Y por eso me enamoré

Capítulo treinta.

Todo paso tan rápido para ti.

Estaba sintiéndome una basura. Porque es lo que era, James. Y lo soy.

Rick estaba subiendo las cosas al auto mientras Tama y Lily hablaban sobre Carlos y lo que habían planeado para las vacaciones. Yo te veía por la ventana guardando las cosas en tu auto, tan enojado y triste.

-¿Ese es James? - Lily preguntó y yo asentí. Ella parecía una adolescente. Era muy bella y estaba bien cuidada. Sabía de dónde había sacado Tama su belleza. - Es muy guapo.

- Si, y aquí la señorita esta dejando que se vaya - reclamó Tama. Yo levanté la cabeza enojada - ¿Qué?

- Tu fuiste una de las que insistió en que el no valía la pena...

- Dios, ____ - me interrumpió - Todo fue una farsa.

Yo fruncí el ceño, confundida.

- Esa tarde cuando te dije que él estaba engañandote estaba mintiendo - yo aún no entendía nada - Todos los que te conocen sabían que estabas cometiendo un error. Y él fue el único que quiso remediarlo.

-____ - Lily me habló - Nosotros estaremos orgullosos de ti hagas lo que hagas. Solo queremos que seas feliz.

- Yo lo vi, estaba con alguien más.

- Era la prima de Carlos - dijo Tama y yo hice cara de obviedad- Ella es actriz de bajo presupuesto

-Entonces el no... -Tama negó-

Y entonces quise matarme. Si te hubiera creído, si tan solo hubiese seguido a mi corazón...

...

El tráfico estaba atorado. Nadie sabía lo que pasaba más adelante y yo solo estaba deseando llegar hasta a ti y decirte que lo sentía.

- Quedense aquí -Rick, como la mayoría de otras personas, bajó del auto- Iré a ver que sucedió.

Movía mis pies con nerviosismo, no tenía tiempo.

-Iré a buscar a James - dije desabrochando mi cinturón- Él debe estar aquí entre los autos seguramente.

- Esta bien. -Abrí la puerta y bajé - Regresa pronto.

Me adentré entre los autos buscándote. No recordaba que clase de auto tenías, pero podía recordar que era gris y descapotable. Tal vez ya habías avanzado, antes del atasco. Quise creer eso, James. Pero las personas hablaban sobre un choque. Y al no encontrarte empecé a preocuparme. Empecé a caminar más rápido.

Llegué hasta donde toda la gente estaba amontonada. Viendo un auto salido de la carretera, casi en la banquina. Y tu auto a unos metros del otro...

Mi mundo se apagó al verte en un punto en el que las personas se movieron. En el suelo, con la mirada vacía. Fue la sensación más horrible en el mundo. La adrenalina corrió por mis venas y empecé a luchar contra las personas hasta llegar adelante, donde dos policías me detuvieron. No por mucho tiempo, forceje con ellos hasta que no pudieron sostenerme más. James no podía permitir que te vayas.

Lo siento James... lo siento. Todo fue mi culpa, las lágrimas llenaron mis ojos y los gritos retumbaban en mis oídos. Creo que realmente no estaba gritando. Rick apareció y me sujeto y me abrazó...

***

- Es una niña, no pueden.

- Señora Hendricks, ella deberá saberlo tarde o temprano -Tama estaba escondida y se supone que debía estar buscandola, pero no- Sus padres han fallecido.

- ¿Cómo sucedió? - Lily tenía la voz rota-

- Un conductor se quedo dormido al volante. Los paramedicos hicieron lo que pudieron.

Los gritos eran desgarradores en las noches. Los extrañaba, James, solo era una niña.

***

Intentaba hacerme la dormida mientras Travis estaba vistiéndose. Pensaba que si no lo veía, el que se fuera no era tan doloroso. Pero eso no era así. Y en las noches no dejaba de llorar y nadie entendía porque.

Supuestamente con años de terapia había superado la muerte de mis padres.

Pensé que amaba a Travis.

Pero me enseñaste lo que el amor era realmente.