Escapando del pasado.

Capítulo 15

Tadashi reía con suavidad mientras se tallaba un ojo con su puño.

Estaban sentados en la terraza del restaurante al que habían pedido asistir. Cada uno tenía su platillo diferente, Tadasji una montaña pequeña de wafles con frutos rojos, Elsa con un omelette de champiñones y un hot cake miniatura y Jack unos huevos revueltos con salchicha.

-Nunca antes me había hecho reír tanto mi hermano desde que resbaló con sus propios juguetes.

-¿Qué edad tiene tu hermano? -preguntó Elsa con una sonrisa mientras apoyaba su mentón sobre su mano recargada a la mesa.

-Catorce, en unos meses cumple los quince.

Siguieron almorzando yéndose a pláticas sobre cómo se encontraba su tía y su otro primo de Jack. La platinada se puso en pie para ir a los baños.

-Elsa -Le llamó el peliblanco - ¿Quieres que te.....

-El baño es esa puerta -La mujer le señaló – Y es sólo un baño, tranquilo.

Jack no dijo nada más, le siguió con la mirada hacia el baño y de ahí no lo despegaba.

-Estoy feliz por ti, Jack -Tadashi le sonrió con ternura.

-¿Eh? ¿Por qué? -Jack le preguntó sin mirarle aún.

-¿Cómo que por qué? Por Elsa -Tadashi le habló con obviedad – Me alegra que no te hayas encerrado en el pasado.

El ojiazul esta vez tuvo que mirarlo a los ojos. Descubrió que su primo le miró con cariño y eso estaba mal para Jack, tenía que decirle la verdad, que Elsa sólo está en su casa por trabajo y que es una farsa su matrimonio por el hecho de protegerla con el apellido "Frost".

Pero no podía arriesgarlo.

-Gracias -Contestó a secas devolviendo su mirada a la puerta.

-Es muy linda persona, no te perdonaré que no me hablaras de ella antes.

-No lo hagas -Contestó Jack.

-Veo que no son muy exhibicionistas como otras parejas.

-¿De qué hablas? -Jack le miró con rareza.

-No digo que sea malo, pero a comparación a cómo eras con Tooth, no dejabas de besarla cada vez que salían conmigo o con nuestra prima igual – Tadashi miró hacia arriba dudoso -No me imagino cómo eran a solas.

-Simplemente no te lo imagines -Jack le miró con seriedad y resaltando su mentón con un gesto de que no se metiera en sus asuntos.

-Como sea, con Elsa eres más discreto, creo yo. No le andas repartiendo besos a cada rato ni abrazando.

El peliblanco recordó cuando la platinada le había pedido su mano y un beso en su mejilla, y claro que debía dárselo frente a otros, a los ojos de los demás debían ser una pareja casada. Elsa salió del baño para encaminarse a la mesa de nuevo.

Cuando terminaron el desayuno, salieron al auto de peliblanco a donde subió Elsa mientras que Tadashi subió a su motocicleta que trajo en todo el viaje del aeropuerto a la ciudad.

Estando de regreso a casa, el pelinegro dejó algunas cosas y tomó otras para encaminarse ahora hacia Guardianes.

Por lo tanto, Jack se quedó en casa junto a la platinada. Ella había subido antes y Jack le siguió después de tomar unas chamarras para devolverlas a su habitación.

Justo miró a la platinada sentada en el sofá de la habitación de Jack.

-Sólo acomodaré unas cosas -Elsa dijo mientras juntaba algunas de sus pertenecías en una mochila.