Hombre rico, Chico pobre【TodoKiri】

Capítulo 11

Kirishima suspiró, había estado todo el día en el departamento de Todoroki sin nada que hacer, había terminado de limpiar y acomodar todo más rápido de lo que pensó, incluso había preparado la cena y varios postres. 

Se sentía deprimido. 

Extrañaba a Bakugō pero de solo recordar como lo había tratado la última vez que lo vio quiso llorar. Detestaba llorar, pero no porque le pareciera algo malo, sino porque no quería que al llegar el bicolor le preguntara el porqué de su llanto. 

—Debo ser un idiota muy grande. 

Se recostó en el sofá boca arriba y acarició su vientre, podía notar que estaba algo abultado, pero no demasiado. 

—Oye, pequeña roca, ¿Tú crees que tu padre es un idiota cobarde? —Bueno no era como si el bebé fuera a responder de todas maneras. —No soy nada masculino. La cobardía no es algo que sea masculino. 

Probablemente Bakugō estaría de lo mejor ahora que ya no tenía que cuidarlo. Tal vez hasta se habría conseguido una novia, sabía que el rubio cenizo había rechazado miles de chicas y chicos por culpa suya, por tener que cuidarlo Bakugō había perdido oportunidades de ser feliz con alguien que lo amará.

Kirishima amaba a su amigo, era como su hermano.

(JAJAJJA pero Bakugō no te quiere como amigo, creí que ya te lo había dicho capitulos atrás xD) 

La puerta del departamento se abrió y Todoroki dejó sus zapatos en la entrada para ponerse las pantuflas y dejar el portafolio en la mesa junto a las llaves.

—¿Todo bien? —Le preguntó cuando vio su estado deprimente. 

—Sí —Se levantó del sofá y se acercó al bicolor para ayudarle a quitarse el saco y botarlo a la ropa sucia. —Sólo pensaba en un amigo. 

—¿El chico rubio? —Todoroki se quitó la corbata y desabrochó su camisa. —Creo recordarlo, trabaja en la cafetería cerca de la empresa. 

—El probablemente no quiera verme. 

—Si es tu amigo ¿Por qué no hacer el intento de reconciliarse? 

—Tengo miedo. 

—¿De qué? 

Kirishima suspiró, era difícil decirlo, se quedó callado por tal vez quince minutos pero Todoroki no hizo nada para presionarlo a hablar.

—Ah, de que rechace verme. —Respondió. 

—No lo sabrás hasta que lo intentes. —El bicolor se sentó en el sofá y se recostó aún mirando al pelirrojo. —El que no arriesga no gana. 

Kirishima asintió, de alguna manera el mayor lograba que volviera a tener confianza en sí mismo. 

—Gracias. —Dijo. 

Todoroki sólo asintió y cerró los ojos, estaba cansado, su viejo le había fastidiado todo el día con sus gritos.

—Voy a servirte la cena, ya vengo. —Dicho esto el pelirrojo se fue a la cocina para tiempo después volver con dos platos de comida, luego fue por dos vasos y una jarra con jugo de naranja. 

—Gracias.

Ninguno dijo nada durante el tiempo que duró la comida y una vez que terminaron de cenar el bicolor se levantó y se marchó a su habitación.

Kirishima limpió todo y una vez que terminó pensó en darse una ducha rápida para dormir mejor. 

Así que fue a su habitación buscó su pijama y se desvistió, pero cuando estaba a punto de abrir la puerta del baño está se abrió mostrando a un hombre de cabello Bicolor medio desnudo y algo mojado.