Cada día del mes, un One shot o un Drable.
Sé me ocurrió hacer este reto, a mi manera, No con una sola pareja, si no con varias, con las otps y las Ships favoritas , y sí con mi propia lista , por que, pues, la verdad no entendí ni la mitad de las p...
Aquella noche Tanjiro estaba a solas con Nezuko, observando un hermoso árbol de Glicinias, esa flor por lo general mantenía a raya a los demonios y lo odiaban, pero para Nezuko no surtía efecto alguno, como en todo, ella era especial y le gustaban mucho las flores. Incluso se había hecho una guirnalda con las mismas y la coloco en su cabello. Se veía adorable, las flores no le hicieron daño y podrían ser una protección contra otros demonios.
─Nezuko chan, pronto volverás a ser humana, te lo prometo. Siento que cada vez nos acercamos más.
La chica no hablaba, pero sus ojos, eran más que expresivos. Ella tomo la mano de su hermano y la apretó en respuesta. Él le sonrió.
Minutos después ambos entraron a la casa, la pequeña oni, se fue directo al futón mientras él comenzó a preparar algo para la cena.
Esa noche estaba solo con Nezuko, pues Zenitsu y Inosuke, tenían otra misión en la cual, él no estaba involucrado, pues tenía una solo para él y al día siguiente debía partir con su hermana a la zona, donde le darían la debida información. Así que ese era su último día de descanso.
Sabía que iba enfrentar a una luna creciente, pero no sentía temor alguno, se había habituado a su vida de Demon Slayer, y pensaba que cada vez se acercaba más a su objetivo.
Pronto tuvo listo el platillo, la cena estaba terminada. No tardó mucho en oír golpes en la puerta y corrió a abrir, sabía quién era, lo había sabido desde unos minutos antes de que llegara, por su olor.
─! Tomioka san!
─Kamado Tanjiro, he venido de parte de la cede para darte esto.
Dijo el hombre entregándole una daga brillante de Nichirinto.
─Pero ya tengo una espada, no entiendo.
─Enfrentaras una luna creciente, es peligroso, la última vez que enfrentaste a una menguante, tu espada se rompió, sabemos que has tenido otros combates y que no ha vuelto a pasar, pero el jefe estaba un poco preocupado y...Bueno, yo estaba algo preocupado.
Tanjiro sonrió, a simple vista, Giyu Tomioka, era serio y frio, pero él sabía que eso era pura fachada, era un buen hombre y muy hermoso, le gustaba mucho.
─Gracias, muchas gracias, por esto, por lo de Nezuko, por todo, aun no entiendo por qué te has arriesgado tanto por nosotros, por ella.
─Porque ella es importante para ti.
─Pero, ¿porque te importaría lo que me importa a mí?
─Porque tú eres importante para mí.
El pilar se sonrojo al momento, desvió la mirada y continuo.
─Tienes potencial, podrías convertirte en mi tsuguko y más tarde en un pilar, algún día seguramente lo lograras, eres muy fuerte y decidido, además tú, bueno, tienes una gran motivación, eso es bueno.
─Tomioka san, tú también me gustas.
Tanjiro disfruto de ver el gesto de asombro en el pilar.
─Entonces ¿serás mi Tsuguko?
─Si eso quieres. Tomioka san, sabes que puedo sentir tu olor verdad. No sólo tu aroma natural, puedo oler las emociones en ti.
─No me olfatees. Será mejor que me marche.
─Hueles a excitación. ¿Es por mí?
El pilar se sonrojo de nuevo, no respondió y se encamino a la puerta, pero Tanjiro, le alcanzo rápidamente impidiendo su salida. Sin que el otro lo esperara el menor asalto su boca en un beso profundo. Si bien el asombro había sido mucho, respondió la caricia aferrando al chico contra su cuerpo y besando más profundo aún. Se permitió explorar su lengua y mordisquear sus labios. Al separarse ambos notaron que habían perdido la respiración de concentración total. El primero en hablar fue Tanjiro.
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─Lo siento por eso, tienes dos opciones ahora Tomioka san, rechazarme y cuando nos volvamos a ver, ambos fingiremos que esto jamás paso o...
─ ¿Cuál es la otra opción?
─Admitir que nos gustamos y continuar con esto. Después de todo la vida es corta y más la de los Damon Slayers.
El pilar no respondió, no con palabras se acercó más al menor y volvió a unir sus labios en un beso.
─Tomioka san...
─Dime Giyu
─Giyu...Me gustas, te quiero.
─Somos dos chicos, ¿estás seguro de esto?
─Giyu san, yo vivía en una montaña.
El oji azul le miro confuso. Tanjiro, estaba sonrojado y su mirada lucia adorable.
─Pues que sé el secreto de la montaña.
Giyu siguió sin entender a que se refería, pero pronto sus labios volvieron a unirse con los del menor, sus manos recorrieron su cuerpo y las ropas fueron cayendo, ninguno hablo por largo rato se dedicaron a besarse y recorrerse, a amarse en silencio. Después fue el pilar que interrumpió las caricias
─Nezuko puede oírnos.
─Este durmiendo, no se despertará y realmente no sé si ella es capaz de oírme cuando esta dormida.
Explico el chico, ambos miraron al futón donde la chica dormía, ajena a todo. También miraron al otro futón vacío, sin decir nada se encaminaron a él, ambos vestían ya solo la ropa interior.
─Nunca he hecho esto.
─Yo tampoco.
No hubo más palabras, solo las caricias se reanudaron y la última prenda en ambos fue retirada. Se miraron el uno al otro apreciativamente y a la vez comparando sus tamaños. Se acercaron más y se tocaron, cada uno tocando la anatomía del otro. Dándose placer de esa forma. Después el mayor tomo control de la situación uniendo ambos miembros pegándolos y frotándolos juntos con las manos y entre ellos creando una deliciosa fricción, los gemidos del menor le deleitaban, al igual que las placenteras sensaciones que ese frotamiento le estaba dando. Siguió con ello hasta que ambos se corrieron juntos.
─Eso fue sensacional, pero me da un poco de miedo lo que sigue, eres muy grande.
─Por hoy hasta aquí llegaremos.
─ ¿Por qué?
─Aun eres menor de edad, pero no un niño, vamos a dejarlo para la próxima que nos veamos, habrás crecido un poco y además, nos servirá como motivación, ninguno de los dos morirá en las próximas luchas, debemos mantenernos vivos, para poder hacerlo.
Tanjiro sonrió, él ya tenía una motivación muy fuerte, su querida hermanita Nezuko, pero sería mejor guerrero teniendo ambas motivaciones. Accedió y beso al pilar, esta vez fue él quien se dedicó a rozar los miembros de ambos para poder seguir disfrutando. Quizá no fueran más allá de rozamientos, pero la noche era joven.
─No te ayude con Nezuko por esto, en ese entonces yo, bueno aun no me gustabas de esta forma.
─Lo sé.
La cena había quedado olvidada, pasaría a ser desayuno, la pareja se dedicó a besarse, frotarse y prometerse que la próxima vez lo harían todo.
