica y seco mis ojos con las magas de mi chaqueta, luego solo siento como soy atrapo entre unos brazos o mejor dicho entre dos chicos que a pesar de no tener porque darme consuelo, lo hacen.
-Llora, Graham, llora todo lo que tengas que llorar. Esta bien, estás pasando por algo horrible, pero no estarás solo, vamos a estar contigo, vamos a sostenerte, pequeño. -Siento un beso sobre mi cabeza, cortesía de Darrell-. Cuentas con nosotros, al igual que tu amigo, no te dejaremos solo en esto.
-Estaremos para ti, puedes sostenerte de nosotros, Graham. Puedes contar con tus chicos.-La voz suave de Rhigo me desarma y no puedo evitar sollozar entre sus brazos.
Me desarmo entre los dos chicos que me sostienen y me dan su apoyo mientras lloro sin miedo, solo con deseos de dejar ir todo el dolor y seguir adelante, apoyando a mi mejor amigo, en todo.
Umbrablack.
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Adictos a tu locura. © ✔️#1 [Bilogía Amor De Tres.]. +18
Ficção AdolescenteY si los poetas pueden tener mis ojos sobre sus líneas de amor y descontrol, ustedes pueden tenerme suspirando corazones por ser simplemente seres que amo sin medida. Umbrablack.