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Despertó como siempre a las 7a.m. gracias a la alarma que sonaba sin falta todas las mañanas. Debía entrenar y encargarse de las misiones que le fueron asignadas para cumplir al pie de la letra, algunas podían fallar? Claro pero siempre habría una segunda vez y Demetria no desaprovechaba ninguna.
Al salir de su habitación con ropa deportiva de color negra como siempre le gustaba, se dirigió hacia la cocina por una botella de agua que la llevaría hacia el gimnasio.

— Buenos días viernes, cómo estará el clima el día de hoy? — Pregunto Demetria dirigiéndose al sistema que Tony había creado.

— Buenos días señorita Demetria, no se esperan lluvias hasta en la noche aún que el cielo se encuentra mayormente nublado — Respondió Viernes —. Y el gimnasio se encuentra disponible para sus entrenamientos.

— Gracias — Sonrió para luego caminar hacia el gimnasio.

Era lo más normal de todo el mundo ver los pasillos vacíos sin ningún alma que caminase por esos lados, la mayoría se encontraba descansando para luego vivir todo el día y por esas razones a Demetria le gustaba despertar temprano y entrenar a su manera. Aún que claro también sabía que uno de sus compañeros pensaba lo mismo que ella pero él prefería salir a las calles para correr y tomar aire fresco.

Dejo la botella a un lado y comenzó a estirar sus piernas para entrar en calor y así estar preparada para lo más fuerte.
Comenzó hacer sentadillas, luego abdominales para luego tomar uno de los palos que se encontraban allí, lo movió con mucha agilidad y rapidez mientras dejaba golpes al muñeco de práctica.
Sin perder el ritmo ingreso a la sala especializada solo para ella donde las paredes eran transparentes pero resistentes ante el fuego o cualquier otro poder que Demetria poseía.

— Viernes...cuando quieras — Dió la orden.

Se mantuvo en una posición con mucha concentración esperando a que el sistema de Tony diese lo mejor para atacarla.
Primero fueron armas blancas muy filosas que solo rozaron el cuerpo de Demetria ya que la muchacha con toda su agilidad y capacidad las esquivaba o detenía con aquel palo. Luego fueron balas de una ametralladora tomando por sorpresa a Demetria pero reaccionó inmediatamente y las detuvo con su telekinesis y luego las hizo polvo.

— Buena jugada — Reconoció la mujer con una sonrisa de costado y algo agitada.

Iba a darse la vuelta para salir de allí pero ante su reflejo la detuvo y elevó su mano dejando salir de su fuego para contraatacar el fuego de Viernes.

— Excelente reacción señorita Demetria — Dijo Viernes abriendo las puertas causando que Demetria sonriera con orgullo por si misma. 

Tomo su botella de agua y bebió un poco pero dejo de hacerlo cuando sintió como la observaban detenidamente, al voltear se encontró con Bjorn y su familia quienes veían con curiosidad el gimnasio y a ella.

— No hay duda que contigo a nuestro lado las batallas serán más fáciles de ganar — Dijo Lagertha.

— Que tanto vieron? — Pregunto Demetria con una sonrisa algo tímida.

— Todo para saber que lograremos ganar está vez — Respondió Bjorn acercándose a ella y besando su mejilla.

— Así es, tendremos lo nuestro pero podrías enseñarnos de lo tuyo — Intervino Hvitserk a lo que Ubbe asintió apoyando la idea de su hermano con cierto entusiasmo.

En ese momento las puertas fueron abiertas por Clint quien traía su arco y sus flechas para entrenar. A Demetria se le ocurrió una idea, pedir a Barton que la ayudara con los vikingos para enseñarles algo de la actualidad.

— Pues comencemos viendo lo que tienen — Dijo Demetria.

Ellos aceptaron aquella propuesta, hicieron equipo para enfrentarse uno a uno. Al demostrar lo que eran capaces de hacer, Demetria y Clint les dieron algunos consejos ya sea en su actitud o en sus movimientos, también les sugirieron otros entrenamiento como golpear aquellos sacos de boxeo o algún otro entrenamiento que los vengadores hacían y que podrían ser útiles para ellos.

𝐑𝐄𝐓𝐔𝐑𝐍𝐒 |𝐁𝐣𝐨𝐫𝐧 𝐈𝐫𝐨𝐧𝐬𝐢𝐝𝐞|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora