Poison

2.2K 135 19
                                    

Me encontraba frente a la puerta de roble negra y pesada, debía cumplir su castigo con el pocionista... Tomé impulso y antes de poder tocar la puerta una voz grave la recibió....

-"entre" era la profunda voz de su profesor.

La puerta se abrió y entre a mi perdición...

El aroma a hierbabuena y tabaco inundaban el ambiente.

-"siéntese, es una orden"

Sorprendida me acercó a mi profesor.

-"¡He dicho que se siente!... Sin previo aviso siento su áspera mano tomando mi muñeca con fuerza..

-"Déjeme ir" - grité más en el fondo deseaba todo el contacto posible de sus manos sobre mi piel.

-"Aprenderá respetó niña"- me tomó de las muñecas y me besó con hambre; entre sus besos, gruñidos y mordidas sus manos se encontraban en mi espalda y esa zona donde la espalda pierde su nombre y curvatura.

-m....moco...sa.....aprenderá...... A.... Obedecer........ -" sus gruñidos y gemidos graves inundaron la habitación.

Traté de hablar pero su esencia inundó mis sentidos, quería molestarme pero mis instintos no respondían a nada más que tratar de remover su capa y levita.

-"¡Malditos botones!- realmente odiaba ess maldita capa y sus 36 jodidos botones.

-"alto" su voz me hizo detenerme y mirarlo a los ojos.

Me tomó de las muñecas y me aprisiono entre la pared y su cuerpo e Instintivamente subi mis piernas a su cintura para rodearlo y ser levantada entre su torso y la fría pared y su espalda.

Si éste sería el castigo no tendría problema en continuar con el proceso de aprendizaje.

-"maldita.... sabel... otodo....... Deberá aprender respeto y aprenderá con mis..... Nada...... Nada.... ORTODOXOS......." -

sus gruñidos y mis gemidos eran el eco de la noche.......

Pronto el aire nos fue haciendo falta y se separó bruscamente de mi

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pronto el aire nos fue haciendo falta y se separó bruscamente de mi.

Me volvió con mi pecho contra l pared y sin ningún tipo de aviso sus ásperas manos se encontraban en mi entrepierna.

-"¿obedecerá ante su profesor? "....

No pude articular más que un intento de no gemir por la expectativa.

Se acercó a mi oído con malicia y en un susurró grave con su voz ronca

-"Párese que por fin he decifrado como hacer que la pequeña sabelotodo agote su verborrea" -

-"Que desea mi pequeña?

De.... De... Deseo.........


Journal noirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora