El brillo en tus ojos ··· Emiliaco

Capitulo 4: Tan obvio

Joaquín se encontraba sentado en una silla del casting mientras era peinado por la producción. Su mano derecha se encontraba jugando con el dije en su cuello, mientras su mirada estaba fija en la nada y su sonrisa no daba señales de desaparecer. La maquilladora se acercó a él riendo levemente al escucharlo soltar un suspiro.

- ¿Quién es? - Joaquín salió de su ensoñamiento al escuchar la pregunta de su maquillista mientras ella simplemente habría sus productos para comenzar a trabajar.

- ¿ah? - Pregunto aun sonriente.

- ¿Quién es la afortunada persona que enamoro a mi adorado Joaquín? - La maquilladora por fin lo miro a los ojos, con una sonrisa tierna.

-Ay Katie, no sé de qué hablas. - Pero aun así su sonrisa permanente y sus ojos soñadores lo delataban.

-Hace tres días, parecías pensativo, como en otro planeta, no lucias tan feliz como hoy. - Se acercó y comenzó a dejar puntos de corrector. - Con ese brillo en tus ojos... No tienes que decírmelo, estás enamorado. - Se rió comenzando a difuminar. - Dile a esa persona que el mundo le agradece tu sonrisa. -Joaquín era muy amado por el equipo, el representaba una luz cálida en sus vidas.

Joaquín se sonrojo, pero no tanto como Emilio que justo venia llegando y alcanzo a oír un fragmento su conversación, se sintió culpable por un momento, he incluso estuvo a punto de irse, pero sabía que no podía así que se recompuso rápidamente y se acercó a ellos con una sonrisa luminosa.

-Hola. - Comenzó a saludar a todos en la sala, uno por uno y por último se acercó a Joaquín. El corazón de Joaquín salto en su pecho y su sonrisa se amplió nuevamente.

-Hola- Dijo Joaquín mirándolo fijamente, sintiendo como el mundo se iluminaba.

-Hola- Respondió Emilio, sonriendo igualmente. Ambos se quedaron quietos mirándose y sonriendo. Katie carraspeo.

-Emilio, puedes tomar asiento, sigo contigo apenas termine. - Ambos salieron de su estado aturdido y Emilio asintió riendo y tomando asiento.

-Claro, como no lo supuse, es obvio. - Susurro Katie muy cerca de la cara de Joaquín, aun concentrada en su trabajo.

- ¿Eh? - Pregunto Joaquín asustado.

-Nada, nada- Se rió ella en su cara mientras seguía aplicando el polvo. –Que ahorita sigo con el pincel. - Y fingiendo que ninguno de los dos supo lo que supo en ese momento, ella tomo su brocha y Joaquín sonrió, mirándola con afecto, sabía que podía confiar en ella.

Mientras tanto Emilio sudaba frió, después de hablar con Roy ya no sabía cómo actuar con Joaquín, su amigo le había aconsejado no mentirle a Joaquín y decirle lo más pronto posible lo que pasaba, aunque al mismo tiempo lo había cuestionado sobre su relación.

Flashback

- ¿¡Qué!? - Grito su amigo llevando sus manos a su cabeza- ¿¡Emilio, pero tú estás loco!?- Pregunto agarrándolo de los hombros y sacudiéndolo. –¿Sabes cómo se va a colocar Joaquín cuando sepa la verdad? -

-Sí, ¡lo sé!- Emilio le grito de vuelta, agacho su cabeza mostrando un poco su vulnerabilidad. - pero entiende, yo no quería perderlo. -

- ¡Lo vas a perder! - Le grito de nuevo. - Que no ves que él está re enamorado de ti. - Al parecer Joaquín era más obvio de lo que creía, de hecho, muchos sospechaban lo que el ahora sabia y eso lo hizo sentir más culpable, cuando permitió que Joaquín se acercara tanto a él de esa forma, cuantas veces no lo habría ilusionado o lastimado accidentalmente. Aun peor, como lo hacía en ese momento.

- Yo- Emilio tomo aire y dejo caer sus hombros- Yo lo se...- Dijo con voz baja y triste.

-Entonces no lo ilusiones- Él no lo quería ilusionar, era cierto, pero la imagen de un Joaquín feliz saltando a abrazarlo, sonriendo mientras miraba por la ventana  del auto y jugaba con el dije en su cuello decrecía la culpa, y un calor brotaba en su pecho.

-No es por ilusionarlo, simplemente... no te imaginas lo feliz que estaba, no me molestaría hacer cualquier cosa para que se mantenga así. – Lo último fue un nuevo descubrimiento para Emilio.

-Emilio. - Su amigo lo miro fijo a los ojos. - ¿Estás seguro que no sientes nada por él?

Fin flashback

Emilio no entendía por que la mayoría de personas dudaban de eso, hasta sus fans dudaban, su mama también le insinuó en algún momento que Joaquín seria el yerno perfecto, algo frente a que lo hacía irradiar felicidad.

Su sexualidad era clara.

Él se había prometido decirle la verdad lo más pronto posible, pero al verlo cualquier pensamiento frente a eso fue empujado al abismo de las cosas perdidas y cayo justo al lado de su cordura.

Ahora su pensamiento estaba centrado en adonde llevaría a Joaquín en la tarde al salir. Sus ojos se enfocaron en Joaquín, se alegró de ver lo feliz que estaba susurrando secretos con Katie mientras lo arreglaba, luciendo tan radiante, soltando carcajadas.

Katie se acercó con disimulo al oído de Joaquín- El mundo no es el único que agradece tu sonrisa- Joaquín paro de reír confundido al verla separarse, ella sonrió y dejo caer su cabeza a su lado izquierdo indicándole de manera discreta que volteara a ver.

Giro rápido su cabeza y capto a Emilio recostado sobre la palma de su mano mirándolo, sorprendido abrió los ojos y otra vez el color estaba en su rostro. Emilio se sonrojo al ser captado espiando, y más profundamente se cuestionó si esta situación era algo normal. Sonrió levemente y Joaquín le regreso la sonrisa aun colorado. Emilio miro a otro lado sintiéndose muy avergonzado y confundido.

-No puedo creer que no me haya dado cuenta antes. Es que son tan obvios. - Se rió Katie

-¡Katie! - La regaño Joaquín con una risa nerviosa.

-Es que en serio, tú no puedes ni pensar en voz alta querer algo porque él tiene que correr a conseguírtelo. - Al ver la cara de duda en Joaquín prosiguió. - Sé que es un chico discreto, pero el amor es algo que no se puede ocultar. - A Joaquín le dolió lo último, si bien solo había pasado un día desde que se habían confesado, Joaquín no sentía mucho las vibras románticas de parte de Emilio, al despedirse de él el día anterior había actuado con normalidad, se había despedido como siempre con un abrazo, lo cual lo confundió.

No esperaba un beso o algo tan rápidamente, pero tampoco sentía que todo debiera seguir igual, como si nada. Decidido Joaquín pensó en que en la tarde aprovecharía y trataría de hacerlo parecer una cita, intentaría avanzar con Emilio.

-El que no arriesga no gana. - Dijo con determinación en su mirada y Katie quien había terminado se asustó con la profundidad en sus ojos, pero internamente entendió.