Capitulo 2

1.2K 88 10
                                    


-¿Ves ese abrigo de ahí?- Ascendí con la cabeza- Muevelo hacía ese perchero de ahí, cómo te enseñé.

Puse toda mi concentración en el perchero, afuera seguía ardiendo y adentro de mi habitación aún más, con el mismo demonio aquí adentro, era muy difícil que hiciese frío.

-Concentrate

Miré el abrigo y lo guié con mi mano, y se levantó de la nada.

-Muy bien- Dijo con esa voz aterciopelada y elegante

Lo moví y cayó al suelo, mierda.

-Intentalo otra vez

Volví a coger el abrigo con mi mente, cómo él me había enseñado hace cinco minutos. Y zas, lo coloqué en el perchero.

-Excelente, ¿Tienes idea de lo que puedes hacer con esto que te he enseñado?

Negué con la cabeza.

-Descubrelo por ti solo, pero... Necesito almas, y las quiero ya, así que... Puedes hacer lo que sea.

-¿A quién tendré que matar?

-Cuando la veas, lo sabrás y una cosa más...

Se levantó y con paso lento se acercó a mi.

-Te estoy vigilando todo el tiempo, estoy aquí todo el tiempo, no pienses nunca que estás solo por que..- Susurró- estoy aquí, así que a la primera estupidez que hagas... Se te castigará, duramente. Así que más te vale, estar callado sin levantar sospechas.

-¿Pero cómo voy a matar?

-Que parezca un accidente

Lo miré a los ojos, eran ojos rojos, y se notaba la ira, mucha ira... Era demasiado hermoso para ser el mismo diablo.

-Muchas gracias- Sonrió

¿Me ha leído la mente? Pero... ¿Cómo?

-Sí... Es fácil- Es cómo si contestara a todo lo que digo en mi cabeza.

Se hizo hacia atrás y sonrió de esa manera tan malevola, con su dedo apuntó a la ventana, me giré y la ventana se cerró sola, pero cuando volví para verlo, ya no estaba.

Y de pronto... Caí, en profundo sueño.

Desperté, respiraba profundamente, menos mal... Una pesadilla, sonreí, soy tonto... Pero fue... Tan real. Puse una mano en mi frente, llegué a asustarme y mucho. Sonreí otra vez, odio las pesadillas.

Suspiré otra vez, y miré el reloj, tenía dos horas, me giré y creo que me arrepentí de hacerlo.

-¡Ah!- Grité y sus cálidas... Pero muy cálidas manos cubrieron mi boca.
-¿Creías de verdad que sólo sería un sueño?- Sonrió

No podía ser... Matar... Matar... Hm, Matar.

-¿Qué haces aquí?

-Me aseguro de que hagas lo que te pido

-Pero... ¿A quién?

-Como dije, cuando la veas, lo descubrirás

Hm, una 'a' ... Entonces es una mujer.

-Muy listo...

-¿Me has leído la mente?

-Algún día te enseñaré, pero por ahora, conformate con mover cosas

Se levantó... Tan elegante cómo siempre.

-Por cierto, un detalle... Tu familia es católica

-De cristianos viejos vengo...

D E M O N I ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora