He is mine [KaiSoo] [SooKai]

5.Frustración

Cuando JongIn se marcha sus amigos continúan hablando. Chanyeol y Baekhyun no tardan en comenzar a suspirar y hablar de lo genial que es.

— JongIn debe ser algo dentro de la facultad ¿no?— pregunta Chanyeol.

KyungSoo sudo frío por un momento. Sin JongIn ahí, Lay podría soltar la lengua demás. Quiere correr tras su novio, besarlo y abrazarlo rogándole que nunca más vuelva a provocarlo de tal manera, pero no puede irse de ahí por miedo, miedo de que descubran su secreto.

— En realidad sí— admite Lay—, pero JongIn es fiel...

— ¿Fiel?— repite Baekhyun bastante interesado.— ¿Sale con alguna chica?

— Él ve a alguien, sí, pero no me meto en su vida privada. Hay cosas que solo le conciernen y no se puede evitar, aunque vaya por ahí rechazando a todas, excusándose con una sonrisa— dice el amigo de su novio.

Siempre supo que podía confiar en Lay pero también notaba lo poco conforme que estaba por ocultar a JongIn.

— ¿Por que no soy así de guapo?— reprocha Baekhyun con un suspiro de por medio.

— Creeme que no te gustaría, ser así y tener ese cuerpo atraerá no solo a las chicas...— susurra JongDae.

Observa a Sehun asentir dándole su voto por lo dicho. Ni siquiera le da tiempo de reprochar sus palabras, mentalmente, claro. Inclusive puede ver dibujada una sonrisa en el rostro de Lay, mostrando un pequeño hoyuelo.

— Creo que también debería irme— pronuncia el chico—. Sehun, te veré después; chicos, KyungSoo.

Se levanta y todos lo ven marcharse.

— ¿Por que solo se despidió de ti?— se queja Chanyeol.

— Cuidado, KyungSoo. Con esa cara estoy seguro que le tira al otro bando— se burla JongDae. Y esta vez ni Sehun lo encuentra gracioso.

KyungSoo sabe que no lo dice de esa forma, JongDae siempre ha sido el tipo de chico que disfruta molestar a los demás, sea o no sea un tema sensible.

— Bueno, con que no seas un acos...— Baekhyun trata de que el tema se olvide un poco.

— Ahórrate tus palabras, Baek— lo interrumpe sorprendiéndose a sí mismo.

Nunca quiso expresarse de esa manera pero le aterraba que su amigo ya lo supiera y estuviera solo tratando de protegerlo un poco. Preferiría callarlo antes de averiguar si lo sabia algo no.

— Tranquilo, KyungSoo— Chanyeol trata de calmarlo colocando una mano sobre su hombro. Gran error.

— ¡Aléjate!— gritó de repente incapaz de detenerse un segundo y meditar un poco.

Sehun y JongDae hacen rechinar su silla al levantarse con brusquedad en un intento de por segunda vez tocarlo.

— ¡¿Hey, qué sucede contigo?!— pregunta Sehun comenzando a preocuparse.

— ¡Ustedes son mi problema, ustedes dos!— gritó. Manteniendo su dedo firme en el aire acusándolos.

Ha llamado la atención de los presentes. KyungSoo no quería gritarles mucho menos culparlos de algo que solo son inseguridades suyas. Toma su mochila y dejándola descansar en su hombro derecho sale del lugar dejando en completo shock y silencio a sus amigos. Cuando esta fuera el viento golpea su rostro, sabe que hizo muchas cosas mal, empezando por tener miedo del qué dirán. 

Se siente frustrado, aprieta sus puños con fuerza tensando su cuerpo por completo, cuando unos fuertes brazos lo sujetan por detrás. Reconocería esa fragancia donde fuese, ese calor que solo pueden brindarle él.

—Perdón— le susurra a su novio.

— Eres la persona más extraña que conozco y aun así te amo.— JongIn lo ha girado para secarle solo el comienzo de algunas lágrimas que lograron escaparse.— ¿Por qué lloras, cariño?— pregunta con dulzura.

Algunos murmullos son escuchados a su alrededor. Trata de zafarse del agarre pero es inútil, el otro lo mantiene cautivo sin siquiera parecer hacer un esfuerzo.

Hunde su rostro en el cuello de JongIn donde le gusta besarlo cuando están solos y como no puede hacerlo ahora se conforma con descansar en esa posición. Sorbe el fluido nasal que está apunto de salir de su nariz y se despega de JongIn con dificultad.

— Sé que soy malo contigo— susurra.

— No lo eres, bebé— JongIn lo contradice acariciándole el cabello.

— ¿Por qué continuas conmigo, JongIn?— pregunta con dificultad.

El moreno lo suelta por fin, tomando dos pasos de distancia entre sus cuerpos. Un frío le recorre por la espalda. Lo observa meter su mano a los bolsillos de su pantalón sacando papel ofreciéndose como buen novio. KyungSoo lo toma y pasándolo cuidadosamente por su rostro tratando de arreglar un poquito el desastre que es.

—Me gustas-— JongIn susurró cubriéndose el rostro tratando de que solo su novio vea lo que sus labios pronuncian.

Es algo tonto, no hay nadie que esté prestando la suficientemente atención a ellos, solo murmuran cosas pero no se tienen su camino, eso lo tranquiliza un poco más.

—Me encantas—  vuelve a decir seguido de una risa ligera— ¿Y sabes qué? Me amas de vuelta, por eso estamos juntos. Soy feliz cuando estoy contigo y espero que tú también lo seas...

— Lo soy— se apresura a decir.

— ¿Ves? No es difícil, cariño— JongIn acorta la distancia y le da un ligero toque a sus labios, primero estampandolos sin moverse, acoplándose a su respiración para después morderle ligeramente el labio inferior ajeno.

Para su sorpresa KyungSoo no se aparta y JongIn toma eso como una buena señal, así que lo besa por completo. De un momento a otro el más bajo toma a JongIn del cuello atrayéndolo hacia él.

Fue un completo idiota, esperando entre semana hasta la tarde-noche por un beso cuando siempre pudo hacerlo a cualquier hora del día.

JongIn separa sus labios con pesar.

— Bebé, no hagas nada de lo que puedas estar preocupado mañana— murmura.

Niega bruscamente pero sabe que JongIn tiene razón. Aún en los pasillos de la universidad mantienen su distancia. Su novio lleva su mochila, por petición del otro. KyungSoo no tuvo el valor de negarle eso también.

— Cuando tengamos un pie fuera de la universidad y estemos lo suficientemente lejos me comeré esos hermosos labios tuyos...— le había susurrado hace algunos minutos.

Se avergonzó de solo imaginarlo. A pesar de llevar saliendo bastante tiempo, nunca habían intimado porque ¡Oh, si! JongIn también fue comprensivo en eso. Estuvieron muchos meses solo con besos y recientemente habían avanzado a tocarse el cuerpo. Hace algunas semanas que experimentaron con eso y de solo pensarlo KyungSoo rogaba que su casa estuviera vacía solo por esta tarde.

Mantenía sus pensamientos en eso cuando pasa al lado de los auditorios, esos que casualmente están vacíos ahora. Le da ligeros jalones a la camisa de JongIn para llamar su atención y señala la puerta.

— No creo que haya algún seminario en este momento, bebé— habla no entendiendo su deseo.

Está demasiado avergonzado para decirlo en voz alta así que asegurándose que nadie esté caminando por el pasillo se acerca a la puerta, sonríe cuando esta se abre y jala a JongIn obligándolo a entrar cerrando la puerta de un golpe.