x

1.8K 195 26
                                    

—...¿Tomura? —murmuró Izuku, aquel chico de mirada intensa tenía un nombre bastante interesante y hasta un punto, bonito.

El peli celeste escuchó su susurro y simplemente sonrió. Izuku estuvo a punto de decir algo más hasta que los gritos de Katsuki cesaron y eso hizo que volteara a mirar a su amigo.

—¿Me estás escuchando, Deku?

Tan solo su voz hizo que el miedo recorriera a Izuku, además de que su amigo tenía una mueca de enojo bastante exagerada, parecía que en cualquier momento se saldría de control y explotaría de ira.

—Uuh... Claro que sí —dijo y sonrió a medias.

—Entonces, ¿qué fue lo último que dije, eh? —preguntó Katsuki con una ceja alzada.

—Que odias a mi novio...

Izuku quiso golpearse después de responder eso, pero al ver como su amigo se calmaba para luego volver a gritar hizo que suspirara, al parecer había respondido de manera correcta. Por un momento intentó comprender los gritos de su amigo pero se le hacía simplemente imposible, su mirada ya no podía quitarse del peli celeste y toda su atención estaba centrada en él, sabía que su amigo gritaba y gritaba pero sus gritos parecían estar de fondo nada más, imposibles de ser escuchados realmente.

Parecía que estaba fuera de su control dejar de poner su atención en el chico llamado Tomura, pues no importaba desde qué lado se mirase, el chico llamaba muchísimo la atención, o al menos así eran las cosas para él.

Tomura era muy consciente de la mirada indisimulada que mantenía el pecoso en él, y eso lo hacía sentirse hasta un punto bien, aunque a decir verdad, se sentía demasiado bien y con inmensas ganas de devolverle la mirada, porque estaba fuera de sus manos la manera tan increíble que ese chico había acaparado sus pensamientos, de hecho, era tal manera que ni siquiera sabía cómo poner un tema de conversación porque sintió que todo se le había olvidado; por primera vez en años se sintió tan nervioso, que estaba seguro que su aura segura y temible se estaba desvaneciendo entre más lo mirabas esas preciosas joyas esmeraldas.

Misteriosamente, o al menos para Izuku porque él estaba perdido mirando al peli celeste, el bar se sumió en un silencio incómodo. O eso fue hasta que su mejor amiga habló.

—Mira Katsuki-kun*, entiendo que quieras pelear con el estúpido de Chisaki, pero primero hay que pensar en las consecuencias y bueno, elaborar un plan para sacarlo completamente de la vida de Deku-kun ¿no? —dijo, sonando tan sensata y tan sabia que el rubio tan solo pudo desviar la mirada mientras golpeaba el interior de su mejilla con la lengua.

Todos sabían que esa era la manera de Katsuki para darle la razón, ya que era demasiado orgulloso como para decirlo en voz alta.

Aunque con las palabras de la castaña, Izuku se removió incómodo en su asiento, sintió un terrible pánico cuando se dio cuenta de que por primera vez en su vida tenía su mente dividida en cuanto a estas situaciones; había una gran parte de su cerebro que le decía que debía defender a su novio como siempre hace, pero la otra simplemente quería encogerse en el asiento para ver si así podía desaparecer ante los ojos de Tomura, ya que la pena le carcomía al verse en una situación amorosa tan penosa.

Pero su novio era Chisaki, el chico que más amaba y que lo cuidaba era él, así que su deber era defenderlo.

—C-chicos, ya sé qu-

Iba a defender a Kai hasta que Uraraka lo interrumpió.

—Mira, Deku-kun, todos nosotros sabemos muy bien que tú dices amarlo y bueno, todas esas cosas, así que no gastes tu dulce voz en eso —dijo para luego suspirar y darle una gran sonrisa. —Ya vas a ver que cuando abras los ojos te darás cuenta del imbécil de novio que tienes.

Al escucharla, Izuku quiso que la tierra se lo tragase porque vio como Tomura lo miraba curioso, además que sabía que sus amigos ya no lo escucharían.

—Esto se está demorando demasiado, Izuku ya lleva unas cuantas horas aquí y ese tipo debe estar fuera de control, pongamos manos a la obra —dijo Todoroki quien se había mantenido callado.

—Lo que dijo el bastardo mitad-mitad.



































































































































.
he vuelto, de primeras quiero decir que lamento no subir nada como en dos meses pero estuve tan estresada que ni siquiera me hallaba escribiendo, estoy retomando mis historias hasta ahora y comenzaré actualizando esta.

*puse el asterisco porque no recuerdo como llama uraraka a bakugō, me encantaría que me dijeran si así está bien.

Hace más de un año que comencé a escribir esta historia, simplemente quería una historia tomudeku porque antes no había casi, y pues le quise agregar chisadeku también; realmente no se imaginan la emoción que sentí con mis primeros votos y comentarios que pedían que siguiera, y así lo hice, lastimosamente me perdí a la mitad del camino y borré todo para iniciar de nuevo teniendo como base el prólogo y mis ganas de seguir esta historia, aunque también tenía a las personitas que decidieron seguir la historia a pesar de que había cambiado totalmente, lo cual agradezco de corazón ♡

y... ¡me encantaría que comentaran! he visto que mucahs personas solo votan o son lectores fantasmas, no muerdo o algo así, sus comentarios me llenan el alma y adoro leerlos así que no duden en comentar lo que quieran ♡

hasta la próximaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

;;121219

Querido IzukuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora