La Gran Guerra

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 Ya después de haber hablado con mis tropas, me decidí en montarme en unas de las camionetas que trasportaba licor, el juego de estrategia son una de las cosas que me enseño Don paulo y sé que jugaría el mismo juego, somos asesinos, nuestra ventaja está en un plan.

Mientras íbamos de camino a la ciudad de los bandidos y yo estaba pensando en el tiempo que le había dedicado a mi habilidad, había estado practicando a causa de los inconvenientes que estuve sufriendo con mis poderes. Parece ser que ya se había estabilizado, pero no sé qué podría pasar.

Varios autobuses habían ido conmigo en primera fila, le dije a Tom que yo comandaría la primera fila y él se encargaría de la retaguardia, si lográbamos entrar la guerra empezaría.

Yo abrir la puerta y de un salto salí de él tomando la forma de un fénix, me acerque a la puerta de la ciudad que estaban obviamente cerradas, con una explosión de ceniza y humo todo se volvió nublado. Mis camines entraron con máscaras de humo empezaron a salir con armas de fuego y a disparar a lo largo de la ciudad de los bandidos. Ellos ya estaban esperándonos allí y fueron acribillados ya que su visión era nula. La nuestra había sido entrenada con anticipación, gracias a las máscaras y al entrenamiento, la ventaja es nuestra... por ahora.

Cuando pensábamos que teníamos la ventaja se acercan cinco grifos, que venían con soldados en sus espaldas, eran de elite los cinco que podían comandar grifos era los soldados especiales de Paulo. Con las alas los grifos estaban espantando el humo, dejándonos al descubierto. Yo debía seguir creando humo, si nos veían estaríamos en problemas. Pero alguien debía encargarse de ellos...

De repente una de los locales que estaba allí cerca exploto, era la segunda fase de nuestro plan...

Yo había hablado con Tom y le había mencionado todos los escondites que tenía la ciudad de los bandidos. Gracias a que era una ciudad de ladrones había varios huecos donde cualquier persona podía establecerse y robar, yo me había criado en estas calles y conocía a cada una de esas entradas secretas.

Y así como hizo uno, varios de los mercados de allí empezaron a explotar y de allí salían mis soldados con espadas, dagas y armas de fuego. Ahora las fuerzas de paulo estaban siendo atacadas por todos los lados y con nuestra fuerza en primera fila, era hora de atacar a la casa de paulo...

Mis fuerzas iban avanzando bastante bien, nos habríamos paso en un montón de personas. Tom iba a mi lado, pero salió una de las fuerzas más grandes de don paulo. Los 5 grifos.

Estos eran unos luchadores a espadas que eran capaces de montarse en los hipogrifos y manejarlos tras las órdenes del Don. Parece que vendrá con todo, ellos era fuertes, los conocía, podía derrotar a uno o dos, pero lo cinco al mismo tiempo sería una proeza. Ellos eran diestros y muy disciplinados, no atacan por atacar, cada ataque estaba coordinado y preparado. En un momento acabaron con 20 de mis hombres...

- Tom, lánzame. –dije mientras hacia un plan para atacar-

- Entendido –dijo ton sin resonar-

Me lanzo con el nuevo brazo que había conseguido. Me dirigí directo a uno de ellos y como era de costumbre el resto me vio y lo protegió. Pero mi técnica era sencilla.

Cuando ellos pusieron las espadas para proteger a su compañero, yo me cenizas y atravesé las espadas. Justo cuando tenía atrás al grifo que iba a atacar, regrese a mi estado normal y con movimiento giratorio le corte la cabeza con mi hacha.

Mi plan era un existo, ya solo quedaban cuatro...

Dos de ellos vinieron a atacarme, yo salte y empezaron a atacarme mientras yo desviaba sus golpes con mi hacha. Era incesante ya que ellos eran veloces y precisos

Mientras yo recibía ataque tras ataque, Tom le dio tiempo de llegar a la escena y ataco de una vez a uno de los que estaban atacándome y se puso a mi espalda para respaldarme.

- Es hora de que hagamos esta batalla más pareja ¿no? –le dije a Tom con una sonrisa-

- Si

- Siempre tan inexpresivo –reí antes de levantar mi hacha-

Tome mi hacha y con mi dedo que parecía un fosforo, lo pase levemente por los dos filos de mi hacha y la puse a mi frente. La agarre con fuerza y su filo se volvió de fuego haciendo, haciendo de su alcance más largo y más peligroso.

Tom se puso como haciendo fuerza con su brazo y este empezó a hacerse más grande... este creció como el triple y unas raíces salieron de su hombro y se colocaron en sus dedos como si fueran garras bastante afiladas.

- ¡¡Empecemos!! X2

Yo fui contra dos mientras que Tom iba por los dos que faltaban. Yo me adelante con mis pies prendidos en llamas. Mi cuerpo estaba cambiando, mi entrenamiento iba avanzando y mi control de este poder se hacía cada vez mejor. Se notaba en mi cuerpo ya que de este parecía como si estuviera ligado con llamas que salían de varias partes de mi espalda y brazos.

Tom se abalanzo sobre uno con un golpe de su brazo, pero este lo esquivo. El impacto de su brazo había dejado un cráter en el suelo. Luego el estiro las ramas de su brazo y le agarro una pata al hipogrifo, el otro vino a por él, pero con un salto dando vueltas lo esquivo, cuando piso el suelo con su increíble brazo jalo Al hipogrifo haciendo que su jinete se callera. El hipogrifo huyo dejando a su jinete solo.

Yo me fui contra uno de ellos, pero el otro se metió en medio. Yo lo esquive saltándolo con un movimiento giratorio, lo cual él se puso se puso a la guardia por detrás y choco sus espadas con mi hacha. El otro vino por un costado y también desvié su ataque. Los dos coordinados empezaron a atacarme a lo cual solo podía esquivarlo ya que los golpes eran tan consecutivos que no tenía tiempo para pensar en algún movimiento. Hasta que con un movimiento en el aire que hice después de un choque y con la pierna prendida en fuego le di una patada al hipogrifo que hizo que tanto el cómo su jinete perdieran el control de los ataques.

El otro venia hacia mí con una furia y velocidad tremenda.

Pobres no saben que no solo dependo de mi habilidad como fénix, también mis atributos físicos son formidables.

Tome mi hacha que estaba encendida en llamas al igual que mis pies y me dirigí a toda velocidad hacia el jinete. Ambos cruzamos el uno con el otro haciendo ataque a gran velocidad.

Guarde mi hacha solo para esperar como al hipogrifo se le caían las alas y las patas por mi cortes.

- Solo queda uno. X2 

El Hermano Del HéroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora