Narra ___.-
-¡Alto ahí!.- gritó una voz masculina detrás de mí. Esa voz.
No, no podía ser él.
¿O….sí?
Me giré lentamente, con mis manos en una posición ventajosa por si debía disparar rápidamente una flecha. Mientras me giraba, parecía que el tiempo se había detenido, todo era lento, lo único que iba a una memorable velocidad era mi ritmo cardiaco junto con mi respiración. Mi pecho subía y bajaba al compás de mis latidos. Mis pies se movían sobre las hojas, haciéndolas crujir al quebrarse.
Nunca había estado en una situación como esta. Me refiero a ser la líder de un grupo, en medio de un apocalipsis zombie, con el refugio ideal frente a mis narices y siendo emboscada por, probablemente, otro grupo. Todo esto era algo nuevo para mí, pero si había aprendido algo en todo este tiempo, es que también hay gente buena. Tal vez son otro grupo en busca de refugio, tal vez no, pero estoy a punto de averiguarlo.
Mis pies terminan de hacer una media vuelta. Mis brazos se acomodan rápidamente, una mano sosteniendo una flecha sobre el arco, la otra sosteniendo el arco. Mi mirada estaba plantada en la pistola que llevaba un hombre.
Luego miré su rostro.
Mi boca se abrió, y no parecía que fuera a cerrarse. Todo mi cuerpo se tensó como un tronco, mientras todos los pelos se me ponían de punta. Uno de mis ojos tuvo un pequeño tic nervioso, pero logré controlarlo. Estaba paralizada.
Miré el rostro del hombre que estaba frente a mí. No era mucha la diferencia entre su expresión y la mía. Tal vez, él aún me recordaba como yo a él. Bajé mis brazos, alejando toda amenaza contra ellos. Miré a mi tío, y él no apartaba la mirada de tipo ni por un segundo. Decidí que ya era el momento de hablar.
Pero, ¿qué rayos diría? No importa, porque Carl ya me había ganado de mano.
(Momento de alegría extrema de las lectoras *u*)
-No puedes ser tú.- dijo, sin dejar de apuntarme con la pistola. Se fue acercando poco a poco, con su mirada fija en mí.
-…..c…Carl?.- tartamudeé. Miré su par de ojos. Seguían igual de hermosos, más azules que el cielo despejado más bonito, solo que estaba rodeados de unas oscuras ojeras, como sie fuera una metáfora, “todo lo bonito tiene su lado oscuro” o algo así. Olvidé mencionar que, en situaciones como esta, mi imaginación no tiene límite alguno, por eso se me ocurren estas cosas.
Él hizo una mueca, como si intentara sonreír. Miró a todo el grupo de personas que se encontraban detrás de él, que olvidé mencionar que la mayoría también nos apuntaban con sus armas, y les ordenó que bajaran las armas.
-Bajen lar armas, son buena gente.- dijo, y todo el grupo bajo sus brazos, que antes se encontraban tensos sosteniendo lo que probablemente hubiera sido nuestra muerte.
-____, es una coincidencia volver a verte.- dijo Carl, acercándose más a mí. Ambos estrechamos las manos, y pude sentir la firmeza de sus brazos. Dios, hace cuánto que no la sentía. Se sentía tan genial.
Mi tío se acercó a nosotros, y en cuanto Carl notó su presencia, esta vez ya sonrió decentemente.
-No puedo creerlo.- dijo Carl con una sonrisa, y estrechó la mano de mi tío. Cabe admitir que Daryl aún no se veía muy confianzudo.
-Yo no puedo creer que sigas vivo, idiota.- dijo Daryl, con una sonrisa. Los tres reímos. De la nada, sentí que algo rodeaba mi pierna. Miré hacia abajo y pude ver los brazos de Destiny abrazándome la rodilla. Alcé a la pequeña en mis brazos con una sonrisa.
-Quién es mami?.- dijo, para cambiar su mirada de la mía a la de Carl. Él miró a la pequeña por unos segundos. Luego se tapó la boca.
-Ella es Destiny?.- preguntó Carl. Yo sonreí y asentí.
-Cómo sabe mi nombre?.- preguntó la pequeña.-
-Es una larga historia.- respondió mi tío. Miré a Carl y noté lo estupefacto que se encontraba.
Hubo algunos segundos de silencio, hasta que Carl habló.
-Y, eres la líder de este grupo?- preguntó.
-Sí, pero Daryl ayuda bastante.- respondí.-
-Supongo entonces que deberé hablar con ustedes, porque yo soy el líder de este grupo.- dijo. Miré a Daryl y luego a Carl.
-Iremos a hablar con el líder del otro grupo.- dijo Daryl a nuestro grupo.- quédense aquí, y si quieres socialicen también.-
Yo dejé a Destiny en el suelo y ella corrió con sus amigos. Miré a Carl y los tres nos alejamos del lugar. Yo empecé la conversación.
-Ah pasado mucho tiempo…- dije.
-Sí, y veo que no has cambiado en nada. Aún conservas tu arco!.- dijo Carl, mirándome de arriba para abajo. Me sentí algo incómoda.
-Bien, Carl. ¿De qué querías que habláramos?.- preguntó Daryl, cortando toda charla amistosa a una completamente seria. Carl aclaró su garganta y, mientras caminábamos, comenzó a hablar.
-Hace días que buscamos comida, pero la suerte no ha estado de nuestro lado en lo absoluto. Todos están muy débiles, y nuestra única defensa son esas armas, las cuales no tienen mucha munición. Me cuesta decir que estamos muriendo de hambre. Hace cuatro días que sólo comemos….dios, ni que eso fuera comida.- dijo, agachando la cabeza.
-Nosotros estamos igual, pero en otra forma. Buscamos refugio. Hace días que caminamos por el bosque en busca de él. Por suerte encontramos esa biblioteca.- dije.- comida tenemos, pero podíamos estar mejor.- dije.- armas, olvídalo, sólo estamos yo y mi tío con nuestras flechas. No tenemos munición.
-Tengo una idea.- dijo Carl.- hagamos un intercambio. Ustedes nos dan comida, nosotros munición.- dijo Carl.
-Carl, creo que ____ aclaró muy bien que nuestras provisiones de comida no son las mejores. Además, con lo que tenemos podemos defendernos perfectamente. Lo siento.- aunque me cueste decirlo, concordaba con mi tío.-
-Por favor.- rogó Carl.- se los ruego. Estamos muriendo.- repitió.
-Lo siento.- dije.- tendrán que conseguir su propia comida.-dije, con un tono de pena. Carl se quedó callado por unos segundos.
-Soy el líder de ese grupo, ____, por lo cual ellos son mi responsabilidad. Tu debes entenderme. Y haré cualquier cosa por algo de comida, ¿entiendes eso? Tú lo harías por tu grupo. Y sabes que en el estándar de cualquier cosa, matarlos entra perfectamente, pero sabes que no me gustaría hacer eso. Hay dos caminos, chicos, el difícil y el fácil. Ustedes eligen por cual ir.- declaró Carl, amenazándonos a muerte. Nunca imaginé que él fuera capaz de eso. Pero entiendo en qué situación se encuentra.- recuerden que somos nosotros los que tenemos las armas.- agregó, sin apartar la mirada de nosotros. La cosa se había puesto seria en cuestión de segundos.
Miré a mi tío.
-Ellos tienen mucha ventaja por sobre nosotros.- le dije a mi tío.-
-Eso es cierto.- nos miramos por un tiempo, hasta que Carl volvió a hablar.
-Hagamos un trato, ____. Y es simple, tómalo o déjalo. Tú decides si mueren o no.
El destino de todos estaba en mis manos.
APARECIÓ CARL MADAFAKAS! Y sí, sé que tal vez no es la forma en que ustedes quisieran, pero bueno .-. recuerden que esto recién empieza :D que pensaron del episodio anterior de TWD? Yo creo que Beth es muy humilde, piensa en ti pendeja! Okno .-. jaja saludos, Mak :)