Esa noche fue la más especial en mi vida.
Recuerdo que estaba emocionada porque hace mucho no iba a una feria. Y tu no dejabas de sonreír por ello. Los chicos habían pagado las entradas y ya todos estábamos dentro.
Todos se habían separado y ¡que casualidad! Nos habían dejado solos. Y ya que fue así decidimos pasar el tiempo juntos.
Habíamos subido a las tacitas giratorias, a una montaña rusa y entramos a la "cueva del terror". ¿Recuerdas que casi rompí tu remera cuando, creo que un zombie, se nos apareció de la nada?. Y salimos de ahí riendo hasta que nos faltaba el aire.
Luego fuimos a los puestos chicos, como el de tirarle agua al payaso, o tirar las botellas o encestar la mayor cantidad de pelotas. Recuerdo que te ganaste un oso en ese juego y me lo regalaste, seguro que porque te haría quedar como un marica pero fue un hermoso acto... ¿y sabes que? Aun lo conservo... aun con todo lo que paso, lo conservo.
Y ahora íbamos agarrados de la mano, no sé en que momento había sucedido, pero cuando quise darme cuenta estábamos agarrados de la mano.
Era hora de subir a la rueda de la fortuna, en la fila encontramos a todos otra vez pero nunca nos soltamos. Hasta que dijiste que ya volvías y desapareciste por un momento.
Todos estaban ya entrando y no sabía que hacer...
- Hendricks... ¿por que no haz subido todavía? -llegaste con una bolsa de dulces en la mano-
- Eh... supongo que estaba esperándote -y de repente estaba sonrojada. Dios porqué, desde cuando. -
-Bien, eso esperaba.
- ¡Ustedes dos! ¿Subirán? - preguntó el que controlaba las cosas en ese puesto. Nosotros nos apresuramos a entrar y nos acomodamos en los asientos-
Las vistas desde arriba eran geniales. Se veía la playa, los juegos y una luna tan grande como nunca hubiese visto. Y también estabas tu, mirando todo al rededor.
Era tan injusto que seas tan perfecto.
Luego de un rato en silencio suspiraste notoriamente, haciendo que me volteé a verte.
- Es tan injusto -agarraste un dulce de la bolsa y lo comiste-
- ¿Qué cosa?
- Qué seas tan hermosa, es como si alguien lo hiciera a propósito y no pudiera alejarme de vos...
- ¡James! -dije exasperada - Dios siempre tendremos esta charla. Digo no es que sea fea... no me considero fea pero tampoco soy hermosa.
-Mis amigos dicen lo mismo.
- ¿Que dicen? -de repente pensé que le hablabas de mi a tus amigos-
- Que eres muy linda -te quedaste mirándome fijamente-
-¡Ja! Pues ahí lo tienes, ellos dijeron que soy linda, no hermosa. ..
- Es lo mismo, por Dios.
- James...
Y entonces me besaste inesperadamente... y en ese momento empezaron a lanzar fuegos artificiales. Ese beso fue tan mágico.
- Es tan injusto que no pueda separarme de ti Hendricks..
Agarraste la bolsa que se había caído y sacaste una bolsa de gomitas... Dios.
- Perdon, perdóname por ser tan idiota...
- James Maslow ¿Acaso estas comprándome?
- Tama dijo que esto funcionaría...
- ¡Y valla que funciona! Pero... ¿no era que salías con Megan? -te atragantaste con el dulce y empezaste a toser- Dios, James. Levanta los brazos.
- ¿ Quién dijo eso? -preguntaste luego-
- Nadie, yo los vi. Entraban de la mano al campo de Fútbol -dije haciendo gestos de burla-
Y entonces estabas riendote fuerte y de repente te pusiste serio. James parecías un bipolar.
- ¿Es por eso que llorabas?
- James... yo.. no sé que hacer, eres mi primer relación en años y no se si puedo llamar relación a la primer persona con la que estuve. Se que soy difícil, soy bipolar, histérica... pero dentro de todo es porque no quiero perder... te. Aunque eso hizo que te pierda en un principio.
Bien, te lo había dicho todo. Pero valió la pena, sabes, porque todo lo que sucedió después fue fantástico.
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Y por eso me enamoré
Hayran KurguHey, se que probablemente no leas esta carta, que tal vez alguien la vea, la levante y la lea. Pero se que tu no, no lo harás. Eh decidido que ya es tiempo de despedirme de ti... pero antes te contaré nuestra historia por si... ya sabes, lees esta...