Vi como Sherlock me abrazaba, llorando e implorando mi perdón. Lo veía desbastado, tenia unas profundas ojeras, y sus rulos estaban despeinados. Se veía mal, la tristeza lo consumía y yo me arrepentí de enojarme de tal manera con él.
Sherlock estaba apoyado en la abertura de mi cuello, claramente estaba un poco encorvado gracias a la diferencia de altura que los dos tenemos. Mientras abrazaba al hombre que tanto amaba, mire al pasillo intentando que nadie nos estuviese observando. Le susurré que pasará a la habitación, una vez adentro lo obligue a que me mirará. No resistí las ganas de besarlo y así lo hice, fue un beso corto y suave, trate sus labios como si fuesen la mas delicada muñeca.
Cuando nos separamos lo mire nuevamente, como un hombre como él fue capaz de mentir, haciendo creer a todos que estaba muerto. Y que todos supiesen que no era así menos yo. Lo mire y le propine un golpe seco en su quijada.
_¿Como fuiste capaz? ¿Vos sabes cuanta tristeza, cuantas pesadillas, cuanto sufrimiento pase por tu culpa? Si me hubieras dicho podría haber sido diferente, pero no, como siempre vas por tu cuenta, y yo como todo un idiota te sigo a cualquier lado, aunque sea el fin del mundo yo lo hago. Pero vos no fuiste capaz de pensar en como me sentía yo creyendo que habías dejado este mundo._ estaba enojado y feliz a la vez. Tenerlo de vuelta me hacia sentir bien pero algo me decía que me volvería a separar de él.
Sherlock de la nada empezó a reír, primero suavemente controlando la risa, pero después de un rato dejo de hacerlo riéndo a carcajadas.
_Hasta intentando parecer enojado, sos tierno._ dijo y me volvió a abrazar. _Te amo ¿Lo sabes?, te amo, te amo, te amo._ con cada palabra él me abrazaba y me acercaba aun mas. _Ya no se como decirte que me perdones, y quizá jamas lo hagas. Pero no me importa, aunque sea por esta noche te voy a poder tener cerca otra vez._ esta vez se alejo de mi y vi como tenia un amplia sonrisa. A pesar de que todavía notaba como su cuerpo estaba tenso.
_¿Me puedo quedar esta noche....?_ Por primera vez note algo de incomodidad y timidez en su voz, muy diferente a su común seriedad.
_Imploras mi perdón, a la cual ni siquiera has esperado a que te de una respuesta concreta. Todavía me mientes sabiendo que mañana ya no estarás y no nos vamos a ver por mucho tiempo. ¿Y pretendes que te deje dormir conmigo? Te detesto, pero te extraño y te necesito, si que voy a dejar esto de lado, te voy a dejar dormir. Pero solo dormir, ¿Entendido?_ dije seriamente esperando una respuesta rápida de parte del dueño de los ojos azules.
_¿Enserio? Esta bien solo dormir_ dijo en forma de reprocho, poniendo en blanco sus azules ojos. Había un tono muy alegre en su mirada, que lo hacia tener un brillo distinto en su aspecto.
Vi como empezó a sacarse las prendas, quedando solo con el pantalón oscuro que traía. Yo volví a agarrar el violín que había dejado en el sillón al fondo de la habitación. Antes de que Sherlock apareciera, estaba tocando una canción que había preparado hace algún tiempo, era suave y delicada, cada nota era parte de la otra y se conectaban entre si, formaban una melodía relajante.
Sherlock acostado desde la cama escuchaba con los ojos cerrados. Tarareaba por lo bajo, y pasados unos minutos dejo de hacerlo, vi como se quedo dormido. Realmente costo moverlo cuando deje de tocar y me dispuse a intentar dormir. Era pesado a pesar de estar en forma, cuando pude moverlo y acostarme, él me abrazo y pasamos la noche en esta posición.
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Soldado En Guerra
Historical FictionUn soldado que a lo largo de su historia conocerá y atravesara diversas situaciones que lo llevaran a su pasado y al futuro. Conocerá al amor que lo cambiará todo en él, y su pasado oscuro con el que lucha. Encontrará de vuelta a su pasado ¿Lo permi...